Lost Girl resumen de episodio 5×02 Bo y Lauren

La semana pasad en Lost Girl todas respiramos aliviadas cuando Bo subió al mismísimo Valhalla para encontrar a Kenzi y traerla de regreso a casa. Las cosas no salieron muy bien que digamos, sobre todo porque para conseguirlo tuvo que intercambiarlo por una visita a su padre que al parecer tiene muy malas pulgas. ¿Será que le vemos de una vez por todas la cara al hombre? ¡Vamos a descubrirlo!

Nuestro episodio comienza justo donde lo dejamos la semana pasada, con Kenzi despertando en el ataúd, cosa que confieso que me ha dado muchísimas ñañaras, porque vivo traumatizada con la idea de que te entierren vivo por culpa de cierta leyenda de Durango (la ciudad donde nací). En fin, dejando de lado mis traumas personales (XD), resulta que obviamente a Kenzi tampoco le hace gracia eso de estar enterrada y aparentemente no ha visto mucha televisión, porque en lugar de guardar el sagrado oxigeno se dedica a respirar a toda velocidad, encender cerillos y gritar. ¡Conservar el oxigeno deberías Kenzi! Que estrés me ha causado esta escena de verdad…

Lo bueno es que tampoco sufrimos mucho porque de repente empezamos a oír los gritos de Dyson y Lauren que obviamente están intentando desenterrarla, así que ya podemos respirar tranquilas.

Lo siguiente que vemos es que Dyson y Lauren están llevando a Kenzi a la clínica de esta última. Y yo a la mejor soy muy tiquis miquis o algo, pero vivo sin vivir en mí porque aún no han explicado como demonios terminó Lauren con una clínica propia. Porque entre que ya no es ni de la luz, ni de la oscuridad, ¿de dónde sacó el dinero? ¡Si la mujer no tenía nada! ¿Murió su tía rica y perdida? Me estresa esta situación. Sí, lo sé, soy rarita XD.

En fin, dejando de lado esa incógnita, lo que sí sabemos es que a Lauren se le da bien eso de dar paladas, porque así fue como sacaron a Kenzi. Bueno, ella dio paladas y Dyson le entro a la rascada en modo lobo, que como bien nos han enseñado nuestros queridos perritos, eso de hacer hoyos se les da muy bien.

Después de los abrazos de rigor, Kenzi les explica que está muy contenta de verlos, pero que por desgracia, ella está ahí porque Bo se quedó, así que tienen que encontrar una manera de traerla de vuelta.

Y hablando de Bo, nuestra querida súcubo está en el Tártaro, un lugar del que sé mucho gracias a todos esos episodios en los que Xena se pasó por ahí para patear traseros. Vale, puedo que las clases de mitología griega hayan tenido algo que ver también. Igual este tártaro no es como yo me lo había imaginado. Por que sí, es oscuro, pero tiene fuentes, y no sé porque las fuentes no me resultan muy diabólicas que digamos.

Bo se pone en plan: «Papiiiii ya llegué», porque eso de que tu padre te «invite amablemente» a ir a su casa y luego no esté por ahí para recibirte pues como que no mola mucho.

De nuevo en la clínica, Lauren está sufriendo intensamente y por primera vez no es culpa de Bo, sino de su nueva enfermera que al parecer aún no entiende el sagrado orden que deben tener sus instrumentos médicos.

Kenzi: Si me tocas con eso necesitarás una nariz nueva.
Lauren: ¿Qué? Es un abatelenguas.
Kenzi: Mi lengua está perfectamente abatida. Me la suelen chulear constantemente.

LOL, vale, me he tomado una ligera licencia con la traducción para que el chiste tuviera sentido en español XD. Igual tengo que decir que en México vivía rodeada de médicos y dentistas, porque la medicina está fluye por las venas de la rama Mejia de mi familia y en mi vida había visto un abatelenguas tan grande. Igual Lauren se equivocó de herramienta XD.

Kenzi más que medicina quiere un buen trago y Lauren, considerando todo lo que ha pasado en los últimos días (¡que la han enterrado viva! Bueno, la enterraron muerta pero luego revivió y es igual de horrible), decide sacar la botella buena esa que guarda en un rincón escondido de la clínica y las dos deciden brindar a la salud del team humano.

De repente, uno de los vasos de precipitado se cae al piso como si una fuerza misteriosa lo hubiese empujado. Y para ponernos la carne aún más de gallina, en uno de los vidrios del lugar aparece la palabra «ayuda». Como en ese momento estaban hablando de Bo, las dos se convencen de que es precisamente la súcubo quien ha enviado el mensaje porque se ha convertido en una especie de gasparín.

Dyson por su parte está en las puertas del Valhalla cuando aparece Stacey lista para cumplir su misión de llevarse un alma cercana a Bo al otro lado. Dyson pone cara de tío bueno y se la camela diciéndole que él sabe a quien puede llevarse.

Mientras tanto, Bo anda dando vueltas por el tártaro sin entender muy bien donde anda y buscando a Kenzi, por aquello de que ya se la han jugado muchas veces. El caso es que a Kenzi no la encuentra, pero una buena mordida en la pierna sí que se lleva, porque aparentemente los Goblins en el tártaro la encuentran deliciosa.

Bo está todavía renegando por aquello de verse convertida en el aperitivo de un Goblin que seguramente le ha transmitido alguna enfermedad con la mordida, porque esos dientes daban miedito, cuando aparece un pájaro azul. ¿Y qué tiene eso de relevante? Pues que el pájaro se nos convierte en una muchachona que si estuviéramos en otra serie seguramente entenderíamos que es una confesora.

La goblin aprovecha el momento para poner voz de Lauren y decirle a Bo que jamás la amo, nuestra súcubo se queda un poco K.O. durante medio segundo, pero entonces recuerda todo lo que Lauren ha hecho por ella y decide al instante que obviamente esa voz no es real y soluciona el problema con una buena patada en los ovarios de su oponente. Aparentemente, una buena patada era todo lo que Bo necesitaba para vencer el laberinto, así que la chica confesora decide acompañarla a lo que parece ser la salida advirtiéndole una y otra vez de que «él» no puede saber que lo está ayudando.

En la tierra, mientras tanto, Trick le entrega a Kenzi una Ouija y le advierte que, puede que el fantasma gasparin que anda pululando a su alrededor no sea amistoso y de hecho no sea Bo. Pero Kenzi está convencida de que es su amiga así que decide seguir adelante con su idea de contactar con ella.

De nuevo en el tártaro, la confesora está intentando curar la mordida de Bo, pero nuestra súcubo no tiene tiempo para tiritas, así que le pide ayuda para curarse alimentándose de su Chi. En un primer momento, Bo simplemente ¿aspira? su chi, pero como la vida es corta y la muchacha está de buen ver, decide que una buena ronda de sexo la va a dejar bien alimentada para cuando le toque enfrentarse a su padre. Y dicho y hecho, Bo y la confesora se avientan un round (o dos) porque aparentemente en el tártaro no existe la prisa y puedes hacer pausas momentáneas para darte el lote.

Otra que se está alegrando el cuerpo y el alma es Lauren, que después de haber bebido tanto junto a Kenzi ha terminado algo elevada, así que se recuesta a dormir en la cama de Bo. Y en esas anda cuando vemos que gasparin empieza a tocarla. Todo esto aparentemente al tiempo que Bo se está camelando a la confesora. ¿Será que este fantasma es en realidad un reflejo de la persona de Bo en el tártaro? Ni idea señoras, pero al parecer Lauren lo está disfrutando.

Igual esta especie de sexo fantasmal se ve interrumpido por Kenzi que tiene lista la Ouija para empezar a trabajar. Lauren aprovecha para confirmarle que el fantasma es Bo y cuando Kenzi le pregunta que cómo lo sabe, la doctora le confiesa con algo de penita que acaban de tener un rapidín que lo demuestra. ¡Raroooooooo!

De vuelta en el inframundo, después del sexo, Bo se siente llena y pletórica. Momento en que la chica que la acompaña aprovecha para comentarle que en el tártaro siempre se sufre de hambre, pero el truco está en saber que te metes en la boca.

Bo entonces recuerda cierta leyenda que le contaron en sus clases de historia protagonizada por la mismísima Persefone, hija de Deméter y sobre todo, y aquí está lo importante, hija de Hades, o lo que es lo mismo madrastra de Bo. ¡Me da a mí que todo este asunto al padre de Bo no le va a hacer ninguna gracia lesbicanarias!

Nuestra súcubo se nefastea bastante cuando recibe esta información, seguramente porque piensa que su padre no tiene derecho a llevarse a las más guapas :P. No, ya en serio, Bo está indignada de la vida y dispuesta a enfrentarse a su padre. Perséfone anda detrás de ella intentando explicarle que la única forma de salir es la vela de Artemis con la que su madre la envío, pero esa vela la tiene Hades guardada en algún rincón loco. Así que por más que Perséfone la advierta, nuestra súcubo está dispuesta a ir a enfrentarse a su padre para recuperar la vela y volver a casa.

En el Dal, Dyson y Stacey están echándose unos tragos. Ella quiere llevarse a Trick al otro lado, pero Dyson la convence de que sería mala idea porque le van cosas raras XD. Luego la convence de que tiene claro quién es el alma gemela de Bo. Pero no sufran, porque cuando toca revelar quién es esa persona le dice que se llama Vez y es un Mesmer XD. Pobre Vex.

Dyson se ofrece a ir a cazarlo con ella, y Stacey decide hacer una última prueba besando a Dyson por si acaso. Y justo en ese momento llega Tamsin que se indigna por verlos ahí intercambiando saliva. Dyson entonces le pide un tiempo muerto a Stacey para poder hablar con la valquiria.

Dyson de inmediato le echa en cara que haya traicionado a Bo en el Tártaro, pero Tamsin se defiende diciendo que fue a ayudar, y que ella no tiene la culpa de que el padre de Bo «la activara de forma remota» XD. La valquiria le responde la acusación diciéndole que apenas se va un día y se lo topa besándose con su hermana malvada. Mal asunto. Igual en lo que los dos discutían Stacey se dedica a revisarle el teléfono a Dyson y a toparse con Lauren. ¡Mal asunto!

En el tártaro, Bo sigue abriendo puertas a ver si alguna la lleva directo a su padre, pero en lugar de eso se topa con ese cuarto que vio en su Dawning, ¿se acuerdan? Esa imagen en la que veíamos a Bo siendo una bebé y a su padre acunándola.

Perséfone aprovecha el momento para contarle que Hades atrapó a Aife y la mantuvo prisionera durante un montón de años. Vamos, que el padre de Bo tiene un complejo con eso de llevarse a mujeres secuestradas por lo visto. Perséfone le explica que su padre siempre ha hablado de ella como aquella que levantará el ejercito de espíritus. Básicamente la que le devolverá su gloria y que su madre descubrió que solo una de las dos podría escapar, así que dejó que Bo se fuera.

Toda esta situación termina por cabrear a Bo que decide que encontrará la vela por sus ovarios así se la tenga que arrancar de la mano a su padre.

Bo vuelve al elevador del mal que esta vez la lleva a una sala completamente oscura, vamos que lo único que se ve es ella misma..

La mujer empieza a decir en voz alta a su padre que él no es su familia, que ella jamás lo quiso conocer, que ella ya sabe quien es su familia y quienes realmente la aman. Ella no necesita saber quién es él para saber quien es ella.

Y así sin más da con la vela porque en lugar de tenerla escondida en la caja fuerte, Hades la puso en un pilar ahí en medio del cuarto oscuro. ¡Muy listo no es que fuera el hombre!. Bo sale corriendo al elevador con la vela y está a punto de pirarse cuando una mano peluda la agarra por la garganta y la empieza a ahogar. Después del susto habitual en estos casos, Bo enciende su lado súcubo y sus ojazos azules y se lo quita de encima como si nada para volver a subir.

En casa, Kenzi está lista para empezar el ritual de hablar con el espíritu de Bo. Lauren por su parte no está tan convencida de que manejar una Ouija sin Trick sea lo más adecuado, pero como también está lista a arriesgar el pellejo para salvar a Bo, le sigue la corriente a Kenzi y empiezan el ritual.

Aparentemente, las palabras misteriosas que pronuncia Kenzi funcionan, porque de inmediato empiezan a pasar cosas raras.

Bo vuelve a la parte superior del Tártaro donde se encuentra con Perséfone. La súcubo quiere salir pitando vía la vela junto a su madrastra, pero resulta que Perséfone no se puede ir porque lo de la granada todavía está activo. Vamos que está ligada al Tártaro, pero le pide que encienda la vela una vez que esté en la tierra para que su madre sepa que está bien.

Aquí si alguien me explica exactamente para qué servía la vela se lo voy a agradecer, porque teóricamente la vela era lo que sacaba a Bo, pero ¿cómo? porque si la va a encender hasta llegar a casa…. Mmm misterios de esta serie que jamás podré comprender.

Lo siguiente que vemos es a Lauren y Kenzi protegiéndose detrás del sillón porque lo que invocaron obviamente no es Bo, sino un fantasma con muy malas pulgas, porque resulta que Dyson y Lauren rompieron una urna al cavar la tumba de Kenzi y no le ha hecho nada de gracia a la dueña.

Kenzi dice en voz alta lo que todas nosotros estamos pensando: «¡yeaks Lauren tuvo sexo con un fantasma que no era Bo», pero la rubia calma nuestras ansias diciendo que no hubo consumación completa y solo fueron unos cuantos besos en el cuello. Yo sufro igual ¡a saber con quién más se habrá acostado el espíritu este!

Dyson mientras tanto está manteniendo las puertas del tártaro abiertas porque por alguna misteriosa razón se han empezado a cerrar. Igual justo a tiempo porque Bo sale en ese momento, así que Dyson le vuelve a declarar su lealtad y los dos se marchan a casa.

Lauren y Kenzi por su parte, siguen batallando para domar al fantasma que han invocado. Pero Lauren es valiente señoras, así que decide arriesgarse a recuperar la Ouija. ¿Dije valiente? ¿Bueno igual la palabra es buena corredora XD?

Ais, que risa me dio esta escena. Igual las chicas queman la Ouija (insisto en que las series me instan a probar lo del spray y el mechero) y le rezan a todas los dioses Faes y no Faes para que esta sea la última vez que escuchan algo del fantasma sensual este. Igual la paz les dura más o menos tres minutos porque entonces abren la puerta y yo pensaba que era Bo, pero no, era Stacey que viene a llevarse a Lauren al otro mundo para equilibrar el Valhalla.

Stacey: ¿Pueden creer que el lobo intentó engañarme diciéndome que el mesmer era una alma que le importaba a Bo?>br> Lauren: Bueno, alguna vez han compartido ropa interior.
Stacey: Afortunadamente para mí, los mensajes de Dyson hablando del amor de Bo por la doctora me lo han dicho todo.
Kenzi: ¿Dyson manda mensajes sobre ti?
Lauren: No tengo ni idea.

Hagamos aquí una pequeña pausa para deleitarnos con el conocimiento de que Dyson ya tiene claro que el amor de Bo no le pertenece porque su dueña se llama Lauren Lewis. E incluso lo ha puesto por escrito :P.

Pero volviendo al tema, Lauren se ofrece a ser la sacrificada en combate porque cree que Kenzi ya ha pasado por mucho y Stacey está de acuerdo, más que todo porque como Freyja le prometió a Bo no tocar a Kenzi pues no puede llevársela.

Stacey: Esto es mejor de todos modos, tú tienes un lugar particularmente especial en el corazón de Bo.

Y aquí Stacey le enseña el colgante que Lauren le regaló a Bo y la cosa se pone muy fea porque para llevársela Lauren tiene que estar muerta, así que Stacey pone manos a la obra, pero entonces:

¡Tamsin FTW! Nuestra valquiria favorita llega para meter a su hermana en cintura. Las dos ponen cara de Valquiria y yo esperaba ver una pelea épica ahí en plan golpes mortales, pero no, resulta que las palabras hieren aún más, así que las dos pelean en plan princesas raperas y obviamente Tamsin gana por goleada.

Lo siguiente que vemos es a todo el grupo cenando y brindando por la vuelta de Bo. Todo el mundo está de buen humor dándole al drinking y olvidándose de los malos ratos de los últimos meses. Dyson y Tamsin aprovechan para platicar y la valquiria le dice al lobito, que en realidad no se sitió celosa de Stacey, así que mejor que lo de ellos solo sea una bonita amistad.

Dyson también aprovecha para dejarle saber a Kenzi que Hale le dejó cierto regalo especial en su testamento.

El vino escasea, así que Lauren decide que se pira a por algunas botellas más y Bo decide acompañarla porque obviamente necesita un minuto a solas con ella. Bo le pregunta sonriendo por ese momento «sexo fantasmeril» y Lauren se excusa diciendo que tenía «movimientos Bo» XD. Luego las dos hablan de Kenzi, porque a Bo le preocupa que la mujer esté traumatizada por todo lo que ha pasado últimamente.

En esas andan cuando el sexto sentido de Bo siente algo y entonces se da cuenta de que al quemar a la fantasma de la Ouija no se la cargaron sino que le da forma corpórea. Y dicho y hecho, gasparín aparece y se le lanza a Lauren, pero entonces sale Kenzi con tremenda escopeta y se la carga a ella, porque lo que no hace el fuego lo hacen las balas.

Lauren le pregunta cómo supo que algo así pasaría y Kenzi le responde obviamente quemada que con los Faes las cosas siempre son así, los problemas nunca terminan.

Cuando todo el mundo se va, Bo está preparada para pasar una noche en plan fiestorro con Kenzi para ponerse al día de todas sus aventuras, pero nuestra pequeña humana tiene otros planes. Kenzi le dice a Bo que no puede quedarse, que ya no quiere ser la humana perdida en el mundo Fae. Kenzi siente que tiene otra oportunidad de vivir y va a aprovecharla para intentar hacer algo por ella, algo humano.

¡Dios no! Sufro como Bo en esta escena. Primero porque no es lógico, ósea por un lado sí, Kenzi está traumatizada por todo lo que le ha sucedido, eso lo entiendo, pero no que quiera alejarse de la persona que siempre ha considerado su familia. ¡Pero si acaba de llegar! ¿Acaso hemos sufrido en vano? ¡Kenziiiiiiiiiiiiiii! Para terminar así mejor que la hubieran dejado feliz en el Valhalla con Hale ¿no? Lo único que me consuela es que sé que Ksenia Solo filmó más episodios, con lo que todo indica que esto no es un adiós sino un hasta luego.

Bueno eso y que Kenzi se viene a España y aquí tengan la seguridad de que la recibiremos con los brazos abiertos y la cuidaremos muy bien.

Bo: Somos hermanas, estaremos en la vida de la otra para siempre.
Kenzi: ¡Infiernos! Si no pude ni apartarme de ti en la otra vida!
Bo: Te quiero Kenzi. A veces pienso que es la única cosa de la que estoy completamente segura.

Me ha encantado esta frase. Porque para mí la amistad de Kenzi y Bo en serio es el pilar principal de esta serie y saber que cuando se trata de Kenzi, la súcubo jamás ha estado confundida me encanta.

Kenzi se marcha y Bo y nosotras nos quedamos llorando como magdalenas y contando los días para que regrese a partir de ya. Porque ¿en serio? ¿Cómo vamos a vivir sin Kenzi? Igual sé que la única razón por la que Kenzi no estará en todos los episodios fue porque Ksenia Solo quería evolucionar como actriz (no por nada la veremos en Orphan Black), pero yo sigo sufriendo, sobre todo porque esta ya es la última temporada y hubiera sido genial tenerla en todos los episodios.

En fin, que Bo está igual de desesperada que nosotras, tanto que, sin pensárselo demasiado decide abrir las ventanas y encender la vela que le entregó Perséfone. ¿Y saben qué chicas? El asunto de la vela traerá cola, muchísima cola porque en cuanto la enciende vemos a esta señora con la vela:

Su cara dice: «voy a meter caña» y lo malo es que no sabemos a quién ¿será melón? ¿Será Sandía? ¿Será Demeter cabreada porque Hades le robó a su hija? ¡Lo sabremos en el próximo episodio de Lost Girl!