Buenas señoras, ya estamos de vuelta con el segundo capítulo de la segunda temporada de Exes & Ohs. ¿Listas para echarse unas risas? Pero antes de comenzar, muchas de ustedes me han preguntado como hago para ver los capítulos. Les cuento, yo compré la temporada completa por iTunes (sobre todo porque me encanta la serie y siempre me gusta apoyar monetariamente aquellos proyectos en los que creo), si no saben como hacerlo, cuando se emitió la primera temporada les hice un tutorial. Si no tienen dinero (cuesta apenas 9 dólares toda la temporada) siempre pueden buscar en Avenida Libertad y si lo que quieren es cooperar con la causa y ayudar a miles de otras chicas que no saben inglés, siempre pueden hablar con Riggie que está organizando un equipo para traducir los episodios al español. Y ahora sí, ¡a platicar sobre el capítulo!

Nuestro episodio comienza con Jen platicando con Gillian que está pasándolo pipa en un jacuzzi (ah lo que daría yo por una jacuzzi ahora mismo), en fin la mujer está ahí riendo y pasándolo bien hasta que se da cuenta lo demasiado bien que lo está pasando. Vamos que en menos de lo que canta un gallo se está pillando porque seamos sinceras, Gillian parece una princesa azul. Y eso nos lleva a la regla número 1 de este episodio:

La regla del «poder de hacerte reír»: Nunca subestimes el poder de una chica que te haga reír. Si encuentras a alguien así, aférrate a ella…a menos que no estés preparada para que te guste tanto como te gusta…en cuyo caso tienes que encontrar una forma de que te guste menos.

Y ahí anda la Jen intentando por todas las maneras posibles que no le guste tanto cuando Gillian la besa y la cosa empieza a fallar. Gillian le dice que siempre puede encontrar otra chica con la cual salir también que haga que le guste un poco menos, luego decide llevarsela al jacuzzi con todo y ropa y arruina totalmente su concentración.

Al otro día, Jen está en modalidad trabajo. Esta vez se trata de un nuevo documental llamado: «La búsqueda del amor». Y la primera entrevistada es Devin que aprovecha su momento frente a la cámara para autopromocionarse ante las futuras lesbianas que puedan ver el documental hablando de su «nice rack» (buen escote) jeje. Jen le recuerda amablemente que se suponía que iban a hablar sobre ligar en línea…y Devin vuelve al tema explicando a la cámara que es una manera genial de conocer gente sin gastar mucho dinero y si la cosa no va bien siempre puedes salir por patas.

Devin le recomienda a Jen que lo pruebe en sus propias palabras «es todo un océano de diversión casual». Jen le dice que ella no tendría ni idea de que hacer con todo ese océano pero antes de que le de tiempo a decir nada Devin la cita con una chica que conoció hace unos días. Ais madre…que miedo me da con la patosidad de Jen todo esto.

Mientras tanto otra que sufre es Sam porque eso de encontrar trabajo en EEUU parece que está igual o peor que en España, más de 100 currículos ha repartido y nada que la llaman. Está a punto de la desesperación cuando recibe una llamada para ser gerente de algún lugar que parece ser un restaurante ¡bingo!

Otra a la que los problemas no se le resuelven tan fácilmente es Kris que se ha escapado a la cafetería básicamente para no tener que lidiar con su madre y Chris. Y nop no es que las dos se lleven como perros y gatos como en el cliché habitual, más bien es que son uña y carne y se agrupan en su contra.

Y de hecho lo vemos en acción cuando llega a casa y se las encuentra a las dos en plena faena de hacer galletas. Las dos felices como lombrices se ponen en acción en cuanto la ven llegar con unas cajas para quitárselas de encima y decirle que se relaje que ellas hacen el trabajo duro. Algunas de nosotros lo llamaríamos sueño hecho realidad XD pero Kris está desesperada porque no le gusta que la traten como con palillos.

Para escapar decide irse a ver si el Dr. Bob (recordemos que es un veterinario y que también fue el donante de esperma) necesita más galletas para perritos, pero ahí se encuentra con que más que galletas el hombre necesita una asistente y ella ni tarda ni perezosa se apunta porque si en casa no la van a dejar trabajar siempre puede escaparse medio tiempo sin que nadie se dé cuenta.

Otra que acaba de encontrar trabajo es Sam pero desafortunadamente para ella no es uno muy divertido que digamos. Y es que es mananger y mesera de un local que vende comida en el que las faldas cortas y los escotes son imprescindibles. Entre eso y que uno de sus clientes está nefasto porque los hot dogs cuestan 8 dólares su día no podía ir peor. Entonces su compañera de trabajo que ya tiene más callo en todos estos asuntos le habla de la técnica del Mirroring que es básicamente hacer como que te preocupa todo lo que dicen, estar de acuerdo con ellos y ponerlos de buen humor para que sigan pagando los ocho dólares. Sam toma nota y sigue con su día.

Por otro lado del mundo, Jen está por conocer a Valencia, la chica con la que la ha citado Devin…mmm digamos que Devin tiene buen ojo, apuntémosla en la lista de personas que si nos pueden conseguir citas. En fin el lugar donde se han reunido es una casa a medio construir y la cosa es ayudar todos (una obra de caridad). Jennifer va vestida perfectamente acorde con la situación pero no tiene ni idea de que hacer ni como hacerlo.

Lo primero que le piden es que apile materiales en una esquina. Jen, para trauma de Valencia, no sabe si organizarlos por tipo o alfabéticamente XD. La mujer le dice que simplemente los ponga uno sobre de otro y eso basta. Jen siendo ella misma decide empezar por un pale que andaba por ahí y por supuesto como es una patosa total (presiento que se juntó alguna vez con @Crilixbcn y @Cibersandra esa gafura me suena conocida :P) Valencia termina con un pie dentro del hoyo que se suponía que ese pale debía cubrir.

Valencia que no quiere morir tan joven (encima es morena señoras…más le vale cuidarse :P) decide asignar a Jen a la oficina y es ahí donde se ponen a platicar y Jen le saca una cita para comer y disculparse por lo de su pie magullado.

Mientras tanto la pesadilla de Sam parece hacerse más y más grande cuando le toca atender a su novia y sus compañeros de trabajo todos trajeados y con la E de éxito grabada a fuego en sus frentes. La pobre Sam no sabe ni donde meterse así que opta por huir, pero claro no se puede huir para siempre y al final de la tarde termina encontrándose con Elizabeth en la fiesta que han organizado las Crises. Su novia le dice que entiende que se haya podido sentir mal. Sam se asusta porque piensa que Elizabeth le está haciendo mirroring por aquello de que es piscóloga.

Mientras tanto afuera las chicas platican sobre la nueva estrategia de Jennifer de salir también con Valencia:

Kris: Jen, si te gusta tanto Gillian, ¿Por qué quieres salir con Valencia?
Jen: Porque me gusta muchísimo Gillian.
Chris: (Irónica) Tiene sentido.
Jen: No, mira, si tengo un par de citas sin importancia con Valencia, entonces no voy a echar a perder las cosas con Gillian por ir en serio demasiado rápido.
Devin: ¿Pero no es anti-lésbico eso de andar con dos chicas al mismo tiempo?
Chris: ¿Y tú que vas a saber? Solo eres mitad lesbiana (porque Devin es bisexual)
Devin: Soy cien por ciento bollera cuando estoy con una chica. El hecho de que me gusten los palos también es solo un bonus.
Madre de Kris: ¡Amen a los palos hermana!
Kris: ¡Madre!

¿Ustedes que dicen chicas? ¿Es anti-lésbico salir con más de una chica al mismo tiempo? A mi la experiencia me ha enseñado que no, vamos que eso darle al doblete se da igual en chicas que en chicos. ¿Cuál ha sido su experiencia?

Devin insiste en que las mujeres no podemos salir con más de una mujer a un mismo tiempo. Jennifer se pregunta que es lo peor que podría pasar y su mente llega a varios escenarios incluido el siguiente:

Tip para salir con dos mujeres: no llevar blusas blancas que esa mancha es muy difícil de quitar :P.

Al otro día Chris va al consultorio del doctor Bob y se encuentra con que Kris está por ahí trabajando, digamos que no le hace la más mínima ilusión.

Jen por su parte está con Gillian y se lo está pasando demasiado bien otra vez, así que a pesar de todos esos malos escenarios creados en su mente decide salir con Valencia. Y ¿qué mejor para darse los ánimos necesarios que ir con Sam y tomarse un traguzqui?

Las chicas se encuentran y Sam aprovecha también para contarle que cree que su novia se la está psicologeando. Y ahí están las dos hablando sobre cual es la mejor estrategia a seguir en sus líos amorosos cuando un tío las interrumpe para preguntar si el Dina Shore ya empezó o que porque no ve a ninguna lesbiana por ahí.

Las dos voltean a verlo con cara de «nos tenía que tocar a nosotras el maldito pervertido de turno» y las dos le meten caña hasta que se dan cuenta que es el nuevo comprador del bar…mal asunto. Sam mete reversa e intenta venderse como la empleada del siglo pero la cara le cambia cuando se entera de que lo primero que hará el chico es quitar el viernes de lesbianas por un viernes de chicos gays.

Pasado el mal trago Sam se va al Beavers a tomarse un café y se encuentra con Elizabeth. Las dos hablan y su novia le explica que en realidad se preocupa por ella y que el mirroring lo hacemos todos. ¡Apunten chicas!

Jen por su parte está en plena cita con Valencia que resulta ser muy agradable. Las dos han ido a comer pizza y se lo están pasando bien así que Valencia decide que deberían tener otra cita y Jen se medio asusta pero acepta la idea.

Más tarde Jen tiene cita con Gillian así que se juntan y empieza a platicarle su chocoaventura con los materiales de construcción. Gillian se ríe mucho y le dice que le encantaría conocer el lugar (glups) a Jen le empieza a dar el tramafak pero al final terminan yendo y por más que la pobre mujer hace porque sus dos citas no se encuentren ¿adivinen que pasó al final?

Lo peor de todo es que no solo se conocen sino que encima solían salir cuando eran jóvenes…ais el mundo lésbico es demasiado pequeño para ser cierto. Jen ya se espera lo peor pero las chicas se toman genial de la vida el que haya salido con ambas, eso sí nuestra prota dice que solo quiere seguir saliendo con Gillian porque le gusta mucho.

Mientras tanto en casa de las Crises las chicas deciden contarle al doctor Bob que están embarazadas y él no puede sino estar feliz como lombriz por ellas.

Sam por su parte no tiene de otra sino volver a pedirle al nuevo jefe que le devuelva su trabajo (que su piso no se va a pagar solo) y afortunadamente este acepta aunque digamos que Sam no está muy cómoda que digamos.

Ya por la noche, Jen y Gillian han intercambiado lugares en el jacuzzi. Entonces la segunda confiesa que en realidad cuando se enteró que Jen estaba saliendo con Valencia no le gustó demasiado, parece que ella también se está clavando rápidamente. Y nuestras bridge girls deciden volver al jacuzzi y dejar de traumatizarse tanto por aquello de que la cosa se esté poniendo seria.

¿Cómo han visto el episodio chicas? ¿Qué es lo que más les ha gustado?