Cómo transformar la homofóbia en amor en dos pasos

Hace un par de semanas, Honey Maid, una marca muy conocida de galletas americanas, lanzó un comercial super inclusivo para promocionarse. En el anuncio se intenta expresar como todas las familias son iguales a pesar de que las formen personas distintas y entre las familias que aparecen podíamos ver una de dos papás con sus hijos.

Como podrán ver, un comercial común y corriente de toda la vida, pero que provocó algunas críticas muy fuertes en las redes sociales. ¿Por qué? Pues porque hubo mucha gente que se mostró en desacuerdo con equiparar a una familia homoparental con la «familia tradicional» y tristemente la marca recibió mensajes bastante feos y homofóbicos en plan: «desaprobamos totalmente ese tipo de vida», «su comercial es asqueroso» o «que desagradable». Y estamos hablando de los que se pueden poner por aquí, porque hay otros bastante más bastos y terribles. Incluso se unieron a las criticas grupos como las tristemente célebres One Million Moms para pedir un boicot a la marca por hacer propaganda gay o la Asociación Americana de la Decencia, que aparentemente cree que esto es cosa del demonio.

Desde luego, recibir tantas críticas puede hacer que una marca opte por retractarse y procurar dirigir su campaña hacia un mensaje que no sea tan controvertido entre su publico meta ¿verdad? Pero Honey Maid decidió que para ellos era más importante quedarse con sus convicciones sobre la familia, y decidieron transformar la homofóbia en amor de una manera super original.

Lo que hicieron fue contratar a dos artistas y pedirles que encontraran una manera de transformar todos los comentarios negativos en algo positivo. La cosa no estaba fácil, pero las chicas pusieron manos a la obra e imprimieron cada mensaje negativo en una hoja de papel para luego enrollarlos y convertirlos en un letrero gigantesco que dice la palabra «Amor». Luego, para hacerlo aún más significativo, imprimieron los mensajes positivos y rodearon la palabra con una marea inmensamente más grande de positividad.

¡Me ha encantado su manera de responder a todos esos mensajes! Sí, es publicidad, pero no se imaginan lo difícil que es conseguir que una marca reconocida quiera publicitarse para el público LGBT. A estas alturas del partido, aun existe un miedo muy grande entre algunas marcas a que las reconozcan como gay friendly así que yo soy muy fan de todas esas que han decidido apoyar a la comunidad con su publicidad y sus mensajes.

Por cierto, la marca ha lanzado un «detrás de escenas» de todas las familias que participaron en el comercial, si les interesa ver las de los dos papás aquí la tienen:

En fin chicas que me ha encantado la manera que han utilizado para transformar la homofóbia en amor. Me ha dejado un sabor de boca muy bonito en este fin de semana. ¡Espero que consiga lo mismo con ustedes!

Vía: Slate