Willow está de vuelta una vez más y este capítulo, cargado incluso con más magia si es que eso es posible y mucho, muchos recuerdos de la película. Porque si ya de por sí pensábamos que refugiarse en el castillo de Bavmorda años después de la batalla era una mala idea, este capítulo nos da la razón.
Aunque eh, no hay nada mal que por bien no venga, todo hay que decirlo; y es que este capítulo también nos ha dejado con algunas de las escenas mejores de Kit y Jade. Estas dos están avanzando poco a poco en su historia y a mí me va encantando. Encima, añades que es oficialmente una historia oficial de princesa Disney y ya lo rematas. Pero vamos, que no sean mis palabras las que os convenzan si no lo que pasa. Que no es poco.
Y es que este capítulo empieza justo en el momento en el que lo dejamos en el pasado: chorreando bajo la lluvia, que de verdad, vaya forma de empaparse; y con Willow y los demás acudiendo rápidamente a meter a un Graydon poseído en el castillo de Bavmorda por pura necesidad. Hay que encontrar la manera de curarlo y, aunque Willow no cree que sea la mejor idea, otra opción no es que les quede, para ser honestos.
Así que, allí están, en el mítico castillo de la bruja Bavmorda, atando a Graydon con cadena y recordando lo mala y perversa que solía ser la bruja frente a su nieta. Porque sí, aunque hayan pasado unos veinte años desde que se libró la batalla, no podemos dejar de recordar que Kit Tanthalos, nuestra princesa Disney, es su descendiente también.
El caso es que la cosa pinta mal, Graydon está cada vez peor y sabe, por lo visto a los caballeros y a Ballantine que o le matan o no podrán hacer nada. Después de todo, ya le pasó una vez y no quiere que vuelva a pasar. A lo que me pregunto, ¿qué es lo que pasó, Graydon? Porque aquí, el príncipe al que todos ignora, parece tener algún que otro secreto oculto. ¿el qué? Ya lo irémos viendo. Lo que importa es que, por él, la cosa podría ir muy mal y no hay tiempo que perder.
En ese instante, lo que más apremia es mantener a Elora a salvo y evitar lo que quería hacer Ballantine: el ritual de la decimotercera noche, el de hacía allá por aquel entonces Bavmorda en la película y como explica Graydon. Literalmente, nos da un buen repaso para aquellos que estéis viendo la serie sin haber visto la película. Muy bien en consideración.
Y es por eso mismo, que hay que pararlo. Kit, que lo único que tiene en su mente es a su hermano, el único que dijo que no la abandonaría y ahora, mirad; sugiere que haga lo mismo que hizo con Ballantine, pero con Graydon, pero eso de “reventarlo de dentro a fuera”; hasta a mí me daría lástima del principito. También sugiere matarlo, pero no es tan fácil. Como dice Boorman “matar a alguien que no está intentando matarte, no es fácil” y tiene razón.
Así que, lo único que queda es esperar lo inevitable mientras que comen y descansan y Graydon se pone peor. Hay que hacer algo y, cuando Willow está recordando el pasado de Bavmorda y como consiguió ser la bruja que consiguió ser, da con la idea de que posiblemente pueda haber una solución: un exorcismo, “La Purga de Namchub”, de uno de los libros de Bavmorda, el “Malatrium”. Un ritual de alquimia, que ayudará a Graydon y a Elora para poder manejar la magia mejor. Dos pájaros de un tiro.
Por lo que, dividiéndose, cada uno se pone manos a la obra. Aunque en este castillo, cada uno termina teniendo su agenda persona.
Por un lado, nos encontramos primero a Jade. La pobre chica aún viene afectada por los fantasmas de la batalla y por haber tenido que matar a su propio mentor. Ahora encima tenemos que añadir que tenemos que matar a otro miembro del grupo y normal que esté así. Está muy afectada. Kit lo sabe y siguiéndola, intenta hablar con ella. Estar ahí por ella, para lo que sea. De verdad que este aspecto es increíble por parte de ambas. Sin embargo, Jade está en su momento de murallas arriba y no es para menos. Como nos cuenta, fue Ballantine quien la saco de ser una muchacha limpia cuadras, a ser un caballero… y a entrenar a Kit, ya que estamos. En fin, que lo que hace es irse como alma en pena a vigilar que no venga nadie, mientras que manda a Kit a ayudar a Elora con lo que tenga que hacer con Graydon. Por favor, que alguien abrace a Jade.
El caso es que Kit asiente y se marcha con Elora y Willow que están preparando a Graydon para el ritual. Y en el cual también necesitan belladona, aunque para ello tienen que tomar una comadreja en salmuera y… bueno, mejor me ahorro la explicación. Solo añadir que el “piquerío”, la manera en la que se insultan sin insultarse; que tienen Elora y Kit durante esta escena también es honorable de mención. La cosa es que le toca a Kit buscar la comadreja. Se va a tirar todo el capítulo de un sitio a otro la princesa.
Quedándose Willow con Elora, estos empiezan a preparar a Graydon y en el cual, descubren algo también: marcas de un ritual. Porque sí, Graydon aparece de repente con unos extraños símbolos en su cuerpo que hace pensar que este chico a pasado por algo más. ¿La verdad? Con esas marcas y las visiones que empieza este a tener con su hermano, nos hace realmente pensar que el principito, aquel que no habla con nadie y se mantiene a un lado casi siempre, tiene muchas cosas escondidas. ¿A caso tiene que ver con su hermano? ¿Con la alucinación que tiene sobre este con su cuello partido? Sea lo que sea, esas alucinaciones están atormentando a Graydon. Su hermano, su padre obligándole a casarse para que le de un heredero al trono… Normal que el pobre príncipe estuviera tan mal en la fiesta de compromiso con Kit.
Esta, buscando la comadreja en salmuera y maldiciendo a su manera a Elora, Kit está buscando cuando Boorman aparece en escena. Al parecer, este está “no saqueando el castillo de Bavmorda” y para lo cual, necesita algo para abrir una extraña puerta que encuentra en la mitad de la nada.
¿Este hombre no a aprendido que con la magia y menos en el castillo de la mala de la película, nada es lo que parece? El caso es que los dos se ponen a hablar cuando Boorman la verdad es que hace un buen punto al referirse las ganas de matar Kit a Graydon solo para buscar a su hermano. Es una manera sutil de sacar a Kit de su cabezonería, pero que realmente deja a Kit pensando.
Bien hecho, Boorman. Este siempre cuidando de Kit y de Jade.
Porque sí, Boorman y Jade tienen una escena de lo más dulce y que nos ayuda a ver también más facetas del antiguo escudero de Madmartigan. Bajo la lluvia, Jade está viviendo su propia agonía a solas cuando el castillo parece meterse con Boorman, llevándolo hasta Jade…
Metiéndose con Boorman o Bavmorda realmente se preocupa por Kit y su novia y quiere que alguien cuide de ellas, mandando a Boorman. A este punto, ¿quién sabe?
Boorman aparece y tiene con Jade las palabras que necesitaba escuchar en ese momento. Como hacer que tome una meta, mire a ella y deje todo atrás. El abrazo que Jade le da después creo que fácilmente podríamos ser todas nosotras en ese momento. Boorman es nuestro hombre y del único que aceptaría este apoyo incondicional que da a nuestras chicas en la serie. “Todos tocamos a una llorera por aventura”: Amo esa línea.
Encontrando por fin la comadreja, Kit comienza su camino de vuelta, cuando da de bruces con una pintura que nos llama la atención. Primero porque, como ya Willow había contado la manera en la que Bavmorda fue engatusada por la magia negra; aquí nos muestra algo más de ella. La manera en la que aceptó la magia, la forma en la que se convirtió su abuela en lo que fue… aunque lo que más nos llama la atención es cuando Kit se ve reflejada en el atuendo de su abuela. ¿Quiere decir esto que Kit se volverá mala? Sea lo que sea, el susto se viene cuando la pintura comienza a arder y Kit tiene que llevar la comadreja en salmuera de un tarro a llevarla en mano.
(Permitidme que diga que qué asco).
Aunque parece que a Elora no le da mucho, viendo la manera en la que la maneja mientras que prepara la pócima para ayudar a Graydon, que está peor…no, lo siguiente. Las fuerzas del mal comienzan a tomarlo y, cuando nos damos cuenta, comienza a hablar como si fuera Airk y… en pocas palabras, no siendo Graydon. Kit no puede escuchar a su hermano y termina saliendo rápidamente de allí, mientras que Willow, sabiendo que esto es obra de las fuerzas oscuras, saca también a Elora.
Ambas terminan fuera, escuchando a Graydon gritar de dolor y teniendo una charla de corazón a corazón. Elora por fin baja su guardia e incluso le cuenta a Elora las dos leñadoras, granjeras o como se quieran llamar; del bosque que dieron la vida por ella. Kit lo nota y está a punto de decirle que consiguió hacer crecer el árbol cuando Elora comienza a escuchar una voz familiar. Esta se deja llevar y cuando Kit quiere seguirla para que no vuelva a perderse…
Elora va y se pierde en búsqueda de la voz, la de su madre. Porque Willow nos lleva por el camino de los recuerdos otra vez y tomando el momento inicial de la película, aquel en el que veíamos el nacimiento de Elora Danan y su madre entregándola para que la salve, Elora ahora es la encargada de verlo con sus propios ojos. Vaya manera de rompernos el corazón tiene esta serie. En un momento estás riéndote, que al siguiente está llorando con su protagonistas.
Ese castillo está jodiendo con todos los presentes y de mala forma.
Porque con Jade, tenemos más de lo mismo. La aspirante a caballero está regresando, cuando comienza a escuchar gritos y restos de batalla. Aunque no los de los demás, el de su familia. Delante de ella, comienza ver el resultado de la batalla, aquella donde sus padres murieron por conseguir una vida mejor dentro de la barrera. Incluso conocemos a su madre, que yace sin vida en el suelo.
Aunque eso no es todo y volvemos a encontrarnos con una cara familia: el General Kael. Aquel que ayudó a Bavmorda contra los rebeldes y que el mismo Madmartigan consiguió acabar con él en la película y que ahora, pelea contra Jade. Esta se lanza contra él, pero este es poderoso y Jade pronto se encuentra en la sala de las pócimas, aguantando la puerta para que este no pueda entrar. Aunque claro, tiene que asegurarse de que no haya peligro tampoco dentro. Así que, buscando lentamente por la habitación, peligros no habrá, pero una Kit con una espada si que está.
Porque sí, encontrarse a base de sablazos creo que es algo normal en la relación de estas dos chicas. Aunque, ¿cómo entró Kit por la puerta si Jade la tiene atrincherada para que Kael no entre? Kit no lo sabe y lo que tiene por seguro, es que el castillo las está mareando. La sonrisa de Jade, la manera de bromear después con Kit… Si, dos idiotas enamoradas son los que son estás dos. Y no lo digo yo, lo ve incluso Boorman.
Porque entre risas y bromas, la puerta comienza a sonar fuertemente y aunque delante de esta está puesta media habitación por Jade, ambas se colocan frente a la puerta, manteniendo para que no entre quien sea que está tocando, Jade amenazando con armas que no tienen cuando escuchan que es Boorman quien vuelve ahora. ¿La razón? La Lux Arcana, aquella que decía no haber encontrado, supuestamente le ha sido robada y las únicas que las podrían haber tomado son Jade y Kit, desde que son las dos con las que habló.
Sin embargo, el castillo está liándolas, a todos. ¿Cómo saben Jade y Kit entonces que es Boorman?
“Dinos algo que solo el verdadero Boorman sabría” le pide Kit.
Y, con toda su gloria, Boorman termina respondiendo “Estáis coladitas la una por la otra”. De esta manera y sin más, Boorman se ha convertido en el capitán del barco #Tanthamore si me dejáis decirlo. Porque la manera en la que las dos se miran, el “No, que va” por parte de Jade cuando se retiran para dejarlo pasar. Comedia en estado puro.
Dejando entrar a Boorman, este pronto se vuelve literalmente loco y tomando a Kit por la camisa, le amenaza para que le de la Lux Arcana. Aunque ya sabemos que como le pongas una mano encima a la princesa, Jade te corta lo innombrable y con su espada en el cuello del Boorman, solo tiene que decir “aparta tus mugrientas manos de mi princesa” para que este la deja en paz. El gesto que acompaña de Kit…
La relación de estas dos es romance puro y duro y estoy aquí para vivirlo. Aunque lo que más podemos vivir es el momento celos que le sigue cuando Boorman le recuerda que ambas se le acercaron y Jade y Kit se miran como diciendo “¿Cuándo te acercaste tu a Boorman?”. Este capítulo es lo que todo fan de parejas sáficas quiere y nos lo muestran.
De una manera u otra, todo este caos, pronto es interrumpido cuando en la torre del castillo, allí donde Willow y Bavmorda tuvieron su última batalla, parecen verse dos luces subiendo a ella asique Boorman, Kit y Jade, pronto dejan a un lado la pelea y se centran en ello. Después de todo, es al único lugar al que Willow les pidió no subir.
Y menos aún le pidió subir a Elora. Porque sí, los que están allí son Elora y Graydon, quien parece encontrarse ya bien cuando sube en su búsqueda. Solo que ahora, quien no está, es Willow… porque lo que fuera que estaba en él, ahora está en Willow. Hay que rescatarlo y, ¿dónde iría un Willow poseído? Al único lugar que podría: la torre. Así que, marchándose ambos hacia esta, lo que descubrimos pronto es que es una trampa.
Graydon sigue poseído y es quien ha hecho que Willow desapareciera para llevar a Elora hacia la torre. Graydon comienza a hacer el ritual final de nuevo mientras que Elora intenta razonar con él cuando Willow por fin aparece. Estos intentan luchar con Graydon, pero este solo saca a relucir la verdad: que Willow no fue quien venció a Bavmorda, si no que esta misma fue la que se atrapó cuando el ritual calló sobre ella. ¿Cómo vencerá entonces Willow? Como la otra vez: con sus amigos.
Y con una visión del pasado con Sorsha y Fin Raziel, son ahora Boorman, Kit y Jade los que hacen su entrada.
Tomando a Graydon finalmente, Boorman y Jade están dispuesto a matarlo, como se había dicho en un principio, cuando Kit los para. Pueden salvar a Graydon, pero no ellos, si no Elora. Así que, hablando con ella, Kit literalmente le da las fuerzas que necesita esta para poder lanzarse a parar la posesión. Le deja saber que hizo crecer el árbol y que ella es la única sabe realmente como parar a Graydon…
Y lo hace, Elora consigue tomar a Graydon poseído y sacar el mal de él. Aunque no solo eso, también tiene una visión: la de la muerte del hermano de este. Aquel que cayó de un árbol, empujado por un joven Graydon. Porque sí, al parecer, fue Graydon quien mató a su propio hermano estando este poseído por algo…. Una sorpresa en toda regla.
Por fin a salvo y con todo despejado, nuestros héroes parecen por fin haber conseguido salir a salvos del castillo de Bavmorda. Graydon normal, siguiendo a rescatar a Airk, con Boorman teniendo siempre su Lux Arcana y Kit conociendo sobre “La sangre de las Seis”. La misma sangre que corre por las venas de Kit y Airk y por lo que quieren utilizarlo. Hay que llegar a la ciudad antes de que le pase algo a este o a ellos porque el mal que les persigue, está allí y con los villanos del capítulo 1 pisándole los talones, creo que una batalla próxima está por caer antes de salvar a Airk.
Porque aunque no hemos sabido nada de Airk por algún tiempo, este capítulo nos da finalmente algo de visión de donde esta. Porque mientras que todos siguen su viaje, vemos a un Airk despertándose en un lugar antiguo, lleno de polvo y que poco a poco, descubre como la Ciudad Inmemorial. Un sitio alejado de todo y sin nadie a la vista…
Desde luego, solo no podrá salir de allí el príncipe.
Y con esto, el capítulo 4 de Willow llega a su fin. Desde luego, Willow va cogiendo cada vez más y más fuerza y con los capítulos se va notando. Yo desde luego, ya me voy poniendo el siguiente porque estando a mitad de temporada, lo único que queda ya es ir a mejor. Y mejor que va, viendo lo que se avecina en el capítulo 5.