¿Te ha pasado que sientes un hoyo en la panza? ¿que pierdes la respiración de la nada? ¿Alguna vez has sentido que explotaras porque no puedes retener las emociones? ¿Te han traicionado?

Es difícil levantarse después de una traición, mucho más cuando fuiste la persona que más entregó. El pecho lo sientes cada vez más frío pero no es el frío de Diciembre; es esa sensación que genera tu cerebro que indica que alguien te rompió el corazón, o mejor dicho, rompió lo más preciado que tenías. ¿Volveré a confiar en alguien?

Podrás hacerlo en el momento en el que tú quieras, pero me gustaría compartir contigo la forma en la que yo logré reforzarme después de una traición.

Date el tiempo necesario para mandarla lo más lejos posible

Es comprensible que los primeros días después de la traición, son los más complicados, ya sea por todas esas emociones de venganza que tienes o las miles de lagrimas que estás liberando. Por esta razón te recomiendo gritar, llorar, blasfemar, seguir gritando… sola, muchas personas creemos que el estar sola nos llevará más hondo, pero la verdad es que es un momento en donde tenemos que mantener el ciclo de nuestro duelo.

Date tiempo de que todas esas emociones tomen calma, todo se estabilizará y podrás pensar un poco más en calma. Date tiempo de decir lo que quieras por medio de una hoja, de un audio, de una canción… la forma de expresión que más desees, después de eso destruye lo  que creaste; si bien la persona a la que iba dirigida nunca se enteró de eso, tu pudiste sacarlo del pecho sin lastimar a quienes más te aman.

Resguardar todas esas ideas, esas palabras por decir, todo los planes que tenían; serán lo que acaben contigo. No creas esa idea de que callar las cosas será la mejor opción. Tanta energía dentro de tu sistema necesita descargarse, vacía eso que te duele y verás la diferencia.

«Me siento sin esperanza, deprimida, enojada, pero sobre todo: Tengo miedo»

Deja los por qué’s de lado

Lo peor que podía hacer era preguntarme “por qué a mí” “por qué me dejó” “por qué no fui suficiente”. Todas estas preguntas  no tienen respuesta o simplemente no vale la pena responder. El sentimiento de traición nos nubla y no nos deja reflexionar lo ocurrido. Deja atrás las preguntas y trata de enfocar tu atención en las cosas buenas y malas de lo ocurrido. Incluso la gente que te lastimó, te enseñó lo que no quieres ni necesitas en tu vida.

Date la oportunidad de construir tus cimientos de forma adecuada; después de la reflexión utilizaras, piedra en vez de cartón para estructuras tus futuras relaciones (no sólo de pareja, también de amistad y familiares).  Dejaras de buscar lealtad en personas que te hacen sentir en lodo y atesorarás a las personas que te ayudan a construir tus cimientos.

«¿Cómo pudiste hacerme esto?»

No cierres el panorama

Mucha gente considera que la mejor forma de superar todo lo ocurrido siempre será el cerrar su corazón ante toda persona que lo intente tocar. La realidad es que, si lo haces, estarías traicionandote; cerrar el generoso corazón, esa sonrisa, los buenos tratos y la preocupación que brindas a otra persona, sólo te hará infeliz.

Deja que el amor siga fluyendo, muy probablemente llegue alguien que cuide mejor tu corazón y lo lastime de nuevo; pero te aseguro que si mantienes esa fe por encontrar a la chica que tenga los mismos principios que tú en una relación, serás la más feliz del mundo y no la amargada que cerró su corazón por una chica que no supo cómo tratarlo o no estaba lista para hacerlo.

La verdad es que no estamos en un videojuego en donde podamos escoger rutas, compañeros ni nada de eso; pero en la vida si podemos escoger que lado de nosotros alimentaremos. ¿Qué harás, alimentar tu lado fuerte y el que tiene ganas de seguir caminando? 0 ¿Alimentarás al lado que quiere guardar rencor y se dará por vencido?

Decide no verte como la víctima (aunque lo seas), no te veas impotente, cuida de tus emociones, no tengas miedo al fracaso ni al desamor; ya que todo en esta vida, bueno o malo, deja algo que nos hace crecer siempre. Entiendo que puedas estar en el momento más doloroso hasta ahora, pero después de la tormenta viene la calma y estaría bonito que tu fueras el arcoíris de alguien que sabrá tomarse el tiempo para apreciar tu belleza.