Sense8: Resumen de episodio 1×07 – Nomi y Amanita

¡Buenas, lesbicanarias! Ya es domingo, así que toca seguir descubriendo las peripecias de Nomi y Amanita que, si recordáis bien, están siendo acogidas por mamá Amanita. En realidad no pierden el tiempo porque en este capítulo ya están organizando “la resistencia”, por decirlo de alguna manera. Han quedado con el antiguo compañero hacker de Nomi, con el que, además, Nomi se portó como una amiga fantástica en su juventud. Lo salvó de ir a la cárcel por haber hackeado el Pentágono, asumió la culpa de su delito y, al ser menor, sólo le tocó hacer servicio comunitario. ¿Quién no querría tener una amiga tan altruista como Nomi? ¡Si es que es un amor de criatura!

Nomi le dice que no quería recordar esa parte de su vida y por eso no se lo había contado antes. Amanita, como ya sabemos que es la mejor novia que una pudiese desear, lo comprende y asiente con la cabeza. Que yo creo que Nomi le podría confesar que era una asesina en serie y Amanita seguiría adorándola y le daría un besito diciéndole “está todo bien, cariño”. Porque son ese tipo de pareja. Total, que el colega de Nomi (que se llama Bug) llega preguntando por Mike, pero cuando Nomi le explica, el hombre enseguida se disculpa por no haberse acordado, se abrazan, Nomi le presenta a Amanita… Bug es un tanto especialito con sus comentarios, todo es sexy para él, pero se nota que no lo dice con maldad. Es un buen tipo, es team Nomanita. Le trae un montón de aparatejos que no cito aquí porque no entiendo nada de lo que hablan, pero son cosas alegales que se utilizan para hackear.

Si estabais preocupadas por Sun, tranquilas. Sus compañeras de celda la han recibido muy bien, ya que todas son mujeres de armas tomar que comprenden su situación: una mató a su marido porque la maltrataba, otra también mató a su marido por ser un “hombre malo” y otra a su padre. Una de ellas lo dice claro: “En este país, a veces el único lugar en el que puedes encontrar mujeres valientes y honestas es la cárcel”. Y son todas muy majas, la invitan a té y hacen piña común. Girl power!

Daniela ha llevado a Lito y a Hernando a un restaurante vistiendo a Hernando como si fuese el guardaespaldas de Lito. Cuando llegan los paparazzis, Hernando se mete bastante en el papel y cuela, así que se relajan un poquito. Riley va en avión de regreso a Islandia y Capheus la visita así que flipa en colores, porque nunca había ido en avión. Frente al drama que acompaña siempre a Riley, Capheus es un contrapunto bastante interesante porque siempre está contento. Me gusta que los sensates se complementen tan bien, porque se aportan cosas diferentes los unos a los otros.

Lito y Hernando están con el subidón de que no los hayan reconocido como pareja y ahora puedan salir de casa juntos gracias a la estrategia de Daniela. Así que llegan al ascensor del piso, no se pueden contener y se comen a besos. Y yo sólo puedo pensar que disfruten mientras puedan, porque es imposible que esto dure mucho. Llamadme pesimista. Sin embargo, a continuación tenemos una escena aún más bonita, que es el padre de Riley recibiéndola en el aeropuerto a ritmo de ukelele. ¿Se puede ser más adorable? Y quiero que mi pobre Riley siempre sea así de feliz. Mirad qué linda, por favor.

Y como acabo de temer… ¡Sorpresa! A Lito, Hernando y Daniela se les ha colado Joaquín en el piso, que está borracho perdido y quiere saber cómo ha hecho Lito para “robarle” a Daniela, así que les corta todo el rollo. Menos mal que Hernando está todavía metido en su papel y con la adrenalina lo saca de allí en el aire. Como bien dice Lito, esto ya parece la vida de Whitney Houston en El Guardaespaldas.

Volviendo a Nomi, Amanita y su vida como fugitivas de la justicia, la madre de Amanita está muy sorprendida (para bien) con la novia que se ha echado su hija:

Mamá Amanita: Amanita no me dijo que salía con Robin Hood.

Amanita: Noms tiene una identidad secreta, mamá. Nerd de Silicon Valley de día, hacktivista política de noche. Intentó ir “straight”…

Nomi: ¡Ey! Yo nunca iría “straight”.

Amanita: Intentó seguir las reglas y casi la lobotomizan.

No traduzco el straight porque la broma no tendría sentido, lesbicanarias. Si no estáis al tanto, straight en inglés significa tanto ir recta/seguir las normas como ser heterosexual, así que la broma es intraducible, pero me parece muy bien traída, por eso la pongo. Además, que me encanta la dinámica familiar de estas tres. Mamá Amanita las apoya completamente y ellas dos no dejan de bromear y pasárselo pipa juntas, a pesar de las dificultades. ¡Queremos más parejas así!

Will sigue con sus cosas de policía que no nos interesan un carajo, siendo sincera, así que mejor centrarnos en Nomi, que le dice a su suegra que flipa de que se lo estén tomando todo tan bien. Pero es que la madre de Amanita es muy mística, de la rama hippie de la vida, y le dice que como hija de los 60 que es, lo de escuchar voces lo ve del todo normal, ya que en aquella época se veía casi como un milagro. Amanita lo tiene claro y asegura que, en lo que a ella respecta, sigue siendo un milagro. Cursi, pero efectivo. Sólo hay que ver cómo la mira su novia. Por cierto, es fascinante cómo están continuamente prodigándose en detalles cariñosos, en este caso Amanita le lleva un vasito de té helado a Nomi y se dan un beso. ¿Habéis contado cuántos llevan desde el principio de la serie? Yo ya perdí la cuenta. Amanita, de hecho, está tomando una piruleta y pasa esto:

Me encanta la naturalidad con la que insertan este tipo de momentos, estaría bien saber si están absolutamente guionizados o no, porque nos dan la gloria. La madre de Amanita está contándoles una anécdota sobre una vez que Amanita se perdió de pequeña y ella la encontró a través de una simple sensación que la llevó hasta ella. Así que si es por mamá Amanita, montan una religión alrededor de Nomi, estoy segura.

En la siguiente escena, nuestra hacker preferida está en su salsa con el ordenador buscando datos sobre el doctor Metzger, ¿os acordáis? Resulta que este tío ya realizó más operaciones en la misma zona de San Francisco y, de esos pacientes, sólo uno sobrevivió. Así que van a visitarlo a la residencia en la que está ingresado, ya que el pobre quedó un poco gagá, pero Nomi no puede aguantar la impresión al pensar que podría haber sido ella y sale corriendo. Amanita trata de tranquilizarla y le promete que nunca dejará que nada así le pase. Conociendo a Amanita, que es capaz de incendiar un hospital por ella, nos lo creemos. ¡Y tanto que nos lo creemos!

Las investigaciones de Will están llevando hacia zonas sensates relacionadas con la muerte de Angelica en la iglesia y la aparición de un barbudo de pelo blanco que ya habíamos identificado en el primer episodio como el malo. Kala habla con su diosa Ganesha que, según ella, le ha enviado la imagen de “un hombre con una gran trompa”. Claro, es mentarlo y ahí aparece. Ella y Wolfgang siguen teniendo momentos de conexión emocional fuerte, en Berlín llueve y en Bombai no, hablan sobre religión y milagros… Parece esto una comedia romántica. Casi se besan y todo.

A Riley la despierta su padre tocando el piano y Sun está aprendiendo a coser gracias a una colega de celda. Supuestamente cada presa tiene una cantidad que coser, pero hay una que va de matona y obliga a la amiga de Sun (porque ya es amiga) a hacerlo por ella. Uy sí, tú prepárate muchacha, que no sabes quién acaba de llegar a la cárcel.

Mientras todo esto pasa, Lito y Hernando están en su propia película personal, pero enseguida se les acaba lo bueno porque Joaquín ha robado el móvil a Daniela y en él hay fotos de Lito y Hernando teniendo sexo. Así a pelo, porque a Daniela le gusta documentar este tipo de momentos. ¡Extorsión a la vista!

A estas alturas, Nomi y Amanita ya están en modo espías, con gorros, gafas de sol y todo. El doctor Metzger llega a la cafetería en la que están, porque tienen controladísima su ruta, y Nomi aprovecha para hackear su móvil con un aparato, pero precisamente lo llaman para avisarlo y se marcha pies en polvorosa. Nomi no es de las que se amedrenta fácilmente y decide llamar a ese mismo número, que ha quedado registrado. El hombre parece reconocer su voz, pero ni así, porque Nomi no va a parar hasta desenmascarar a esta gente. Y a lo loco deciden que van a entrar en casa del doctor a investigar aprovechando que, según su email hackeado, se va de viaje. Amanita la mira en plan “estás loca perdía”, pero se apunta a un bombardeo.

Así que ya por la noche se ponen a ello y consiguen abrir la puerta con un martillo y una barra de hierro, para sorpresa de ambas:

Amanita: ¡Guau, funcionó!

Nomi: ¿Leíste eso en un libro?

Amanita: El poder de la literatura. ¿Sabes qué más leí en un libro de detectives? Que puedes usar la barra como alarma. Si alguien quiere entrar, lo escucharemos.

Nomi: Somos un gran equipo.

Amanita: Quizás Bug tenga razón y debamos formar un dúo dinámico criminal.

Nomi: Creo que ya lo somos.

Madre mía, no me digáis que no son geniales estas dos. Que hasta entran al piso del doctor cogidas de la mano, en plan “qué interesante esta cita, asaltar una casa juntas”. Tremendas.

Rápidamente Nomi se encarga de investigar su ordenador personal, aunque no encuentra ni siquiera porno, algo que a Amanita le parece rarísimo. Están ahí las dos cometiendo crímenes como quien va al cine, cuando la barra de metal cae y de repente se acojonan. ¡Es el doctor malvado, chicas! Pero en lugar de esconderse, deciden enfrentarlo directamente y le empiezan a hacer preguntas amenazándolo con el martillo y un botecito de gas lacrimógeno. De pronto Jonas visita a Nomi y le dice que tiene que escapar ya, que Whispers está en camino. Whispers es el hombre malo de la barba. Y visto y no visto, en a penas segundos aparece… ¡pero en la forma del hombre que operó el doctor! De repente ya no está gagá, sino que es básicamente un asesino. ¡No sé vosotras, pero yo no tengo ni idea de qué está pasando aquí! Entre tiros y golpes, Nomi logra terminar de copiar el disco duro de Metzger y las dos salen corriendo por el pasillo huyendo de esa mole de hombre que no parece entender a razones.

Por suerte parece que no está detrás de ellas, sino del doctor, a quien persigue y termina asesinando con un tiro en la frente. Y después se suicida disparándose a sí mismo en la boca. Nomi y Amanita han sido testigos de todo esto y están en shock. ¡Normal! Es que en cinco minutos ha pasado de todo, están más confusas que cuando llegaron y ha muerto gente a cascoporro. Que, por cierto, con todo esto me olvidé de deciros que entremedias también han matado de un disparo a Félix, el amigo de Wolfgang, durante un robo. Ha sido un capítulo completito, vaya.

Esta semana, Sense8 nos ha dado una dosis de Nomanita elevada. En realidad, Nomi es la que está descubriendo casi todo el pastel de Whispers, quizás en una especie de co-liderazgo junto a Will. Podríamos decir que está siendo un personaje bastante protagonista, con Amanita siempre a su lado. ¡Que siga así!