Sugar Rush resumen de episodio 1×10

Escrito por: Yovanu

Escribo desde Buenos Aires, Argentina, no es lo más al sur que se puede estar, pero casi, así que si bien geográficamente tengo una visión austral del mundo,mi imaginación no conoce fronteras. Me gusta encontrar belleza en lo extraordinario y lo cotidiano, lo grandioso y lo pequeño, así que no es raro verme con una cámara de fotos de aquí para allá captando todo aquello que ven mis ojos y más, en especial lo imperceptible.

Bienvenid@s nuevamente al mágico mundo de Sugar Rush, en un capítulo que no sólo es especial e importante como todos, sino que además es el último de la temporada, así que veremos qué trae consigo.

El capítulo anterior nos había dejado sin saber en qué lío se había metido Sugar esta vez y Kim, para ser fiel a lo que fue siempre, corrió en su auxilio dejando plantada a Beth. Así es que vemos a Kim correr por la playa buscando a Sugar, pensando que quizá era algo sin importancia como siempre cuando finalmente la encuentra llorando y con las manos llenas de sangre. Por supuesto Kim se asusta al ver eso y le pregunta qué pasó, Sugar está en una crisis de nervios y sólo llega a decir que apuñaló a alguien (Si algo me faltaba para convencerme que Sugar no es la chica ideal para presentarle a mamá y papá, era esto).

Por supuesto de Sugar no podemos esperar reacciones comunes porque nunca las tuvo, así que su grandioso plan es escaparse, para lo cual necesita dinero que no tiene, así que para seguir sumando delitos a su carrera delictiva, decide obtenerlo robando carteras y todo lo que tiene a mano. Kim que lo que tiene de bondad le falta de carácter y determinación, no sólo no lo impide sino que la acompaña pasivamente mientras ella se dedica a hacer todo esto. Finalmente decide emitir sonido y le dice que tiene dinero en su casa, que podrían pasar por allí. Sugar acepta y hacía allí se dirigen.

Mientras Sugar se queda esperando en la puerta de la casa de Kim, ésta entra y se encuentra a Stella, Nathan y Matt preparando la comida, ahí Stella le dice que no quería irse sin despedirse de ella. Kim, quien había estado hasta ahora pendiente de su cita frustrada y viendo qué hacer con su amiga prófuga de la justicia, ni enterada estaba que sus padres habían llegado a esa determinación. Kim le dice a su madre que lo entiende pero como podemos ver luego al verla llorar en su habitación, está destrozada.

Entonces se pregunta: ¿Por qué tener este final aburrido si puedo ser la coestrella de mi propia aventura?

Kim recoge todo lo que encuentra de valor a su paso, recoge algo de ropa y le dice a Sugar que se van. Y ahí están, las Thelma & Louise adolescentes se dan a la fuga.

Mientras caminan por las calles, Sugar está paranoica porque la policía la está buscando y le dice a Kim deben tomar el autobús para irse a Londres, perderse en la ciudad, conseguir trabajos y ocultarse por un tiempo. Esperando el autobús Kim recibe un mensaje y Sugar comienza a interrogarla ¿es tu nueva novia? ¿Dónde la conociste?, pero Kim no está muy interesada en responder y la salva el autobús que llega.

Más adelante las vemos en algún lugar camino a Londres, porque ni ellas saben con precisión dónde están, Kim está triste y comenta porque es increíble cómo se puede vivir con una persona tanto tiempo y en realidad no conocerla. Cuando Sugar escucha esto le pregunta si Stella otra vez hizo de las suyas, Kim le dice que sí, que Stella decidió irse y que su padre no piensa hacer nada para impedirlo, sin importarle ni ella, ni Matt, entonces no encuentra sentido a quedarse en esa casa.

Finalmente Sugar decide contarle a Kim lo que sucedió. Ella estaba en la playa con un tipo que había conocido esa noche, estaba haciéndolo con él y cuando éste terminó, se apareció un compañero de él para tener sexo también, entonces Sugar le dijo que no quería, pero como el tipo no oía razones, bueno, una botella rota fue su respuesta. Kim al oír esto la observa entre asustada y sorprendida. Sugar le dice que no entiende por qué nadie se puede enamorar de ella u obsesionarse como le sucede a Kim con Tom. (De momento se me ocurren muchas razones, pero dado lo dramático del momento, voy a dejarlo pasar)

Kim le pregunta si sabe cómo robar un auto, y lo siguiente que vemos es a la misma Kim rompiendo la ventana de un coche (¡eso es lo que se llama robar un auto con destreza!). Así que nuestras niñas se dan a la fuga dejando Brighton en su nuevo coche robado.

Todo es felicidad, gritos, sonrisas y música a todo volumen hasta que Kim le pide a Sugar ser ella la que conduzca, al principio Sugar no está muy convencida pero acepta, y nuestra pelirroja no sé si tiene un ataque de “quiero morir esta noche con mi mejor amiga” o que, pero no suelta el acelerador pese a los gritos de su amiga, finalmente no terminan matándose de milagro, lo cual enfurece a Sugar que se baja del coche enojada con Kim.

Una vez que ya se encuentran calmadas las dos, Sugar comenta que quizá hubiera sido más simple acostarse también con ese tipo y ahora tendrían menos problemas, porque de última era sólo un tipo más en la lista. Kim se enfurece y le dice que no puede entender cómo no es capaz de ver que es una chica linda, inteligente, divertida (particularmente no coincido con ninguna de las tres apreciaciones) y desperdicia su tiempo con tipos que no valen nada.

De vuelta en el coche, Sugar le dice a Kim que tienen un futuro muy distinto, que seguramente Kim irá a la universidad, dejará Brighton, se casará con una lesbiana millonaria y vivirá en un penthouse con vista a la estatua de la libertad; en cambio ella seguramente cumplirá una condena en alguna cárcel y se hará adicta a la heroína. Le confiesa a Kim que aunque sea por una noche le gustaría tener un penthouse. Kim le ordena que conduzca hacia Londres, y ya están nuevamente en camino.

Al llegar a Londres se registran en un hotel y específicamente en el penthouse Porque de esto se trató siempre la historia, ¿no?, de cumplirle los deseos a Sugar.

Se preguntarán cómo es que pagan un penthouse ¿no? Bueno, no hay nada que mastercard no pueda comprar… o visa…o american express, o la tarjeta de crédito que le hubieran robado a Stella.

Vemos a las dos contemplando la vista que tienen de la ciudad, ambas en silencio hasta que Sugar le pregunta si preferiría estar con la otra chica ahí, y Kim le responde que no está con Beth por el simple hecho de que está con ella. Entonces Sugar le pregunta si se acostó con Beth, Kim responde que no, le pregunta si se besaron, Kim responde que sí, entonces le pregunta cuál de las dos besa mejor… y finalmente termina con un ¿a quién prefieres? ¿a mí o a ella?

Kim dice que Beth es increíble y muy linda….y le pregunta a Sugar con quién preferiría estar ella esa noche. Comienza a preguntarle en tono de reproche por qué la llamó a ella, por qué simplemente no se fue de la ciudad, y Sugar le responde lo obvio, lo que todas sabemos: Porque sabía que ibas a venir.

Kim triste y con voz entrecortada le pregunta si entonces siempre va a ser así, siempre corriendo a su encuentro, traduciendo lo que dice un tipo francés, comprándole cosas con la tarjeta de crédito de su madre, besándola para que pueda calentar a otra persona, etcétera. Finalmente le dice a Sugar que le diga alguna cosa que haya hecho por ella, al menos una. Obviamente obtiene silencio y mirada arrepentida de Sugar, porque como ya sabemos, nunca hizo nada por ella.

Sugar se acerca a Kim para besarla y Kim le dice que no, que no lo haga. Sugar le acaricia el pelo y le dice que no se preocupe, que esta vez significa algo (y por la actitud y el tono de voz, debemos creerle que, aunque sea momentáneamente, está hablando en serio).

Se besan y en la escena siguiente ya es de día y están las dos abrazadas en la cama, así que suponemos nuestra Kim finalmente cumplió su sueño.

Lo último que vemos en esta temporada es a Nathan y Stella llegar al hotel con la policía, así que habrá que esperar hasta la próxima temporada para saber qué pasa con nuestra Kim, con Sugar, con el después de la noche que pasaron juntas, etcétera.

¿Pero qué creían? ¿Que había final feliz? ¡¡Esto es Sugar Rush!!