Vamos a seguir con Couple-ish para ponernos al día ahora que han entrado en parón y con suerte podremos alcanzar el ritmo de emisión (parón un poco raro, porque episodios de la trama no hay, pero sí vídeos en modo tags de pareja). En principio, Dee y Rachel siguen su vida igual que siempre, en paralelo a los vídeos en los que fingen ser pareja. Dee parece que está hasta las cejas de trabajo y lleva su vida tal que así:

El suelo, siempre tan cómodo para dormir noches enteras

El suelo, siempre tan cómodo para dormir noches enteras

Trabajo, trabajo y más trabajo. Rachel es una buena persona y se levanta con mucho cuidado para no molestar, va a la cocina a prepararse el desayuno y termina tirando una fuente al suelo, porque no hay nada mejor que no querer hacer ruido para que pase algo así. Es la ley de Murphy. Dee está de muy mala hostia al despertarse, supongo que porque no es una persona mañanera y, además, se le caen los ojos de cansancio y… no sé, digamos que no tiene el chichi pa’ farolillos con tanto estrés y trabajo. Dee me cae mal aquí, no voy a ocultarlo, porque le dice unas cosas a Rachel bastante poco amables sobre que, claro, como ella trabaja en un bar enseña canalillo y listo (¿en serio acabo de escuchar esta machirulada de tu boca, Dee?), pero Dee, en cambio, no puede permitirse ningún fallo porque se arriesga al despido. A ver, no sé cómo va ese tema en Canadá, pero aquí que yo sepa también te pueden echar la calle si te equivocas en un bar y, en según qué bar, te explotan y demás con un salario de mierda. Así que menos humitos, que supongo que todo el mundo tiene sus cosas, no es necesario que lo pagues con Rachel. Además, a Dee lo de fingir ser pareja todavía no le hace ni puñetera gracia. ¿Pero por qué aceptas entonces? Ay.

"Tengamos la fiesta en paz, Rachel"

«Tengamos la fiesta en paz, Rachel»

Tienen este encuentro en la cocina tan poco amistoso y llegan rápidamente al tema de por qué Rachel no quiere volver a Londres, en plan “¿qué cojones puede haber allí que te eche tanto para atrás?”. Pues, aparentemente, mucho.

Rachel: Mi madre dijo que si alguna vez regresaba cambiaría las cerraduras.

Dee: Oh…

Rachel: Sí. Así que era eso o arriesgarme aquí. Tú parecías la mejor opción, a pesar de ser… ya sabes, tú.

Dee: Eso fue casi un cumplido.

Pues sí, casi. Tenéis una forma un tanto extraña de relacionaros, sólo digo eso. Hay una cierta… ¿tensión? Que yo, personalmente, puedo leer de muchas maneras, así que como me empecéis a dar motivos… Que, además, sabemos que la madre de Rachel es una capulla y eso nos hace quererla más. En cuanto a la de Dee y Amy, al parecer es más de lo mismo, aunque Dee no entra en muchos detalles. ¡Si resulta que vais a tener más cosas en común de lo que pensáis! De pronto aparece Amy como “ey, resulta que pasaba por aquí a contaros que ahora sois una sensación en Youtube. No big deal”.

"La gente quiere que hagáis el superkiss challenge o algo así"

«La gente quiere que hagáis el superkiss challenge o algo así»

Resulta que Amy, como buena hermana, quiso darle un poco de bombo al asunto de los vídeos como para demostrar que estaba orgullosa de Dee y de su “novia Rachel”, lo colgó en Tumblr y se le fue un poquito de las manos… Y quien dice un poquito, dice 1.000 visitas en 24 horas. Así que ahora la gente quiere más vídeos y más besos. Dee se caga en todo lo cagable, pero Rachel está encantada. Está encantada porque la cosa marcha, ¿no? Esto no se podía shippear, ¿no? ¿NO? Total, que hay que darle a la audiencia lo que quiere. ¡Queremos besos! ¡Queremos tags parejiles! ¡Queremos que finjáis estar in love (o terminar enamorándoos, ¿quién sabe?)! Y LO QUEREMOS YA.

"¿Por qué me obligas a hacer estas mierda, Rachel?"

«¿Por qué me obligas a hacer estas mierda, Rachel?»

Así que se ponen, como veis, delante de la cámara para celebrar que ya tienen 5.000 subscriptores. ¿5.000 ya? Qué exageración, lesbicanarias. Aunque en parte lo entiendo, porque  tienen cierta adorabilidad. Sobre todo Rachel. De verdad que Rachel en estos vídeos parece un osito de peluche, los vive mucho más, porque recordemos que Dee los hace a desgana. Rachel explica que van a hacer “The girlfriend tag” (no os lo explico porque supongo que ya estáis al tanto de estas modas de Youtube), pero Dee no sabe de qué va y prefiere que lo renombren “The partner tag”. Porque Dee no es una novia, no entra en las categorías de género binario, recordémoslo. De verdad que un día escribo una entrada para detallar mejor esto, dadme tiempo.

Amy también anda por ahí y decide darse a conocer al público, diciendo que está soltera y dispuesta. Rachel pone una carita rara como pensando “ésta está ligando con otras personas y yo no puedo decir nada”. Ay, ¿pero esto qué? ¿Os gustáis? ¿Os queréis? Creo que este “triángulo amoroso” no puede terminar en nada bueno.

"Hola, soy Amy y quiero tema con alguien porque Rachel no me hace caso"

«Hola, soy Amy y quiero tema con alguien porque Rachel no me hace caso»

El caso es que se pillan unas cervezas y empiezan a preguntarse las cosas típicas del tag, improvisando muchísimo porque se ve que no lo prepararon demasiado. Terminan diciendo que se conocieron en un barco y que Rachel se tira pedos por la noche.

Rachel: ¿Realmente tenías que decir eso?

Dee: Sí, tenía, porque te quiero.

Rachel: ¿Ah, sí?

Dee: Venga, cariño.

Rachel: (Cerrándolos) ¿Qué color de ojos tengo?

Dee: Ahh…

Rachel: No es tan difícil.

Dee: Honestamente, me despisto demasiado mirando fijamente tus labios la mitad del tiempo como para darme cuenta. Podrían ser morados, por lo que a mí respecta.

¿Esto estaba en el guión?

¿Esto estaba en el guión?

Entre que se tiran pullitas y explican que Rachel fue la que se lanzó a besar a Dee la primera vez y demás coqueteos ¿fingidos? (ya no sé si fingen o les está saliendo cada vez más natural todo esto), se miran de esa forma que veis. Pero de verdad que se miran durante mucho rato y en silencio, hasta que Amy susurra desde atrás “besaoooos” y Dee reacciona con un “nanai, yo no me beso a demanda de nadie”. ¡Que os beséis, maldita sea! ¿Igual yo ya estoy shippeando a Dee y a Rachel? Pues igual. Pero nos quedamos sin beso, porque Dee no está por la labor. Yo creo que Rachel a lo mejor sí que estaría más por la labor… Pero en fin, ideas que se me pasan por la cabeza. Despiden el vlog brindando con nosotras.

"Salud, lesbicanarias"

«Salud, lesbicanarias»

Insisto en que Rachel es más bonita que las pesetas. Amy es simpática e incluso Dee en vídeos así se permite jugar un poco y hacer bromas interesantes. ¿Irá esto a más lesbicanarias? Yo sólo digo que si dos personas fingen ser pareja durante cierto tiempo, al final no es raro que surjan sentimientos indeseados y contradictorios. Estas cosas suelen ser argumentos de fanfiction. No me digáis que no va a pasar, PORQUE VA A PASAR. La serie no es ninguna maravilla (seamos sinceras), pero entretiene y tiene un tratamiento de la sexualidad y el género francamente bueno. Aunque sólo sea por eso y porque yo shippeo ya a Dee y a Rachel ligeramente, veamos qué nos traen los siguientes episodios.