Esta semana estamos entre el luto de despedirnos para siempre de Maca y Esther, la pareja lésbica de Hospital Central. Nos despedimos felices, porque al menos esta historia tuvo un final feliz que nos dejó con una sonrisa en los labios.

Siempre que nos despedimos de alguien da tristecilla y todo hay que decirlo hemos pasado muy grandes momentos junto a esta pareja, no por nada las hemos seguido a lo largo de once temporadas. Así que por eso creo que se merecen un post para despedirlas por todo lo alto y también para hablar de la importancia de esta pareja en ese boom de contenido lésbico que se dio en España a partir de su llegada a nuestras televisiones.

Por allá de septiembre del 2004 nuestras pantallas se iluminaron con la aparición de Patricia Vico en la serie haciendo el papel de Macarena Fernández (Wilson). Y ¿para qué lo vamos a negar? Desde el instante en que entró esa pediatra desenfadada, con convicciones super fuertes, una moto increíble y (lo mejor de todo) lesbiana, nuestros corazones se derritieron junto al de Esther (Fátima Baeza).

Pero entonces sucedió algo mucho más importante, porque a nosotras siendo sinceras con que sean dos chicas nos medio ganan, pero Maca y Esther consiguieron ganarse al público heterosexual. Algo que hasta entonces no había sucedido, porque vale, habíamos tenido otros personajes lésbicos en televisión como Bea o Diana pero no habían resonado entre todo el público como esta pareja.

Hace un par de años platicaba con Sarah Warn de AfterEllen que fue gracias a Maca y Esther que las televisoras empezaron a plantearse el que tener una pareja lésbica en pantalla podía ser algo positivo para ellos. Porque a lo mejor no lo saben pero por ejemplo, el episodio de la boda entre Maca y Esther que se emitió en el 2008 fue el episodio más visto de la serie hasta ese momento. Lo que nos habla de que la manera en la que los escritores manejaron los inicios del romance entre esta pareja le llegó no solo al público LGBT sino también a mucho de la gente que solía ver la serie de manera regular. Y en lugar de que sucedieran todas esas amenazas apocalípticas de los de siempre, con esta pareja la serie consiguió, reflejando de manera honesta una relación lésbica, conseguir más audiencia.

Vale, también hubo muchos momentos en los que nos dieron ganas de matarlos o suicidarnos con galletas de animalitos, como cuando Esther se acostó con Raúl o en esta temporada cuando Maca decidió que se quedaba en España a última hora. Pero yo prefiero acordarme de los buenos tiempos y los detalles divertidos como ese masajito que nos dejó a todas a cuadros con el que Maca nos dejó babeando a todas, la boda o algunas de sus múltiples reconciliaciones.

YouTube video

Porque seguramente pasará el tiempo y vendrán muchas series nuevas y esperemos que mejores, pero nunca podremos olvidarnos de las siete vidas de Esther (a esa mujer le pasó de todo en esta vida) de lo guapísima que es Vero (que digo yo, si ya vamos a tener una tercera en discordia ¿quién mejor que Carolina Cerezuela?), pero sobre todo de los buenos momentos que nos hicieron pasar estas dos chicas juntas.

Así que nada señoras, toca decirles adiós, pero me encantaría que convirtiéramos este post en un repositorio de nuestros momentos favoritos entre las chicas. ¿Me comparten cuales fueron sus episodios favoritos?