Escrito por: Desiderata

Soy incierta de nacimiento… casi invisible por tímidez, que no afloja ni con el paso de los años. Tengo treintaytantos y escribo a orillas del Tormes. Me gusta encontrar la felicidad en las cosas pequeñas de la vida, cosas que hace que la vida valga la pena. Tengo algunos defectos como lo de ser lectora, serie-adicta y buscadora compulsiva Y cómo diría Juan Gelman “Escribo en el olvido / en cada fuego de la noche / cada rostro de ti.”

Aquí estoy de nuevo para intentan tirar de la madeja de Pretty Little Liars. Que yo preferiría contaros todas las aventuras amorosas de Emily pero parece que por ahora eso no es algo que vaya a suceder ¿o sí? Esta serie me lleva por la calle de la amargura, de hecho voy a quedarme a vivir en esta calle porque después de lo de Maya nuestra Emily no parece la misma. Sí, es una chica fuerte y ha dejado la bebida a un lado pero es que la aparición de A- (o de otra A-) no es del agrado de ninguna de nuestras chicas. Las cuatro quieren saber si Jenna dice la verdad o si tiene algo que ver con A-. Pero no olvidemos que tenemos otras sospechas ¿Quién era el cisne negro del baile?

El que está de vuelta en la ciudad es Jason, tan rubio y bronceado como siempre. Solo que esta vez está dispuesto a dar una recompensa por cualquier información que ayude a resolver lo de la tumba de Alison. ¿Eso le excluye de la lista de amiguitos de A-? Yo veo amigos de A- por todas partes. En este capítulo las mamás de las chicas están hermosas. La mamá de Spencer se ha cortado el flequillo (además de defender a Garret y creer que es inocente de todo). La mamá de Aria está disfrutando su divorcio en plan hogareño (a veces vivir la vida loca no pega). Y la mamá de Hanna tiene algo que decir sobre eso de las citas online (no es para ella, es para una amiga). Pero vayamos por partes, que me adelanto.

Hanna intenta visitar a Mona pero después del numerito que montó no le permiten visitas, claro que Hanna aún no sabe que el detonante de eso fue Caleb (ya os digo que no le va a hacer gracia). Mientras Aria cree que lo ideal es que su mamá conozca a alguien en un portal online de citas ¡pero si Ella Montgomery puede ligar en cualquier sitio! Y en otro lugar de Rosewood aparece alguien que vamos a llamar la amenaza heterosexual. Sí, pequeñas, sé que se ha hablado mucho de que Emily en los libros en los que se basa la serie se “vuelve” heterosexual en un momento dado y eso nos preocupa en la adaptación de la serie. Así que en este capítulo (justo el anterior para que vuelva a salir Paige) conocemos a Nate. Que es un buen mozo que resulta ser el primo de Maya. Quiere hablar con Emily. Y digo yo ¿Y este interés repentino por Emily es solo para hacernos sufrir? Que yo sé que todas nos hemos emocionado con el delantal de Emily por eso de que ahora trabaja en una cafetería pero no sé cuánto nos va a durar la emoción.

El tema es que Emily quiere saber si iba a haber algún tipo de funeral en Rosewood pero Nate le explica que el funeral fue algo muy íntimo y que los padres de Maya lo están pasando muy mal. La mamá de Maya quiere hacerle llegar a Emily un regalo que le tenía preparado Maya. Es una camiseta con el cartel de la película que las chicas vieron en su primera cita. Solo puedo añadir que Nate parece tonto o que yo me estoy desesperando demasiado con esta serie y sus pocos avances. Los dos van a tomar algo mientras charlan sobre Maya. Nate comparte alguna anécdota con Emily pero yo sigo con la idea de que el chico está tonteando con Emily. Llamadme loca. Que no es por nada en concreto, que son las miradas y eso de dejarse el libro en la mesa del bar es sospechoso ¡nene, que estás en la universidad no puedes olvidarte los libro por ahí!

El que también ha vuelto a la ciudad es el policía chulito Wilden que está empeñado en sacarle algo de información a Mona. Justo en el momento que Hanna intentaba colarse para ver a Mona. Pero las chicas creen que la clave de todo es descubrir si Melissa era el cisne negro ¿tiene Melissa algo que ver con A-? Así que la misión de hoy es llegar al apartamento de Melissa y intentar encontrar alguna pista. Y sí, parece que Melissa usó el disfraz de cisne negro (eso atestiguan unas plumas en el armario). La escena en el armario es bastante graciosa, las tres ahí acurrucadas con miedo a que Melissa las descubra ¿cual hubiera sido la excusa? “Hola, nos encantan tus zapatos”.

Spencer no sé si está disgustada o enfada con eso de que Melissa sea el cisne negro. Ojo, que he dicho cisne negro porque está por verse que sea A-. También os digo no sé si empezar una discusión con Melissa teniendo un cuchillo en la mano es la mejor idea. Alguien debería decírselo a Spencer. Pero Melissa tiene una explicación para todo, alguien la chantajeó para que se pusiera el disfraz o todos se enterarían de que estaba mintiendo sobre lo del embarazo. ¡Caray con A-! sabe los chismes de todo el mundo. Ya sabemos que A- lo consigue todo, esta vez consigue que Caleb acabe su relación con Hanna. Así que drama por todos lados.

Nuestro amigo Nate queda con Emily para recoger el libro que olvidó. De paso se ofrece a enviar él mismo la nota de agradecimiento de Emily ¿lo hará? Porque yo ya me he puesto en modo desconfiado y no sé, no sé. Nate se hace el listillo y cuando Emily le aconseja que piense bien lo de irse a otra universidad y que se deje llevar le dice que ella debería hacer lo mismo. Pero es que no es lo mismo cambiar de universidad que perder a tu novia ¿no?. No me he olvidado de Jason que parece que ya ha encontrado a quién entregarle la recompensa (aunque aún no sepamos a quién). ¿Tendrá relación con A-? ¿Se habrá enterado de que las chicas estuvieron cerca la noche del cementerio?

Y aquí nos quedamos, pequeñas, sabiendo poco más de la trama y con un nuevo personaje, Nate, que no sé si viene para perturbar nuestra vida lesbicanaria. En el próximo capítulo reaparece Paige ¿será para darle un poco de felicidad a Emily? ¿O seguiremos sufriendo? En una semana ¡más! Saludos.