Una semana más nos reunimos para dejar que nuestros ojitos disfruten de la belleza del amor en el mundo Juliana y, niñas, dejen que se abran bien… porque queda poquito por delanteeee… ayysssss… qué bonito y qué poco dura siempre… en fin… En sus marcas, listas, yaaaaaa…

La semana pasada dejamos a las niñas en su momento “si queremos continuar, tenemos que hablar claramente sobre nuestra situación”; la única cuestión problemática es que, cada vez que se ponen a hablar, empiezan a tontear… continúan con besitos… siguen con mimos y caricias… prosiguen… bueno, que tampoco hay que ser tan explícitas… ustedes saben como sigue esto… Y esta semana empezamos igual… las niñas quieren tener un futuro juntas, dejando atrás el poliamor y las confusiones; pero, para ello, Mariana necesita tener claro que su chica no va a tener más dudas y Julia, que su amorcito confíe ciegamente… Lo que pasa es que, por unas o por otras, cada vez que tienen el firme propósito de hablar, lo abandonan para ocuparse de otros asuntos…

Cinco minutos más mamiiii…

Nuestra Julia le confiesa a una dormidísima Mariana lo mucho que la ama y lo feliz que sería de poder estar con ella siempre, pero su tierna declaración cae en saco roto, su chica está en los brazos de Morfeo y mañana hay que madrugar para ir al trabajo. Al día siguiente las chicas están “platicando” en la caravana del set, cuando Mariana (¡cómo le queda esa camiseta!… maaaadreeee) decide que no pueden seguir así, que deben estar 24 horas sin sexo para dejar que las cosas se calmen un poco, a la pequeAparicio no le hace maldita la gracia, pero accede por eso de que necesita demostrarle a su chica lo que sea que ella necesita asegurar… Están quemando los últimos minutos antes del comienzo del absurdo (¿qué quieren? A mí me parece una chorrada… si te apetece, pues déjateeee…) periodo de abstinencia cuando se abre la puerta y las pillan en pleno beso…

Atentas a ese microsegundo en el que a Mariana casi le da un infarto…

Mariana se emparanoia con la idea de que las van a echar de la producción y su carrera como actrices ha muerto por eso de que actrices y lesbianas declaradas es sinónimo de paro, mientras que Julia cree que no hay para tanto drama… Por cierto, las escenas de la telenovela son graciosísimas, esos planos de la cámara y los diálogos… me meo… En fin, justo esa misma noche se estrena el culebrón y la familia se reúne a verlo con palomitas (roscas que se dice en mi tierra) con chileeeeeeee… qué ricooooo… ummm… con un poquito de limón y sal… babeo a lo Homer Simpson (Homero según la zona…) Dejo de pensar en comida y volvemos al mundo Juliana… mientras en Villa Aparicio ven la novela (momento que la Señora Chavela aprovecha para aclararse sobre la vida emocional de su hija… awww, qué mona Julia, parece que ya se aclaroooo… boooda, booodaaa, boooodaaaaa…), en Villa Mamila hacen lo propio Armaditoritori, Dani (que se ha hecho muy amiga del muchacho… ajá… ya sabemos quiénes se van a juntar…), repreIliana y su novio…

Uyyyy… ese huevo quiere sal… que se diría en mi tierra también…

Pero el culebrón trae más sorpresas de las que las chicas esperaban, y es que sus personajes no duran ni un minuto en guion, porque mueren atropelladas por un convoy de trenes que descarrilan y explotan, por si alguien dudaba de que estuvieran muertas… La superparejita no entiende nada e intenta averiguar qué es lo que ha sucedido y si pueden reclamar por alguna vía, pero parece imposible obtener nada positivo de la productora, con su consecuente sensación de impotencia… para mí es bastante obvio el motivo de despido, otra cosa es que lo vayan a reconocer…

Otro día amanece en nuestros corazones y este es un día feliz, porque por fin nuestras niñas se han puesto de acuerdo (esto entiéndase como que Mariana dio su brazo a torcer) y vuelven a ser las felices y enamoradas novias que tanto deseábamos… y qué mejor forma de celebrarlo que quedar a cenar con el Mamila y Dani y aprovechar la ocasión para pedir las disculpas oportunas por el posible daño ocasionado y dejar clara la situación actual y futura… oye, los dejas solitos una semana y se vuelven de un maduro impresionante… alucina vecina… ¿qué sorpresa nos deparará el futuro?… yo, por si acaso, no me desabrocho el paracaídas todavía…

Nuestras niñas están en casa a la mañana siguiente, disfrutando de su mutua compañía y de las múltiples gratificaciones que otorga dormir en cucharita… aysssssss… cuando suena el teléfono de Mariana: Miguel, que parece un viejo amigo, está en el D.F. y quiere quedar con ella… así que se planta en su casa, con un niño muy mono y muy hablador, que resulta ser su hijo… Ricitos de oro (se me ocurren muchos motes para este wey… Bisbal era otro de los candidatos…) está huyendo de su suegra, una abogada muy poderosa de Puebla, que quiere retirarle la tutela de miniBisbalín porque, al fallecer su hijo (marido de Ricitos), cree que el niño estaría mejor con ella; Miguel le pide ayuda a Mariana para salir del país… nuestra niña le pide que considere la opción de consultar a Mercedes defensora-de-las-causas-justas antes de hacer cualquier locura y su amigo accede.

Por otro lado, en Villa Aparicio, Alma (cómo me gusta esta mujer por dioooossssss…) decide confesar a su familia el secreto de que tiene un negocio de acompañantes y que repreIliana se enteró y está en shock profundo… la superfamilia la apoya e intenta calmarla, seguro que su hija acaba aceptándolo y abriendo su mente como ha ido haciendo poco a poco… qué remedio, con esa prole de modernas no queda otra…

Abro un paréntesis para mostrarles una imagen de otra realidad… casi realidad paralela por lo raro y la grimita que da… lo siento… es superior a mis fuerzas…

El Mamila y la Yogüi… devorándose contra un árbol… y dicen que ya está todo inventado…

SuperMercedes se pone manos a la obra con el caso de Ricitos de oro y las niñas son parte fundamental con su apoyo incondicional y ubicando a miniBisbalín y su papá en la casa de Mariana… yo creo que con tanto niño en sus vidas se les va a despertar el instinto maternal… wiiiiiiiii… jijijiji… ¿seremos titas de una miniJulianita? ¿Cómo será? ¿Tendrá la sonrisa de mami Julia y el flequillo de mami Mariana? ¿Nacerá con botas incorporadas?… ya estoy soñando mucho me parece… Mientras Ricitos y Mercedes andan con los trámites, Julia, Mariana y miniBisbalín quedan con Armanditoritori en Villa Aparicio para entretener al muchachín… puede parecer que esto no tiene relevancia ninguna para el caso, pero… es que tiene lugar una conversación que me veo obligada a reproducirrrrrr…

Mariana: Así o más zombie, así andabas tú (refiriéndose a la adoración que miniBisbalín siente hacia el Mamila)
Julia: Ya, yo no andaba así… bueno, poquito… hasta que llegaste tú a comerme el cerebro, gracias… entre otras cosas…

Jajajajajajajajaja… me encanta… me encanta… es taaaaaaaannn natural… me conquistaron…

Y, por si aún no se han dado cuenta de que tengo poderes y adivino el futuro, aquí les traigo una prueba… nuestras niñas están tan entusiasmadas en esto del cangureo (cuidar del miniBisbalín), que a Marianita se le escapa la bomba: “quiero tener un hijo”… bomba que es bien recibida por nuestra tan sorprendida como feliz Julia… qué bonitooooo… ayssssss…

Awwwwwwwwwwwww… no se imaginan la cara de tonta que tengo ahora mismo… la misma, la mismita que cuando las Otalia hicieron las paces… ayssssssss… que potito todo…

Y así acaba este resumen, con las chicas volcándose en ayudar a Ricitos mientras le dan vueltas a la idea de tener un Julianito o una Julianita en un futuro próximo y… lo más importante… queriéndose pucho pucho… amándose fuette fuette… deseándose intensamente… mirándose apasionadamente… besándose con ansia… … … … necesito una novia… Como las quiero mucho y me gusta mimarlas… les regalo esta imagen para que cierren con buen sabor de boca… Pronto más…

Awwwwwwww… pero qué monas… maaaaaadreeeeeeeeee… ayssssssss…

¿Por qué una si pueden ser dos?... Daaaaleeeeeeee… con ganasssssssss…