Que te despidan injustamente es un mal trago que desafortunadamente muchas hemos tenido que pasar y una experiencia con la que muchas personas pueden identificarse. ¿Te imaginas poder vengarte de quién lo hizo convirtiéndote en su jefa? Pues eso es exáctamente lo que está haciendo Charmaine McGuffey, una Sheriff lesbiana que decidió que lo de no hacer nada no iba con ella.
La historia de este épico regreso comienza a principios de los años 80 cuando Charmaine McGuffey entró en el departamento del Sheriff en el condado de Hamilton en Ohio. Con mucho esfuerzo y dedicación, en 2013 consiguió el puesto de Jefa del mando de la cárcel y los servicios de la corte. Que además de sonar muy rimbombante la convirtió en la mujer con el puesto más alto en toda la historia del departamento.
Su trabajo y dedicación eran tan grandes que en 2015 la nombraron como la Oficial del Año a nivel local y regional. Y por si fuera poco en 2016 se llevó el premio a ciudadana del año de la Cámara de Representantes de Ohio. Vamos que McGuffey tenía una carrera meteórica y llena de éxitos entre los que se incluye que, bajo su mando, el Centro de Justicia del Estado pasó de ser el peor en Ohio al mejor.
En teoría, tener una empleada así es todo lo que uno puede desear ¿no? Pues su jefe Jim Neil, que era el Sheriff en ese momento, decidió despedirla en 2017. Estas son las razones del despido según comentó ella a LGBTQ Nation
El Sheriff en funciones y yo tuvimos un desacuerdo muy importante por su insistencia en no hacer responsables a los oficiales por abusos de fuerza o el acoso a las mujeres, policías y presidiarias. Me despidió. Así que después de un año de meditar sobre el asunto, decidí que yo podría hacer su trabajo mejor que él.
¿Y saben qué? Que la mujer lanzó su campaña a las primarias democráticas en contra de su ex-jefe y lo venció. Además su victoria fue de esas que duelen, porque el setenta por ciento de las personas la eligió a ella por encima de su oponente.
Ahora va a por su siguiente paso, que es vencer al candidato republicano, Bruce Hoffbauer, para convertirse en la nueva Sheriff del condado de Hamilton y conseguir otra primera vez en su carrera. Esta vez por ser la primera oficial que forma parte de la comunidad LGBTQ en convertirse en Sheriff de Hamilton.
Crucemos los dedos porque esta historia termine de manera aún más épica y acabemos viéndola en lo más alto de la escalera. No solo porque es de justicia y sería una historia increíble. Después de todo, no todos los días llega una policía lesbiana a lo más alto. También porque es una persona obviamente muy competente que mejoraría la calidad de la vida de los ciudadanos del lugar.