Faking It: Resumen de episodio 3×03 – Amy y Karma

Ojo al dato, porque este capítulo de Faking It se llama Karmygeddon, nada más y nada menos. Así que agarrad vuestros corazones Karmy o afilad vuestros cuchillos anti-Karmy si es el caso. Anyway, allá vamos.

En el capítulo anterior Amy vio a Karma besándose con Zita y resulta que ha decidido vengarse de Karma exponiendo un vídeo de su preadolescencia que… Bueno, es un poco Robin en How I Met Your Mother con su Let’s Go To The Mall. No hay palabras para describir esto, de verdad. No hay palabras.

O_O Sí, es doloroso. Lauren está encantada de la vida, Amy tiene cara de “uy, igual me pasé un poquito”, Shane está preocupado y Liam… Ah sí, Liam también sigue en la serie, es verdad. Ahí está con su manpain y sus cosas. Sorprendentemente Karma llega al instituto al día siguiente irradiando calma y felicidad con su novio al lado en plan orgullo, mientras el resto se burla de ella. El chico en plan “qué novia tan hippie yippie me eché” y ella “pues sí, Amy no me preocupa, ¿quién es Amy? ¿La chica de la cafetería?” Ya, por supuesto que me voy a creer esto…

La prueba está en que no pasa mucho tiempo hasta que Karma enfrenta a Amy. Karma enseguida se defiende de las acusaciones explicando que fue Zita quien la besó a ella y no al contrario. Amy se nota que está un poco arrepentida y tal, pero Lauren se pone en plan pitbull a defender a su hermanamiga y yo estoy muy a favor de esto, como bien sabéis. Aunque tampoco me gusta que presione tanto a Amy cuando se ve que Amy se siente mal por lo de Karma y tiene remordimientos. La presión social nunca es bien.

De todas formas, Amy termina hasta el coño y le grita que a lo mejor es una “villana” y Karma pone cara de “oh, it’s on, bitch”, así que va a pedir consejo a Shane sobre maneras de vengarse porque él sabemos que es más reina del mal. Inciso aquí, a parte de tener clases de masajes, resulta que también tienen en ese instituto un gimnasio gigante… ¿ALGUIEN ME VA A EXPLICAR ESTO? ¿Es un instituto o un spa?

Total, al final Shane termina dándole una idea a Karma de manera involuntaria. Amy se encuentra con Liam y se entera de que en realidad sí fue Zita la que besó a Karma, así que se pone en plan “ups, tierra trágame” y decide disculparse. Pero este capítulo se llamaba Karmygeddon por algo y ahora resulta que Karma ha decidido repartir el diario personal de Amy por todo el instituto. Lo que viene siendo un golpe bajo.

Amy: ¡Eso era mi diario, mis pensamientos privados!

Karma: Bueno… Ahora estamos empatadas.

Amy: No puedo creer que estuviese pensando en disculparme.

Karma: ¿Lo estabas?

Amy: Karma, no sólo ya no estoy enamorada de ti, sino que ya no te quiero como amiga.

Karma: ¡Pues ya somos dos!

Sí, Karma, en tu cara se nota que tampoco quieres ser su amiga ni nada. Muy bien Amy filtrando tu vídeo a toda la escuela, muy bien tú repartiendo su diario a toda la escuela. Están siendo supermaduras, ¿verdad? A veces me olvido de que son adolescentes de instituto y por lo visto eso implica actuar estúpidamente el 90% del tiempo. La directora Penélope aparece por allí a darle la chapa en plan “joder, Karma, si es que yo siempre fui Karmy shipper y ahora me sales con estas tonterías y no puedo ni defenderte…” Que es lógico, porque defender a Karma es complicado habitualmente. Pero repetid conmigo: Son adolescentes de instituto, son adolescentes de instituto…

El novio de Karma sólo quiere caminar sobre brasas y hacer meditación, así que todo este drama le toca las bolas ampliamente, cosa que le echa en cara a Karma. Mira, chico… Me estás empezando a caer mal y eso que yo te defendía. Mientras, Shane y Lauren discuten leyendo el diario de Amy, pero les falta una página para saber qué dicen de ellos. Qué buenos amigos que leen tu diario privado, ¿no?

Karma decide que va a tratar de calmar las aguas y acepta una entrevista con la redactora del instituto, que lleva todo el capítulo persiguiéndola. Así que la retransmiten a todo el instituto en directo, porque again, ya sabéis que este instituto es moderno para todo. Todo parece ir muy bien porque Karma se trae el discurso preparado de “paz y amor y el plus pa’l salón” y dice que todo ha sido un crimen pasional y que leer el diario personal de alguien es un no, no, no, no. Que ella no lo ha hecho. Cosa que creo, porque lo habrá filtrado a la escuela entera, pero es obvio que no se ha parado a leerlo lo más mínimo porque hay cosas que le pillan de sorpresa.

Entrevistadora: En el diario Amy tiene algunas preguntas y, francamente, yo también. ¿En el fondo tienes sentimientos hacia ella?

Karma (tras una pausa): No. No los tengo. Como amiga, desde luego, pero soy hetero.

Entrevistadora: ¿Pero es posible que no seas tan hetero como afirmas?

Karma: ¿Perdona?

Entrevistadora: Bueno… Besaste a… ¿Zita? En el bar mitzvah de Liam Booker.

Karma: Ok. Zita me besó a mí, como ya expliqué muchas veces, pero no estoy aquí para poner excusas, estoy aquí para contar mi parte de la historia.

Entrevistadora: Pero a eso me refiero, tu historia no encaja. Insistes en que eres hetero, pero hay un claro patrón de ti besando a chicas. Puedes ver por qué la gente se pregunta…

Karma: Vale, creo que ya he tenido suficiente con estas preguntas, así que esta entrevista se acabó.

Y se levanta y se marcha cual elefante en una cacharrería. Que le ha molestado que insistiesen tanto sobre su sexualidad y por fin alguien le ha preguntado lo que todo el mundo piensa, pero ella se va por la tangente. Por supuestísimo que sí. Y Amy ha visto la entrevista asintiendo a todo como si estuviese esperando que en cualquier momento Karma dijese que no es tan hetero como dice. Ay, Amy, estás muy pillada aún, cariño… Te mando un abrazo de oso.

Por su parte, Lauren y Shane consiguen la hoja que les falta y leen lo que Amy piensa de su relación: que son tal para cual aunque piensen lo contrario y que están destinados a ser BFF. Honestamente, ¿hay alguien que no lo piense? Lauren y Shane comparten bitchismo, no sé cómo no han quedado ya miles de veces para poner de vuelta y media a todo el instituto.

Por cierto, Amy y Liam descubren al novio de Karma besando a otra chica y al final Karma se entera porque Amy lo presiona a que lo haga un poquito. El tío se pretende excusar diciendo que es que estaban peleados (seriously?) y que no es la Karma que conocía, así que Karma se pone digna en plan “perdóname la vida por haberme peleado con mi mejor amiga desde la infancia y estar tan dolida por ello”. Dile ahí, Karma. DILE AHÍ. Así que rompen y yo me siento mal por haber confiado en este muchacho. ¡Que te vayas a hacer surf, tío! El caso es que Karma y Amy terminan obligadas a limpiar unas basuras como castigo.

Están así de preparadas y empiezan a discutir casualmente, pero el enfado va a más y a más, así que se tiran fruta podrida y todo lo que encuentran por allí porque así está claro que van a solucionar sus problemas rápidamente. Se echan en cara todas las cositas que se guardan (y son muchas), Karma repite como siempre ese bello “soy hetero”. Que di tú que si lo tienes que repetir tantas veces para que te crean igual es por algo. NO SÉ. Amy le viene a decir un “¿Segura? Porque la entrevista te sentó como el culo para ser tan hetero”. Pero de pronto aparece una rata, se ponen loquis y la cazan metiéndola debajo de un rollo de plástico sobre el que se tienen que sentar para que no se escape. Y nos encontramos, entonces, en esta situación:

Oh, oh, shit is coming. Amy le cuenta que sabe que no besó a Zita y un poco las dos se medio-disculpan y confiesan sus cosis. Muchas emociones, sale mucha mierda… Tenía que pasar tarde o temprano, pero no por eso duele menos.

Amy: ¿Sabes? Me he tenido que preguntar a mí misma, ¿si he evolucionado, entonces porque me dolió tanto ver cómo la besabas? ¿Por qué eso me lleva al momento de la piscina? A lo mejor no he superado mis sentimientos por ti al 100% y a lo mejor hay una parte de mí que nunca lo hará.

Karma: Y a lo mejor te besé en la piscina porque… Porque una pequeña parte de mí quiere que estés enamorada de mí porque me hace sentir bien. Lo sé, es muy egoísta. No quiero seguir haciéndote daño, Amy, pero no sé cómo ser tu amiga sin hacerte daño.

Amy: Yo tampoco lo sé.

Alaaaaaaa, pero nooooo, pero abrazos, pero jooo, peroooo parad de hacerme sentir cosas. Maldita sea. Duele un montón ver que han llegado a este punto, pero al mismo tiempo su relación ya es tóxica y destructiva, tenían que tener sí o sí esta conversación. Y es muy triste.

Se van cada una por su lado, así de bajoneadas. Penélope les dice que si han hecho las paces o algo, porque siempre ha sido karmy trash, karmy shipper, fan karmy de cualquiera de las karmys y de cualquier shippeo karmy ya sea como BROTP o como OTP. ¿PERO NO VES SUS CARITAS, PENÉLOPE? Y ojo, que yo creo que esto es supernecesario y que si van a intentar superar esta mierda tienen que llegar a este punto sí o sí. Es decir, un punto que parece de no retorno, de nuestra amistad está acabada. ¿Lo está realmente? Obviamente se van a amigar, pero cualquier posible desarrollo de su relación en el futuro tenía que pasar por este trago y aunque nos duela y queramos arrastrarnos por el barro, su relación está rota ahora mismo.

No quiero excusar a Karma de su egoísmo. Efectivamente es egoísta, efectivamente se ha dado cuenta y esto ha sido un punto de inflexión en su relación así que tiene que dar un paso a un lado. Amy también se ha dado cuenta de que no puede seguir así volviendo a Karma indefinidamente, que nunca va a superar esos sentimientos si siguen de amigas como si nada pasase, que tiene que cuidarse a sí misma. Así que lo digo: ME HA GUSTADO ESTE CAPÍTULO. Porque, para bien o para mal, era lo que tenía que pasar. ¿Vosotras qué pensáis? ¿Creéis que cambiará mucho la serie a partir de ahora?