Escrito por: pikooLeona

Pucelana. Laísta en consecuencia. Joven, y bollera hasta la médula. Amante de las fiestas que nunca se acaban. Y también una gran freak dentro del armario del frikismo. ¿Quién me iba a decir a mi que acabaría haciendo resúmenes yuri para Lesbicanarias?»

En nuestro noveno capítulo, el verano ha llegado a la escuela. Nuestras chicas se encuentran en su habitación, y llegan de visita Yaya-chan y Hikari-chan. Pero ¿dónde está Nagisa-chan? Pues resulta que, con el verano, también ha llegado el bañador para nuestra protagonista, y le da mucha vergüenza que sus amigas la vean así, en paños menores LOL. Para obligarla a salir, las chicas se ponen a hablar sobre los pasteles que ha comprado Yaya-chan, y consiguen sacarla del baño. Lo cierto es que el bañador le sienta estupendamente, no sé de qué se queja.

Cuando se acaban los pasteles y la fiesta del té, Yaya-chan y Hikari-chan vuelven a su habitación, pero mientras van andando a oscuras por el pasillo, escuchan un sollozo… ¿Quién será? ¿Será un espíritu? Chan chan chaaan…

A la mañana siguiente están en clase comentando lo que les sucedió a Hikari y Yaya-chan la noche anterior, y las chicas hablan de “La chica de los pasillos, uno de los Siete Misterios de la Residencia Fresa”. Parece ser que hay siete misterios famosos en la escuela, a saber: La chica de los pasillos, El espejo de la sala de baile, El peldaño nº13 de la sala de las sombrillas, La escultura de María que se vuelve pesada, El piano que toca solo, La séptima puerta, El secreto del sótano y Las risas de la sala de conferencias… vale, yo cuento ocho xD El caso es que hay diferencias entre los misterios que han oído unas y otras, así que es de suponer que casi todos son mentira… pero vamos que los sollozos del pasillo lo escuchamos todas perfectamente así que…

Después de clase, están Tamao-chan y Nagisa-chan en la cafetería con un montón de hojas sobre la mesa, pues resulta que Tamao-chan ha preguntado a varias personas sobre qué Siete Misterios conocían, y resulta que muy poca gente coincide con los Misterios…

Después nos encontramos con Yaya-chan y Hikari-chan durante su tiempo libre jugando y bañándose en la piscina, como dos buenas enamoradas (vale, esto no es cierto, pero oye… lo parecen)

Cuando terminan, se van a duchar, y llegan Nagisa-chan y Tamao-chan para obtener datos sobre el llanto que escucharon la pasada noche en el pasillo. Cuando están hablando, Yaya-chan da un susto a Nagisa-chan, pero se le cae la toalla y todas la ven desnuda (menos nosotras, vaya…) ¡Y la llaman monstruo! Que fuerte xD

Vaya par de …

Ya por la noche, Tamao-chan sigue dándole vueltas al asunto y analizando quién ha oído hablar del misterio y quién no. Cuando se van a la cama, Nagisa-chan tiene mucho miedo, así que las dos duermen juntas ohhh y Tamao-chan le dice a Nagisa-chan que si duermen cogidas de la mano, soñarán lo mismo… que bonito

Ohhhh…

A la mañana siguiente, las chicas hablan con la presidenta de St. Miator sobre los misterios, y ésta les dice que es todo pura ficción, y que son bobadas. Después se dirigen al invernadero a hablar con Etoile-sama, pero su respuesta es “Sin Comentarios”. Menuda borde. A continuación hablan con la presidenta de St. Le Rim, que es un cielo de persona, y les cuenta que vio a la chica del pasillo el primer día que se mudó a la residencia.

Las investigaciones de Tamao-chan han revelado que todas las chicas de quinto curso e inferiores conocen la historia, muy pocas de sexto la conocen, y del séptimo año en adelante, no tienen ni idea. Parece ser que cuando Chikaru-sama, la presidenta de St. Le Rim, entró en la escuela, había un gran revuelo en torno a la historia de la chica del pasillo, e incluso una de las alumnas encargadas de la residencia había oído los sollozos.

Esa noche, Tamao-chan y Nagisa-chan salen del dormitorio decididas a resolver el misterio de “La chica del pasillo”. Cuando oyen los sollozos, ven a un gato negro, y piensan que ya está el misterio resuelto, que todo era cosa del gato, y que eso es lo que debieron escuchar hace algunos años las estudiantes de entonces. Pero de repente nos encontramos con una niña sollozando en un rincón, que resulta ser la presidenta de St. Miatre hace unos años, cuando llegó a la escuela, que echaba de menos su casa y a sus papas… ohh… Entonces aparece Shizuma-sama, le da la mano le calma y la pequeña presidenta se tranquiliza.

Volvemos al presente, y resulta que era un recuerdo de la misma presidenta, que está en clase distraída pensando en sus cosas. Etoile-sama le salva de una buena reprimenda indicándole en que página y línea del libro se hallan. Vaya, yo creí que estas dos ya no estudiaban, que curioso.

Cambiamos de escena y están todas nuestras chicas dándose un placentero baño en la piscina. Nagisa-chan invita a Tamao-chan a bañarse con ella, pero antes de meterse en el agua, Tamao le dice a Nagisa que ha decidido investigar los otros 6 misterios de la residencia… pobre Nagisa, la que le espera!

Y así termina nuestro noveno capítulo. ¿Las japonesas no usan bikinis? No saben lo que se pierden… o lo que nos perdemos nosotras LOL

Nuestro décimo capítulo comienza con Shizuma-sama sola, en el bosque, reflexionando sobre Nagisa-chan. “La primera vez que nos encontramos, pensé que solo era una chica mona. Pensé que solo era una de mis chicas monas. Eso es lo que pensé al principio.” Vaya vaya, Etoile-sama se está enamorando…

Luego nos encontramos con Nagisa-chan y sus amigas en la cafetería hablando de la escuela de verano de la residencia. Pero para poder ir a esa escuela, nuestra pequeña Nagisa-chan tiene que aprobar todos los exámenes finales, cosa que vemos tanto nosotras como nosotras, muy difícil… y si no aprueba, tendrá que ir a clases de verano. Es por eso que Nagisa le pide ayuda a Tamao-chan en francés, la cual le dará clases gustosa.

Esa noche, se encuentran en una mesa estudiando francés Tamao y Nagisa, y en la otra la pequeña ayudante, Chiyo-chan, y resulta que Chiyo-chan sabe más francés que Nagisa jeje, pobre. Tamao-chan recomienda a Nagisa que se tome un respiro y salga a dar una vuelta. Todas las estudiantes de las tres academias están hincando los codos, pues todas tienen los exámenes finales a la vez.

Para desahogarse, Nagisa-chan sale al jardín y se pone a golpear un árbol gritando de una forma muy cómica LOL y resulta que al lado se encuentra Etoile-sama sentada en un banco. Nagisa empieza a disculparse con Etoile por el espectáculo que ha montado, pero es que se encuentra muy agobiada con el francés y blablablá, y cuando ya se iba, de repente le dice Etoile…

Etoile: Espera. Déjame que te enseñe francés.
Nagisa: P-Pero el examen es en nada…
Etoile: Ayudar a una chica también es la responsabilidad de Etoile-sama

Vamos Shizuma a quién pretendes engañar todas sabemos que te gustaría darle clases de Anatomía y no de Francés pero bueno…

De vuelta al dormitorio, descubrimos que nuestra Nagisa-chan, que es un cielo, ha rechazado la oferta porque claro, Tamao-chan ya le estaba dando clases. Pero Tamao-chan le dice que no sea boba y que mejor le da clases Etoile-sama que es la alumna con mejores notas en francés de toda la escuela. Vamos que aparte de estar buena, es inteligente… me parece que ya se quién me va a mantener a mi en un futuro no muy lejano xD

Así que empiezan las clases particulares, pero nuestra pobre Nagisa-chan no puede ni con los ejercicios de segundo curso (recordemos que ella está en cuarto curso)

Pero Nagisa-chan no se da por vencida, y se queda despierta estudiando durante tooda la noche (eso es algo que yo hasta la fecha nunca he logrado, sin estar de fiesta claro)

A la mañana siguiente nos encontramos al lado del lago de aguas cristalinas con Etoile-sama y la presidenta de St. Miator

Presidenta: Esa chica… Aoi Nagisa-san. ¿Has estado dándole clases de francés todas las noches?
Etoile: Si, ¿tienes algún problema con eso?
Presidenta: Como Presidenta del Consejo Estudiantil, estoy muy contenta. Acaba de empezar a estudiar francés, ¿verdad? Estaba muy preocupada, ya que las estudiantes de St. Miatre nunca han suspendido.
Etoile: Esto no tiene nada que ver con la Residencia Fresa o con St. Miatre. La ayudé porque estaba frustrada. (mentira, es porque la quieres)
Presidenta: ¿Es esa la razón real? (No es tonta La Presi eh)
Etoile: ¿Debería haber otras razones? (¡POR SUPUESTO!)

Cuando Etoile-sama vuelve a la mesa donde le da clases a Nagisa, se encuentra con que la pobre se ha quedado dormida encima de los libros. Cuando se despierta le pregunta si está muy cansada, pero ésta le responde que no, que para nada, y siguen dando la clase.

Después vemos a Etoile-sama hablando con Tamao-chan, quien le cuenta que Nagisa-chan se ha quedado despierta todas las noches, y estudia a todas las horas que puede. Menuda paliza se está dando Nagisa-chan, eh.

Cuando vuelven a las clases, las amigas de Etoile-sama están espiando detrás de la puerta y comentan que se la ve super feliz… aish…

A la mañana siguiente Nagisa-chan hace el examen de francés, y al fin respira aliviada. Pero la cosa no ha hecho más que empezar, pues aun quedan todos los demás exámenes, y Nagisa no ha tocado ninguna otra asignatura.

Pero pasan los días y al fin terminan todos los exámenes, y Tamao-chan tiene razón, Nagisa-chan se ha esforzado muchísimo.

Como Tamao-chan tiene actividades de su club, Nagisa-chan decide volver a la residencia, pero de camino por los jardines, se recuesta contra un árbol y se queda dormida. Cuando abre los ojos, se encuentra con una sonriente Shizuma-sama. Pero Nagisa se vuelve a quedar dormida, esta vez recostada sobre Etoile-sama.

Cuando Nagisa se despierta ya ha atardecido y Etoile-sama no está, y Nagisa se pregunta si no habrá sido todo un sueño.

A la mañana siguiente les dan las notas de todos los exámenes y… ¡SÍ! Nagisa-chan ha aprobado todo, y podrá ir a la escuela de verano con sus amigas jeje

Nagisa-chan piensa que debe hacerle un regalo a Etoile-sama, y decide que le va a cocinar unas galletas con ayuda de Chihaya-chan, del club de cocina.

Cuando llega al club se encuentra con la presidenta de St. Le Rim, que también está haciendo galletas. Así que Nagisa-chan se pone manos a la obra, y las galletas tienen una pinta estupenda.

Nagisa-chan se dispone a buscar a Etoile-sama pero no la encuentra por ningún lado, ni en su habitación, ni en el invernadero, ni por ninguna parte. Cuando va corriendo por el bosque se tropieza con una raíz de un árbol con tan mala suerte que cae encima de las galletitas, aplastándolas.

Cuando vuelve al invernadero, se encuentra al fin con Etoile, le explica lo que ha pasado, y Shizuma le dice que no se preocupe, que está muy contenta y que muchas gracias. Nagisa-chan se pone a dar saltos de alegría con tan mala suerte que golpea una regadera, que se cae al suelo. Ambas intentan agarrarla antes de que se caiga, y se caen ellas también, quedando la una encima de la otra en una posición muy sexy.

Cuando se separan (sin beso grrr como siempre) se ponen a reír sin poder parar y hablan de que podría acompañar las galletas con un poco de té… en ese momento las observa la presidenta de St. Miatre desde lejos, y se sorprende de que Shizuma-sama haya vuelto a reír…

Luego Shizuma le regala una planta a Nagisa, como agradecimiento por aquella vez que la ayudó en el invernadero.

Y nuestro capítulo terminar con la presidenta diciéndole a Shizuma que gracias a ella ninguna alumna de St. Miatre tendrá que ir a la escuela de verano, pero Etoile dice que no, que ha sido gracias a Nagisa, que se ha esforzado un montón.

Y aquí me despido hasta el día 16 de agosto chicas, pues me voy de vacaciones. Espero ponerlas al día en cuanto tenga acceso a un ordenador de nuevo. A disfrutar! 😛