Nuestro episodio de Chica Busca Chica comienza con una Carmen que sigue muy dolida por los cuernos del tamaño de estatuas de la libertad que le metió su novio. Esta en su consulta tratando de orientar a una paciente que tiene problemas con su marido pero esta vez en lugar de abogar por el diálogo le incita a que le deje porque proyecta sus problemas en ella.

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Cuando se va su paciente Carmen se queda con dolor de cabeza y cara de que-demonios-estoy-haciendo y esta dispuesta a pasar una larga temporada de la llamada depresión del sillón cuando alguien toca su puerta y resulta ser Nines que a parte de llevarle las llaves le entrega un regalito. Carmen lo abre de mal humor y se encuentra con un reloj de arena que según Nines no tiene idea de para que sirve pero no se para.

Carmen: ¡Lo que me faltaba ya! ¡¿Se puede saber que haces tu con Mónica?!
Nines: ¿Yo que he hecho?
Carmen: ¿Qué que has hecho? Te metes en casa, te la follas y encima vienes a ver si te puedes follar a la amiga también
Nines: (poniendo su mejor cara de soy inocente y me has insultado) Mira yo he venido a traerte las llaves.
Carmen: ¿Las llaves? ¡Si es que todos son iguales!

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Pero las mujeres somos raras y para que beber solas si podemos hacerlo acompañadas así que Carmen se sirve algo que yo creo que es tequila pero puede ser cualquier chupito misterioso y le sirve uno a Nines también. Acto seguido se dedican a zamparse la botella entera a base de rellenar el mini vaso.

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Nines parece seguir en sus cinco sentidos mientras que Carmen anda por la calle de la amargura y el mundo parece girarle con singular alegría.

Nines aprovecha para preguntarle que va a hacer respecto a Jorge (el novio) y Carmen responde que no se llama Jorge sino HDP (hijo de puta jeje). Les interrumpe el teléfono de Nines que tiene una llamada de una tal Rosy, Carmen le pregunta si esa es otra tonta y cuando Nines le responde que es una le llama «casquita de sueltos» (jeje hay que ver lo que hace la bebida).

Carmen se lamenta de haber estado con el HDGP (aumentarle gran a la definición anterior) durante siete años desperdiciados de su vida. Pero Nines le dice que no se preocupe que ahora los recupera toditos.

Nines: De verdad que tienes unos ojos preciosos
Carmen: ¿Estas intentando ligar conmigo?
Nines: ¿Yo? ¿Ligar contigo? ¡Dios me libre!
Carmen: ¿Y por qué no?
Nines: Pues porque no eres lesbiana
Carmen: Pues no, no soy lesbiana
Nines: Pues por eso
Carmen: Pues tu te lo pierdes

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Sus caras se acercan peligrosamente cuando otra llamada al móvil de Nines les interrumpe (salvada por la campana Carmen) es alguien del trabajo y Nines se marcha.

En su departamento Mónica intenta encontrar con quien salir sin éxito alguno. Alguien toca el timbre y al abrir se le mete una chica llamada Victoria Gonzales campeona actual de Judo en Madrid que quiere que Mónica le entrene pero la mujer no esta por la labor.

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Victoria casi que se le hinca porque cree que si Mónica le entrena sera un éxito seguro pero Mónica le responde que nunca en su vida volverá a tocar otro tatami.

Pasa un momentito y llega Ana a la que al parecer no le ha ido nada bien en el casting así que ambas se deciden a celebrarlo.

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En el bar «chica busca chica» Nines y su compañera de trabajo charlan sobre sus últimas conquistas, al parecer su compañera es una hetero que solo consigue enamorar chicos gays. En un momento Carmen se sienta en la barra y le pide a Nines una copa (como si no se hubiera tomado la botella entera jeje)

Ana y Mónica entran en el bar charlando sobre las desventuras de Ana en su casting y se encuentran a Carmen y a Nines charlando «muy profundamente» pero la pobre de Ana esta más despistada que yo después de 14 caballitos de tequila y se cree que están platicando de ella. Mónica piensa que a Nines le ha hecho mucha ilusión verla, Carmen sigue bebiendo y Ana se maravilla ante la cantidad de lesbianas que pueden reunirse en una sola disco.