¿Cómo te llamas? una película lésbica que necesita tu ayuda

A las lesbicanarias nos gustan las películas lésbicas, y sinceramente no hay tantas como desearíamos, así que cualquier proyecto que aparece en este universo lo seguimos con mucho detenimiento y esperanza. Y ahora nuestros ojos están centrados en ¿Cómo te llamas? una película que está en pleno proceso de pre-producción y que espera poder filmarse en enero del próximo año, pero para eso necesita tu ayuda.

Pero lo primero es lo primero, ¿de qué trata la película? Quién mejor que su directora, Ruth Caudeli, para explicárnoslo.

La película trata sobre la decadencia de una pareja de dos mujeres, pero está tratada desde la cotidianeidad y sin darle relevancia a la condición sexual. Esta película, a parte de muchos otros aspectos narrativos, pretende normalizar las relaciones entre parejas del mismo sexo y quitar tabúes. Especialmente en Colombia, en donde vivo desde hace 3 años; aunque es uno de los países más abiertos de Latinoamérica, siguen existiendo muchos tabúes que no deberían.

¿Les suena interesante? Pues aquí tienen un teaser para que puedan echarle un ojo al estilo visual que va a tener la cinta.

¿Y qué hace falta para poder ver la historia de Eva y Candela en la gran pantalla? Pues lo de siempre señoras, dinero, porque financiar películas con temática LGBT es terriblemente complicado. En este caso, la producción necesita recaudar 8000 euros para financiar los 22 de días de rodaje en Colombia que les hacen falta para tener la película a punto. La buena noticia es que a estas alturas ya llevan recaudado más de 6000, la mala es que aún les faltan otros 2000 que tienen que conseguir antes de 20 días para que el proyecto siga adelante.

Siempre les decimos que es importante poner nuestro dinero en la cultura que nos gustaría ver. Y si queremos ver más películas lésbicas tenemos que apoyarlas en la medida de nuestras posibilidades. Así que ¡dénle un vistazo al teaser y si les llama la atención no olviden pasarse por la página de su crowdfunding para que les echen un cable!