Este fin de semana fue muy importante en la lucha por los derechos de la comunidad LGBT en EEUU. No solo porque se celebró la National Equality March (NEM o Marcha Nacional por la Igualdad) sino también porque Obama dirigió un discurso en una cena de recaudación de fondos organizada por HRC.

El discurso del presidente fue muy importante porque en él se posicionó directamente en favor de crear una ley que permita a las personas del mismo sexo casarse (aunque se cuidó mucho de no decir «matrimonio») y se comprometió a repeler tanto el [DOMA](Defense of Marriage Act) y Don´t Ask, Don´t Tell. No dijo nada nuevo, todas esas siguen siendo promesas de campaña, pero es importante ver al presidente hablando en favor de la igualdad con palabras como las siguientes:

Terminaré con esto (DOMA), y llegará el momento en el que nosotros como nación finalmente reconozcamos las relaciones entre dos hombres o entre dos mujeres como tan justas, reales y admirables como las relaciones entre hombres y mujeres

Aún así no puedo sino también reconocer que Obama sigue hablando mucho y haciendo poco, y me da tristeza hacerlo porque me hubiese gustado poder hablar más y mejor sobre la labor del presidente. Pero hasta este momento fuera de extender los derechos de ciertos empleados federales su labor no ha destacado precisamente en materia LGBT. Quiero seguir dándole el beneficio de la duda, pero el tiempo ya comienza a hacerse largo y no lo he visto mover un dedo, ni lanzar iniciativas, ni empezar a moverse en el parlamento o el senado para avanzar en cuanto a estas cuestiones.

Creo que el presidente tiene buenas intenciones pero es nuestro deber presionarlo hasta la saciedad hasta que las haga realidades, las ideas quedan muy bonitas pero las realidades son las que vivimos. Y por esto la marcha ha sido muy importante y es bueno también que sepamos reconocer lo bueno y lo malo y exijamos cosas mejores siempre.

National Equality March

El día de la marcha entre 100,000 y 200,000 mil personas se juntaron para caminar juntas hasta el capitolio y exigir igualdad en derechos y obligaciones para todos nosotros. Ya en el emblemático edificio varias personalidades dieron discursos para intentar animar a la gente a protestar (pacíficamente) por sus derechos y a reclamar lo que es justo para todos.

Entre las personas que hablaron se encontraba Cynthia Nixon la actriz de Sex and the City que está fuera del armario de hace un buen par de años. Y me encantó la parte de su discurso en la que se enfocó en esa corriente de pensamiento «igual pero diferente» que está tan de moda últimamente, y explicó las consecuencias y el peligro que hay detrás de esas ideas al decir que no tener los mismos derechos nos hace ciudadanos de segunda y hace que la gente deshumanice a las personas y tenga menos problema al hacerles menos.

Creo que tiene muchísima razón y que es una constante que se repite no solo con la gente LGBT sino con muchísimos grupos minoritarios.

Lady Gaga cuya música me encanta también estuvo hablando pero su discurso se enfocó más a intentar animar a la juventud a seguir los pasos de esa gente que ha estado luchando hasta ahora por los derechos que ya hemos conseguido. Su charla fue la menos tradicional (el grito a Obama fue un puntazo) pero también me gustó, se está convirtiendo rápidamente en una de las caras más visibles de la lucha LGBT (su versión de imagine en la cena de HRC me puso los pelos de punta.

Otra ponente fue Judy Shepard una mujer a la que admiro profundamente y de la que les prometo hablarles (porque se lo merece) en otro momento con más detenimiento. La señora Shepard hablo sobre la necesidad de generar en nosotros mismos la conciencia de que está en nuestras manos (en nuestros votos, en nuestra presión) el hacer que las cosas sucedan, y que no debemos simplemente esperar de los políticos, debemos exigir, educarnos, presionar, investigar y formar parte activa de la sociedad para conseguir nuestras metas.

Me encantan estos actos porque demuestran lo importantes que podemos ser, la atención que podemos captar si nos unimos y luchamos juntos por nuestros derechos. Y también porque a mi me recuerdan que hay miles de formas de luchar y todas son válidas. Y que cada pequeño esfuerzo que hagamos, esa caminata el fin de semana, este post en el blog, esa plática con un compañero del trabajo que van a tener mañana, ayudan a que día con día consigamos tener más cerca la meta de ser por fin iguales.

Imágenes por: Tony Webster