Señoras, el segundo episodio de la tercera temporada de Tierra de Lobos nos ha traido de vuelta a nuestras queridas Isabel y Cristina. Puede que no exáctamente como esperábamos (vamos a sufrir niñas, se los digo desde ya), pero eso no quita que la emoción de volver a verlas en nuestra pantalla fuera la mísma así que ¡vámonos con el resumen de lo que pasó!

Isabel y Cristina pareja lésbica

¡A mi nadie me impide ver a Cristina!

El episodio empieza con Isabel intentando escaparse al pueblo. Para nuestra desgracia, Nieves la agarra con las manos en la masa y se enfrenta con ella. La mujer tiene buenas intenciones, está preocupada porque no quiere que Lobo maté a su hermana, pero claro, en este momento a todas nos parece una pesada del mal. Sobre todo cuando amenaza a Isabel con irle con el chisme a su padre si se atreve a salir de la finca.

Nieves: Quieres ver a Cristina ¿verdad?
Isabel: Necesito saber como está.
Nieves: ¿Es que te has olvidado ya de como es el convento Isabel?
Isabel: No, no me he olvidado. Pero tengo que saber como está.
Nieves: Tienes que olvidarte de ella.
Isabel: No quiero y no puedo.

¡Toma ya! Isabel no está dispuesta a dejar de lado su relación con Cristina. Está ahí al acecho, esperando el mejor momento para encontrarse con ella y huir. Igual la mujer es paciente y como ve que no va a conseguir convencer a Nieves decide esperar.

Isabel y Cristina Tierra de Lobos

Más adelante vemos a Nieves dándose un baño en la tina mientras platica con Isabel. Justo en ese momento llega Rosa y le entrega a Isabel un mensajito que le ha dado una «muchacha morena del pueblo que salió de ese lugar donde jamás la dejan entrar». Obviamente los ojos de Isabel hacen chiribitas al instante y Nieves se pone de muy mal humor porque las dos saben que es de Cristina.

Isabel y Cristina tierra de lobos

En el mensaje, Cristina le dice a Isabel que si aún quiere huir con ella se vean en el bosque en su «lugar secreto». Isabel le pide a Rosa que salga y luego intenta convencer a Nieves de que la ayude a salir de la casa para encontrarse con su chica, pero su hermana se niega en redondo.

Mientras tanto, el Teniente Ruiz está metiéndose en terrenos fangosos porque se ha dado cuenta de que las deudas que Lobo le está cobrando al pueblo no son legales. El hombre va hasta la finca para advertirle de que debe poner sus papeles en orden.

En cuanto se va el teniente, Lobo intenta mover fichas para quitárselo de encima y seguir haciendo de las suyas, pero no consigue nada, así que se le ocurre la estúpida idea de ofrecerle la mano de Isabel con un plus de una buena dote. El teniente Ruiz es demasiado bueno para caer en algo así, y dice que aunque se siente muy halagado no podría aceptar si Isabel no está de acuerdo. Por eso Lobo lo invita a cenar para que se conozcan y se solucione ese pequeño «problema».

Isabel y Cristina Crisabel

¡Por fin!

Almudena y Nives se lanzan al burdel para intentar encontrar a Cristina. Lola les dice que la mujer se fue y la dejó sin dejar rastro ni avisarle, pero la morenaza al darse cuenta de que son las hermanas de su chica sale de su escondite para encontrarse con ellas.

Cristina les pregunta si las ha mandado Isabel y Nieves de inmediato toma la palabra para preguntarle si es verdad que van a escaparse.

Nieves: ¿A donde?
Cristina: No lo sé, lejos.
Nieves: ¿Y de qué van a vivir? Si se puede saber…claro…
Cristina: Siempre me las he apañado.
Nieves: Vendiendo tu cuerpo. ¿Vas a poner a Isabel también a vender el suyo?
Cristina: ¡No! ¡Ni hablar!

Nuestra morenaza está sufriendo el tercer grado típico de las hermanas. Hasta aquí un poco lo entiendo porque cuando tu sisterna anda metida en líos quieres saber por donde va a salir. Pero las hermanas lobo no se van a conformar con eso, quieren que Isabel sea feliz y piensan que eso no va a suceder si Cristina y ella siguen juntas, así que han decido mover ficha. Tienen buenas intenciones pero ¡están arruinando la vida de su hermana!

Son guapas pero ¡yo las mato!

Son guapas pero ¡yo las mato!

Alumudena: Mira Cristina, yo no lo entiendo, pero parece que Isabel te quiere de verdad.
Cristina: Y yo a ella.
Almudena: Entonces no la arrastres contigo.
Nieves: ¿No te das cuenta de que la vas a conducir a la desgracia? Eso si mi padre no os mata primero claro.
Almudena: Isabel todavía puede tener una… una vida normal. Ser feliz. Si la quieres deja que te olvide. De verdad, ¿no crees que le va a ir mejor sin ti?

Isabel y Cristina Tierra de Lobos

A Cristina se le rompe el corazón porque sabe que Isabel la ama con todo su corazón, pero también entiende que parte de lo que le dicen sus hermanas es cierto. Huir juntas significa que la vida de Isabel cambiará de vida radicalmente, la mujer no está acostumbrada a una vida sencilla y encima van a tener a Lobo buscándolas constantemente.

Entonces la morena toma una decisión que nos va a dejar a todas llorando a moco tendido. Pero eso sí, antes de irse intenta asegurarse de que las hermanas lobo entiendan que Isabel no puede cambiar su manera de ser, que no se transformará mágicamente porque ella no esté ahí. Ella le dará la oportunidad de ser feliz pero les hace prometer que estarán ahí para apoyarla en la que se le viene encima.

Isabel no es como vosotras, nunca lo va a ser. Ella necesita que la entiendan. ¿Te quedarás tu a su lado?

Isabel y Cristina

Más adelante, vemos a Isabel esperando nerviosa en el punto de reunión pactado con Cristina. Pero en lugar de su amada llega otra de las chicas del burdel que le entrega una carta.

Isabel, cuando leas esto estaré lejos. No me busques, estarás mejor sin mí.

Obviamente Isabel se queda con el corazón destrozado y se marcha del lugar con los ánimos por los suelos. No entiende lo que acaba de pasar. Cristina por su parte, la ve desde lejos con lágrimas en los ojos hasta que se pierde en el horizonte para luego marcharse en su caballo a buscar una nueva vida.

Para colmo de males, cuando Isabel llega a casa, Lobo le informa de que ha ofrecido su mano en matrimonio. ¡Vamos que la pobre ha tenido un día de perros! Sus hermanas intentan convencerla de que entre todas las posiblidades, Ruiz es de lo mejorcito, e Isabel termina saliendo de la casa para ir a visitar al teniente.

Lo de coser te va a tocar a ti.

Lo de coser te va a tocar a ti.

Isabel: Mi padre le ha ofrecido mi mano en matrimonio. ¿Qué va a contestarle?
Ruiz: ¿Qué debería contestar?
Isabel: Si quiere una mujer que le cosa el uniforme y le espere con la cena caliente debería de contestar que no.
Ruiz: No sabe coser…
Isabel: Sí sé, pero no me gusta.
Ruiz: ¿Y qué le gusta?
Isabel: Otras cosas…

Nunca esas dos palabras fueron tan buen respuesta chicas XD. A ella le gustan las mismas otras cosas que nos gustan a nosotras ¿verdad? Bueno a Isabel también le gustan los caballos y esa es la que suelta porque aunque estoy segura de que el teniente y ella tendrían también en común el gusto por las mujeres no es cosa de confesarse ahí a la primera de cambios.

Ruiz: Isabel ¿usted quiere casarse conmigo?
Isabel: Comparada con otros hombres usted no es de lo peor.

Jeje… amo a Isabel, al final la mujer le dice que conteste lo que crea, pero que no se lo piense mucho porque a ella no le gusta esperar. Donde manda capitana no gobierna marinero, así que el teniente Ruiz se lanza esa misma noche a pedirle su mano a Lobo.

Isabel y Cristina

Mi cara lo dice todo.

Lobo acepta encantado y antes de dejarlos a solas le susurra a Isabel que como la cosa no funcione pasará el resto de sus días en el convento. Así que la mujer hace de tripas corazón y se queda con Ruiz, eso sí, su cara no es precisamente un poema de amor.

Y así se terminó el episodio de esta semana chicas. ¿Cómo lo vieron? ¿Sufren como yo? Sé que la cosa ha empezado muy dura, pero déjenme que les de un pequeño halito de esperanza. La historia entre Isabel y Cristina no termina aquí. Se los aseguro. Así que sigan pendientes el próximo martes y recuerden que nos estamos juntando en Twitter a comentar el episodio con el Hashtag de #TierraDeLobas yo las dejó con algunos de los mejores comentarios de la noche.

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