Seis Hermanas resumen de 1914-1915 Celia y Aurora

Gracias a la acogida de mi anterior artículo de Seis Hermanas, me han propuesto seguir mi andadura con los resúmenes. Pensaréis, ERES MASOQUISTA, ¿¿¿No habría momentos??? Pues sí, me gusta el riesgo y, además, ¿¿para qué resumir lo bonito y maravilloso del amor?? Mejor escribir sobre lo que nadie quiere ver o leer. En fin, intentaré hacerlo lo más llevadero posible y me esforzaré por sacaros una sonrisa.

Comienza el día en Arganchueca con un sol espléndido. Aurora termina de preparar el desayuno justo cuando la maestra aparece portando el periódico y unos churros, que junto al olor a café… ¿¿a quién no le entra el apetito??

Poco nos dura la felicidad, lo que tarda Celia en ver que han publicado unas fotos de su nidito de amor en la prensa, ¿¿¿estamos locos o qué pasa??? (Recordemos que la semana anterior veíamos como un “amable” caballero se metía en #CasaMaestra y no sabíamos para qué) Si os fijáis en las imágenes, ¿¿no os llama NADA la atención?? Sí amigas #Aureliers, ¡¡falta UNA HABITACIÓN!!

¡¡Indignación máxima!! ¡¡Han violado su intimidad!! ¿¿No van a parar hasta DESTROZARLES LA VIDA??

Celia se cita con Carmen de Burgos en el Club Social. Ésta, en un intento de consolarla, le dice que escriba otro artículo justificando que no duermen juntas, pero nuestra chica se niega, no podría hacer eso, no serviría de nada. Nuestra querida Carmen le da la SOLUCIÓN, les da la posibilidad de marcharse a Argentina con ella, allí podrán empezar de nuevo.

Aurora “se ha escaqueado” de la guardia que tenía en el hospital. Con el artículo del periódico, la pobre enfermera no se podía concentrar en su trabajo, por lo que su GENIAL jefe le ha mandado para casita. Al llegar, Celia le dice que cree que ha encontrado la solución a sus problemas; esperanzada, le comenta que se pueden ir a Argentina, Aurora no se lo toma nada bien, no olvidemos que lleva siendo JEFA DE ENFERMERAS 2 días. Al final acaban discutiendo, y en ese momento de rabia, Celia le echa en cara a su amada que nada de esto habría pasado si se hubiese casado con Velasco, por lo que la enfermera no lo aguanta y le dice “adiós chochín” y se vuelve para el hospital.

Celia se va a Casa Silva porque Diana tiene que contarle algo importante a las hermanas, y mientras esperan a que llegue Elisa, le cuenta su posible viaje al otro lado del charco. Diana le pregunta que si está segura, que adelante y que pase lo que pase que no deje que cambien sus sentimientos hacia Aurora (¿¿¿no es puro amor Diana???. Cuando llega la pequeña Silva, les dice que se va a casar al día siguiente y que se va a vivir a Valladolid y la rubia aprovecha para decirles que está esperando una mini Diana o un mini Salvador. Las 3 hermanas se funden en un abrazo y llega la alegría de la huerta, alias, Blanca para “chafar” el momento. La pequeña desaparece y vemos el por qué de la visita de la señora Baronesa, y es que se ha ido de su casa y busca asilo en la casa familiar. Finalmente hace las paces con Celia y están todas más felices que un niño chico el día de Navidad.

En el hospital, vemos a nuestra súper enfermera que llega de operar con su best friend Cristóbal, éste le dice que le encanta operar con ella a lo que ella contesta que ha sido casualidad, que ha discutido con Celia y no quería quedarse en casa. Aunque no lo quiera reconocer, por sus venas corre ese alma cotilla que todo el mundo tiene y, sin quererlo, mete la pata al decir que el médico se encuentra en un buen momento con su novia Inés, (la #Anarkobuenorra para entendernos) y éste le dice que eso acabó (al pobre el amor no le ha tratado demasiado bien). Salvados por la campana!! Es una llamada telefónica anunciando que la mala malísima de Marina ha intentado suicidarse y que parece que no va a salir adelante. En ese momento pensé: “Yujuuuuuuuuuuu Una menos” pero no cayó la breva.

Al día siguiente, vemos como entran corriendo las chicas en casa mientras se escuchan insultos desde el exterior “invertidas, sucias” y otras muchas cosas… nosotras flipamos porque no sabemos qué está pasando hasta que escuchamos de los labios de Aurora ¡que les están tirando piedras! ¿Holaaa? ¡¡Las niñas están acojonaditas vivas!! Todo esto hace que la enfermera decida que la mejor solución para ellas es que huyan, así que empiezan a hacer las maletas. Aurora tiene que volver al hospital para darle la noticia a Cristóbal y que le busque una sustituta y aprovecha para decirle a su novia que Marina está ingresada porque se ha intentado suicidar a lo que la maestra pone cara de flipe máximo!

Aurora llega al hospital sana y salva, y mantiene esta preciosa conversación con su jefe:

Aurora: Así que Celia y yo hemos decidido salir del país, nos vamos a Argentina.
Cristobal: ¿¿A Argentina??
Aurora: Sí. Así que debo dejar mi puesto como jefa de enfermeras.
Cristobal: ¿¿Ya lo tenéis decidido?
Aurora: Lo siento…
Cristobal: No, no… créeme, el que lo siente soy yo…
Aurora: Yo sé lo que te peleaste por conseguir que me dieran ese puesto… y cómo has ayudado para acallar los rumores a mi costa… por eso se me hace tan cuesta arriba tener que decirte esto porque…porque siento que te estoy fallando…
Cristobal: Qué me vas a fallar Aurora… lo que me hierve la sangre es que esa gentuza se salga con la suya y os tengáis que ir… No te voy a decir nada que no sepas… para mí ha sido un privilegio tenerte aquí.
Aurora: Y para mí ha sido un privilegio tenerte como amigo.

 

Todo esto acaba con un súper abrazo (quién fuera Cristóbal para espachurrar así a Aurora, ¿¿¿o no???) Y ya hemos empezado con las despedidas, qué semana de estar con la lagrimilla asomando.

Celia, por su parte, ha ido a despedirse de su compañero de investigaciones, alias Velasco, al principio parece que no le gusta mucho la idea, pero acaba comprendiéndolo. Antes de que su amiga se marche, le dice que su “hermana” Soledad en verdad no lo es y la Silva ¡flipa! (la pobre lleva un día que pa qué) A todo esto, hay que recordar que la pequeña de las hermanas SE CASA y parece que a nadie le importa… al final va a ser verdad que todo el mundo le quita el protagonismo, jiijiji.

Y… ¡¡atención!! El momento ha llegado chicxs:

Casa Silva. Travelling hacia la derecha. Conversación entre Diana y Celia. Ésta ya tiene los pasajes. Blanca abre el portón, da paso a Elisa vestida de novia. 1914 se paraliza. Música de cine antiguo. Plano subjetivo. Es ahora. Es el momento. Toca recordar a los que ya no están. Algo azul, algo prestado, algo nuevo, algo viejo. FIN

Señores guionistas, productores… ESTO ES LO QUE EN LA CULTURA POPULAR SE ENTIENDE POR UN FINAL CERRADO. ¡Los MALOS con cosas MALAS. Los BUENOS con cosas BUENAS! Así es como debería haber finalizado esta serie que nos ha acompañado durante casi 2 años, mostrando la UNIÓN y FORTALEZA de Seis Hermanas, cerrando de esta forma el círculo con el que empezó. Fieles a sus pensamientos y convicciones. Mujeres libres y adelantadas para 1914.

¡Ah! Se me olvidaba…después de 1654518787984 meses… ¡¡¡Francisca POR FIN HA SIDO MAMÁ!!!

Y hasta aquí puedo leer. ¿Qué opináis de este final? ¿Os lo esperabais así? ¿Cambiaríais algo?

Un año después… Señoras y señores… ¡Habemus salto en el tiempo! ¡Ha pasado UN AÑO! Un largo, maravilloso y amoroso »AÑO!! Un AÑO del que no nos han dejado disfrutar, del que sólo nos dejarán ver pinceladas. Nos merecemos más, ellas se merecen más.

Después de este salto temporal, a mi parecer, totalmente innecesario, vemos que a todas las hermanas Silva la vida les sonríe excepto a nuestras chicas… #Aurelia ha tenido que volver de Argentina porque ¡Aurora está enferma! Pero no un catarrito que se pasa en dos días, no… solamente tiene ¡EL CÓLERA! (#ModoIroníaON)

Nuestra pareja favorita acaba de llegar, Celia acude a la casa familiar, allí la esperan sus hermanas porque van a celebrar la Nochebuena en familia. Le preguntan por Aurora y la maestra les dice que en el viaje no lo ha pasado muy bien y que ha ido directa al hospital, le tienen que hacer muchas pruebas. Para mi gusto, Celia tarda demasiado tiempo en volver junto a su novia; la maestra, como buena niñera, antes de irse a descansar, quiere conocer a sus sobrinos nuevos (se lo perdonamos sólo por la escena tan cuqui que tiene con el pequeño Fernandito, hijo de Francisca) Gracias a @Ma5rina por los gifs tan maravillosos que nos regala y por ser nuestra “hacedora” oficial de gifs, así que ya sabéis… ¡visit her profile!

Me muero de amor ??? ¡Qué bonita es la tita Celia! @Candela_Serrat pic.twitter.com/zzEOiJaiNr

— Marina Alarcón (@Ma5rina) December 13, 2016

Acaban de ponerla al día con sus respectivas vidas y aparece Rosalía como colofón a la estampa familiar, que por cierto, ¡POR FIN se ha casado con Benjamín! ¡plas, plas, plas!

Mientras, en el hospital… Aurora, demacrada, es ayudada por Cristóbal para llegar a la cama, las náuseas la traen loca… Una vez “acomodada” en la cama, enfermera y médico se ponen al día. Hay un momento que me gusta mucho y es cuando Cristóbal le da esperanzas, porque no se lo está diciendo como médico, sino como amigo y ahí demuestra que por mucho que pase el tiempo, ellos serán BUENOS AMIGOS SIEMPRE (¿podemos llorar ya?) Cristóbal se marcha para seguir con las rondas y nuestra chica se queda sola y nos deja ver su verdadera cara de sufrimiento frente a lo que se le viene encima sin ella poder evitarlo (aquí ya soy un mar de lágrimas)

Celia y Blanca se encuentran con el médico por el pasillo, éste no las quiere engañar y le dice que su novia no está muy bien pero que ha hecho bien en traerla de vuelta, ahora queda luchar y ser fuerte para lo que tenga que venir… En la siguiente escena ¡POR FIN vemos Celia y Aurora juntas! Me alegro, porque parecía que no iba a llegar el momento, pero es muy triste por la estampa que tienen (os aconsejo que no dejéis muy lejos los kleenex)

Aurora: Y tú deberías estar en tu casa, te estás perdiendo la cena por mi culpa.
Celia: Cómo que por tu culpa… yo estoy exactamente donde tengo que estar… A TU LADO.
Aurora: ¿¡Menuda Nochebuena, eh!? Cuidando a una enferma.
Celia: No podría imaginar mejor Nochebuena que pasarla contigo… así que no me digas nada que no me vas a convencer… yo me quedo aquí.

Para rematar la escena, Aurora le pide a su amada que si por favor puede avisar a su hermano Camilo, que no quiere irse de este mundo sin hacer las paces con él. La decisión es totalmente comprensible, otra cosa es que sea una buena idea…

Al día siguiente, la maestra está esperando en la calle para acechar a su “cuñado” y decirle que su amada se encuentra enferma en el hospital. El hombre, por llamarlo de alguna manera, intenta pasar de ella, pero ésta, está dispuesta a cumplir su cometido y no hace más que darle zascas al hermanísimo. Éste, sólo sabe blasfemar en su contra pero al final de la conversación, la cara que pone nos hace intuir que lo último que le ha dicho le ha hecho pupita y pone carita de “uiich…a ver si va a ser verdad!”

A continuación, vemos a Cristóbal charlando con Blanca, le está contando el estado de salud de su cuñada y las noticias no son muy esperanzadoras que digamos.

Celia, mientras tanto, va a desahogarse con su siempre compañero Velasco. El pobre lo único que le puede decir es que se mantenga firme y no deje que su novia la vea de capa caída. Mientras se están dando apoyo mutuo, aparece por la puerta del despacho Bruna, la MUJER de Velasco y por fin se conocen. El encuentro es un tanto tirante, parece que las chicas no se han caído demasiado bien… Bruna es un tanto… cómo decirlo, efusiva, y le da un súper abrazote a la maestra que sólo puede poner cara de WTF.

Blanca está leyendo a los pies de la cama de Aurora mientras se está echando una cabezadita… cuando despierta parece que ha visto un fantasma por la cara que pone, y no me extraña, porque seguro que era a la última persona que esperaba encontrar.

Ha despertado porque está sedienta, y una de las cosas que tienen que controlar los médicos y enfermeras es que se mantenga hidratada, pero si nos fijamos en la estancia, comprobamos que Aurora no lleva puesto ningún suero y que además, no le dan agua para beber, simplemente le mojan los labios con un algodón, dice su cuñada que es lo único que pueden hacer… Además, digo yo, que ya que la ayudas, no te cuesta nada levantar el culo de la silla y no utilizar tu brazo, ¿¿¿no??? ¡¡¡Que NO TE CUESTA NADA, BLANCA!!! :@

La verdad es que la conversación que mantienen no tiene desperdicio, me gustaría resaltar unas frases:

Aurora: Gracias por venir a verme, Blanca.
Blanca: Aurora, yo quería pedirte perdón por lo mal que me portado con vosotras.
Aurora: Hay gente que se portó mucho peor (y que lo digas, cariño)
Blanca: Si pero por eso os fuisteis al extranjero… y me he dado cuenta de… de lo EGOÍSTA que he sido. (Blanca… ¿Egoísta tú? ¿¿Cuándo?? Si eres la BONDAD en persona… ¡Hay que joderse contigo, colega!)

Siguen de charleta hasta que la cuñi le dice que quiere que sepa que tiene el MEJOR REGALO que puede tener, en ese momento Aurora pone cara de “VENGA TÍA, SUÉLTALO YA DE UNA VEZ!” y le hace un imperceptible juego de cejas, muy gracioso, pese a las circunstancias y la Baronesa aprovecha para irse por los cerros de Úbeda hasta que dice lo que la enfermera quiere oír “ESE AMOR QUE TÚ TIENES CON MI HERMANA, QUE ES EL MEJOR TESORO QUE ALGUIEN PUEDE TENER” y creo que ahí Aurora, si no estuviera tan malita, se habría puesto de pie a aplaudir a su cuñada y decirle “POR FIN LO HAS DICHOOOOO….FIESHHTAAAAAA” (jaaajajajajaja… ¡¡me la imagino encima de la cama dando saltos con los brazos en alto!! Perdón, se me ha ido la cabeza a otra cosa) pero lo que provoca es que nuestra sufragista sea un mar de lágrimas…

Más tarde, nos muestran a la pareja durmiendo, o por lo menos la maestra, que usa de almohada el pecho de su amada. Se despierta y Aurora le pregunta si ha conseguido ponerse en contacto con el hermanísimo, a lo que ésta le da negativa (no quiere decirle que su hermano es un gili en mayúsculas y que le ha importado una castaña que se esté muriendo). A la enfermera se la ve abatida, puesto que es la única familia que le queda y le añora. Empiezan una conversación que nos deja a todxs con el corazón desgarrado, puesto que se está despidiendo (y no estamos preparadxs para ello todavía). Celia le dice que va a mejorar, que estando en ese hospital seguro que consigue salir adelante, cuando de repente se abre la puerta de la habitación y aparece ¡¡¡EL HERMANÍSIMO!!! :O y las dos se quedan petrificadas en el sitio. Celia decide darles intimidad y sale sin darle un “gracias” o algo por haberse dignado a ir a ver a su hermana.

Al hombre se le ve arrepentido por todo lo sucedido, pero qué queréis que os diga, ¡es solo apariencia! (¡maldito! ¡No se juegan con los sentimientos!) Aurora rompe a llorar desconsolada junto a su hermano y queda todo precioso; piensas que siendo sus últimos días le tocará el corazoncito, y al menos intentará aceptar lo que su hermana siente.

Nada más lejos de la realidad, él sigue en sus trece e intenta imponerle sus verdades. Le lleva hasta la Biblia y un rosario para que pida perdón al altísimo (¡¡lo que faltaba pal duro!!) De primeras Aurora rechaza el regalo (¡¡yuhuu!! sigue siendo fiel a sus principios) Para él, Celia Silva es el mayor pecado de Aurora, es un demonio, es lujuria. Aurora se defiende, para ella es su felicidad, lo es todo ¿Cómo va a renegar de ella? Camilo ve que su hermana no cede y decide marcharse, pero ella le para, no puede dejar que se rompa por completo ese fino hilo de hermanos que les mantiene unidos; no puede irse con esa espinita clavada.

Cuando Celia entra en la habitación, con una hermosa sonrisa y un grandioso ramo de flores se encuentra con la estancia vacía y teme que haya ocurrido la desgracia y no se haya podido despedir; es Cristóbal quien la encuentra y le dice que Aurora ha sido trasladada a otra dependencia del hospital, después de muchos rodeos acaba confesándole todo lo que ha pasado. La decisión de prohibir a Celia visitarla es de la propia Aurora (¿¿peeeeerrrdonaaaaaa?? ¿¿WTF?? ¿¿Pero a quién se le ha ocurrido semejante barbaridad?? mal, mal… ¡¡muy mal!!) Imaginaos la cara de Celia… ¡un poema!

Se va con toda la llorera a casa de sus hermanas, llora y llora desconsoladamente, Rosalía la oye y va a consolarla, palabras bonitas que ya tocaban por parte de la ama de llaves:

Celia: No me dejan ver a Aurora está en el hospital y no me dejan verla.
Rosalía: ¡Oh!… vaya…
Celia: El amor de mi vida se me va y yo… no puedo estar a su lado.
Rosalía: ¿¿Pero por qué??
Celia: Porque no soy familia suya, no hay ni un solo papel que diga qué represento en su vida, es tan injusto.
Rosalía: -suspiro- Señorita… yo no voy a engañarla, sigo sin entender esos sentimientos suyos hacia otra mujer.
Celia: Yo lo sé.
Rosalía: No puedo entender el amor que sienten la una por la otra pero… está claro que ese amor existe, que es real y que no importa si yo lo entiendo o no.
Celia: Gracias.
Rosalía: Y tiene usted razón cuando dice que es injusto lo que le están haciendo, pertenecer a una familia no puede depender de lo que diga un papel.
Celia: ¿Verdad que no?
Rosalía: Ustedes, las hermanas, han sido siempre mi familia, desde que nacieron, aunque no sean sangre de mi sangre, cada vez que una de ustedes sufría, yo sufría como si el dolor me lo causaran a mí y eso es ser una familia, creo yo.
Celia: Yo también lo creo.

Se funden en un abrazo que ambas necesitan.

Y hasta aquí el resumen semanal; Aureliers, mucho ánimo, mucha fuerza, y muchos kleenex.