Ship Wars: El lado más feo de los fandoms

Sonará a cuestión bélica, pero no tiene nada que v… Bueno, no en el sentido estricto de la palabra, porque de que sí, sí. Verán cuando uno es fan de algún programa de TV, libro, película u obras de entretenimiento similares, uno tiende, casi inevitablemente, a inclinarse a favor de las relaciones entre los personajes que dan vida a la trama.

Hasta ahora todo bien. Como aparentemente somos todos unos románticos empedernidos, las relaciones con las que nos volvemos más apasionados son las que tienen el potencial de ser eso, románticas.

¿De dónde viene el término?

Del inglés, obvs. «Ship» es un diminutivo de relationship. Si tu ship es, por ejemplo, Mulder y Scully, de The X-Files, quiere decir que te gustan como pareja romántica de la historia. Es lo mismo que OTP, One True Pairing, o tu pareja real y definitiva.

El BroTP, es otra cosa. Es una relación entre personajes que son amigos inseparables, BFFs, pero por lo general no tienen denotación romántica.

Dentro de cada historia suelen existir más posibilidades que una para que tus personajes favoritos tengan un potencial romance. Siempre hay uno masivamente aceptado, y otros más pequeños.

También está el hecho de que hay unos que se vuelven canon, o que se transforman en realidad en pantalla, es oficial. Y otros que no. Pero esto no trunca la fuerza del shipping. De hecho si se trata de un ship que toque a las minorías, tiende a cobrar una fuerza devastadora.

Ahí es donde entra mi insistencia con la representación justa y positiva, porque si existiera no habría tanta hambre de OTPs. Voy a intentar simplificarlo con un ejemplo reciente.

Once Upon a Time presentó un beso lésbico entre Ruby y Dorothy. La gente podría pensar que es suficiente para calmar a la comunidad LGBT+: «Ahí tienen su pareja de lesbianas». No. Imagínense por un segundo que la única pareja heterosexual de toda la serie en todas sus temporadas fueran Aurora y Philip. Sólo ellos, ni Charming y Snow White, ni nada. Esa es la proporción de representación. Claro, también está Mulán, a quien no vemos nunca y cuya historia no puede ser más de utilería. Es absurdo.

¿Cuándo comenzó la guerra?

Es difícil señalar el inicio, para ser franca. Seguramente comenzó con la primera trama que presentara más de un personaje. Porque no puedes frenar el deseo de las personas de soñar y verse reflejadas en las historias que se cuentan. Esa es la magia y la importancia del entretenimiento: Inspira, sana, libera.

Yo, arbitrariamente, voy a culpar a Twilight (Crepúsculo), porque es la causa de todos los males del mundo. Una historia mediocre que representa todos los clichés posibles: El triángulo amoroso, la chica tímida que debe elegir entre el chico bueno y leal y el chico de mala reputación súper intenso. Que se queda con el chico malo y que llega a un punto de obsesión en el que no es nada si no está con él. Que deja toda su vida de lado para poder seguir a su lado… Bla, bla, bla. Además, imperdonable lo de los vampiros que brillan en la luz.

Esa fue la primera vez, que yo recuerde, que la propia gente responsable de la cinta incitar una guerra entre ships, con sus #TeamEdward vs. #TeamJacob. También fue la primera vez que vi a los fans volverse tan obsesivos con esto. Y es que la gente insiste en menospreciar a las chicas adolescentes, pero en el fondo saben el poder que tienen.

El problema está cuando creas una guerra entre dos bandos y después te desentiendes. Es absolutamente irresponsable, todo por ganar un poco más de dinero a base del buzz que creaste.

¿Por qué son malas?

Las ship wars son malas porque si bien tienen el beneficio de la publicidad instantánea, que se despierta cuando la gente comienza a hablar incesantemente de eso y hace que la curiosidad empuje a otras a meterse en el centro de la batalla. Pero luego queda el desastre. La división está de moda y nadie se está haciendo responsable por sus consecuencias.

Los políticos están jugando al divide y vencerás, se llenan los bolsillos, y después dejan países enteros enfrentados y en la miseria. No es diferente el resultado en los medios. Cuando provocas un enfrentamiento entre tus fans, después no puedes pedir que se lleven bien y se apoyen mutuamente. La gente que era #TeamJacob ni loca iba a apoyar nada que diera resultados positivos para #TeamEdward.

Cuando estas guerras tienen minorías entre sus bandos, la cosa se pone peor. Porque salen a relucir tabúes, prejuicios, ignorancias y demás características dañinas que nos inculca nuestra sociedad heteronormativa, machista y racista.

Consecuencias

Lo peor es que se extiende y los daños colaterales son terribles. No sólo se arrastra al resto del fandom que quizás no forma parte de ninguno de los dos ships principales que están hasta los codos en enfrentamientos, sino también a los actores. Cyber bullying, acoso, insultos, ataques, campañas negativas. Es todo espantoso y un poco tonto.

Yo no puedo decir que las minorías no caigan en estos lamentables actos. Pero tampoco debería extrañar que comunidades que siempre han sido víctimas de opresiones, así que es un poco más absurdo que los que son parte de mayorías se sientan tan amenazados por que las minorías fantaseen y sueñen con sus ships.

De todas formas está mal, de parte de todos los bandos involucrados, caer en esto. Porque nadie debería sentirse con derecho de pisar los deseos de los demás. ¿No te gusta aquel ship? No pasa nada, pero no vayas atacando, señalando los defectos, haciendo listas de porque no te gusta, y acosando a los que sí los tienen de OTP.

Hay que empezar a sacudirse esa tendencia de creerse con superioridad moral para señalar los errores en los gustos ajenos. La libertad que nos permite la vida online no representa libertad para ser patanes. Recuerden el consejo de Tambor.

El papel de los medios

No, los medios no están para cumplir el papel de padres y maestros, no tienen la obligación de educar o criar gente. Pero sí tienen una responsabilidad social. Es claro que tienen un poderosa influencia y como diría el Tío Ben a Peter Parker: Con gran poder viene una gran responsabilidad.

Los creadores de historias no se deben al fan service, o a ceder ante los deseos de los fans por miedo a las consecuencias. No, deben seguir sus historias, sus ideas, sus visiones, pero deben hacerlo tomando en cuenta el impacto que pueda tener en la audiencia, especialmente en la audiencia vulnerable.

Incitar a una guerra entre dos bandos dentro de tu propio fandom puede parecer una idea genial de marketing. Pero es momentánea y al final sacas más cosecha negativa que frutos. Todo es mejor cuando se fomenta un diálogo cordial, unión y energías positivas. Estas guerras sólo sirven para arruinar fandoms, quizás para darle algún golpecito de dinero a los ejecutivos, pero ya.

Los NOTP

Hay gente que tiene NOTP, que es exactamente lo contrario a OTP. Estos NOTP son parejas que no puedes aceptar bajo ninguna luz. Voy a poner algunos ejemplos personales, para intentar aclarar el punto.

Supergirl: Para mí una relación entre Maxwell Lord y Alex Danvers, o incluso Kara, es una aberración. El tipo es un asco de persona. Pero más allá de eso, es un personaje que activamente representa todo lo que está mal con el mundo, representa la amenaza por la que estas dos hermanas luchan, y su relación con ellas es fundamentalmente su empeño en asesinar a una de ellas.

Jessica Jones: La gente que tiene como OTP a Jessica Jones con su violador Killgrave son los hijos prodigios de la cultura de la violación. Esa cultura que culpa a la víctima por lo que viste o lo que toma o lo que dice. Esa cultura que proteger al agresor. Esto es lo más desagradable del universo. Entiendo que David Tennant es muy carismático y que todos lo amamos como Doctor Who, y quizás por eso le vemos con buenos ojos a pesar del personaje. Pero ew, no.

También hay NOTPs menos drásticos, que representan simplemente una relación que tú no ves. Para seguir la misma línea de ejemplos, con Supergirl, mi NOTP light sería Karolsen, o Kara con James Olsen, no por nada malo, simplemente no le veo la química y me parece un ship que nos metieron forzado desde el inicio. No lo dejaron fluir con más naturalidad.

Esto, por supuesto, no quiere decir que esté bien agredir verbal o emocionalmente (tampoco físicamente) a las personas que viven por estos ships. Puedes hablarles, preguntarles cómo es que pueden verse atraídos por algo así de negativo, pero nunca caer en la línea del acoso.

Basta de ship wars. Hagamos el amor, no la guerra. Vive y deja vivir. Ship and let ship.