Nos tenían tan bien acostumbradas esta serie, que ahora llega este capítulo de Blank y nos ponemos como unas niñas caprichosas de que nos jodan a un capítulo del final de Blank the series.
Porque sí, a penas a dos capítulos de terminar esta serie, desgraciadamente, nos tenían que poner un poco más de drama. Sobre todo, cuando nos quedamos el capítulo pasado con el padre de Anueng “pillándolas” en pleno beso.
Anueng y Nueng enseguida se ponen a hacer el papel, sin embargo, como que se queda un poco la cosa en el aire. ¿Las habrá visto o no? Tendremos que esperar a ver lo que pasa. Mientras tanto Nueng y Anueng… digamos que están un poco, por así decirlo, en la cuerda floja y poco más.
Cosa que discuten mientras que escuchan el podcast de gente contando sus historias de amor. (Me encanta ese momento, la verdad. Las dos en la cama, escuchando las historias como si fueran un podcast y discutiendo la situación en la que se encuentran).
Si es que, si hay una cosa que me ha encantado de esta serie; es que han sabido ir siempre hablando las protagonistas de la serie, la verdad.
Aunque, eso sí, no sería una serie GL, ni una pareja lésbica en su definición; si no hay un momento en el que las pillen. Realmente las pillen, en esta ocasión.
Porque porque cuando Nueng va a dejar a Anueng en la universidad, esta le pide un beso. Claro está, siendo Anueng como es, que no le puede decir que no a la muchacha, allá que va a darle el beso mientras que no se dan cuenta de que hay alguien, con cámara en mano, que está sacándole fotos….
Se está liando, señores.
Porque sí, no se tarda mucho en empezar con las preguntas. ¿La primera? La madre de Anueng.
Y es que, estando en la galería de arte de Nueng, Anueng y ella están hablando del arte, de como están de su momento y todo, cuando proponen hacer algo juntas y allá que aparece la mamá de Anueng. (Prepararos todas, que esto empieza). Porque esta no va directamente a por Nueng, primero, tiene que hacerse la madre.
Ella habla con su hija y, cuando dice que necesita hablar con Nueng sobre algo… allá que vamos con las preocupaciones.
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blockquote>Mamá de Anueng: ¿Tú y mi hija estáis saliendo?
Nueng: Sí…
Pues… se ha quedado buena tarde. Por lo que se ve, ya no es Anueng la que quería gritar a todo dios que estaba con Nueng. Ahora es Nueng la que está admitiendo libremente que están saliendo… Aunque, mujer, podrías haber empezado con otra persona que no hubiera sido la madre de tu propia novia.
¿Lo malo? ¿Lo bueno? Realmente no se como poner esto solo que… esta se pone un poco en tipo de… negación.
¿Cómo va a poder existir amor entre dos mujeres? ¿Por qué te fijarías en mi hija?
Eso mismo se preguntaba Nueng en su momento, pero una cosa está clara: que hay amor y del bonito y bueno entre las dos, la verdad.
Solo hay que ver la escena de la cama. Perdonadme, pero es que son muy bellas.
Tienen que estar separadas un poco para que la cosa se tranquilice un poco, pero las dos se ponen a hablar por teléfono, diciéndose lo mucho que se están extrañando en aquel momento. Nueng tentándola con sus palabras, Anueng que quiere ser la que lleve el control, pero la que se pone a temblar el momento en el que escucha a Nueng hablándole tan dulce.
¿Qué queréis que os diga? A mi estas dos me enamoran.
Vivo por sus momentos dulces, hasta que llega Chet y venga a joder todo. Porque sí, finalmente se demuestra lo que más temíamos: Chet las vio en su día y, para asegurarse de lo que había visto, contrató a un investigador privado para que les sacara las fotos. Ahora, su relación finalmente se ha hecho pública.
Nueng se defiende, incluso defiende que dejen de ver a Anueng como ellos quieren y que empiecen a escuchar a su hija por una vez. Claro está, siendo Chet tan homofóbico como nos ha demostrado como es, como que lo único que quiere es que deje a su hija en paz. El típico “lo que has hecho es aprovecharte de mi hija”.
Ay, señor. Estábamos demasiado tranquilas por aquí.
Sobre todo, cuando se une la madre de Anueng y le dice a Nueng que se quiere llevar a su hija con ella a Estados Unidos por un par de años y, para ello, tiene que ser Nueng la que deje ir a su hija… (que alguien me agarre porque me cargo a todos estos). Por suerte, tenemos a Nueng para defenderla de aquellos que no preguntan a Anueng por su opinión para nada. Después se preguntan por qué su hija no les quiere.
Desgraciadamente, Nueng solo quiere lo mejor para Anueng y, trastocada por lo que ha pasado, acepta a hacer que Anueng se marche a Estados Unidos con su madre.
Por lo que vivimos la peor… ruptura, por así decirlo. Apuñalarte un ojo dolería menos que ver a Nueng mentir a Anueng cuando todos se reúnen y salta la bomba de que todos saben lo suyo.
Nueng intenta volver a ser la antigua Nueng, aquella que no le importaba nada; pero solo hay que ver como reacciona cuando Anueng le dice que no se quiere ir, que lo que quiere es quedarse con ella.
Nueng: Si quieres que acepten lo nuestro, tienes que irte.
¿Qué hacemos con estas dos, gente?
A las dos les hiere estar lejos de la otra, pero si una es cabezota, más es la otra. Una se enfada, la otra también. Una está herida, la otra aún más. Vamos, que entre cosa y cosa, aquí nos entra a todo dios la deprimiera con lo que está pasando con las dos….
Sin embargo, a un día de Anueng finalmente irse con su madre; esta decide llamar a Nueng para intentar arreglar todo una vez más ya que no puede. Anueng no puede. Normal, si nadie deja que se exprese y que sea ella. Todo el mundo tomando decisiones por ella, cuando lo único que quería era ser un poco más libre.
Encima, Nueng solo la escucha cuando Anueng le manda un mensaje diciendo que iba a terminar con todo…
Pobre Anueng. Ella solo quería hacer las cosas bien, quería que Nueng luchara por una vez por ella y Nueng, queriendo “hacer lo correcto”, como que lo único que hace es empeorar las cosas.
La historia de toda pareja GL: una que quiere y la otra que no se esfuerza por temor a lo que vaya a pasar.
Solo para que vuelvan a interrumpirlas cuando la abuela de Anueng pilla a esta hablando por teléfono con Nueng. Si es que no pueden hablar si quiera cinco minutos tranquilas, por Dios.
Así que, pilladas una vez más; la última solución de Nueng es la de contar su historia en uno de los programas favoritos de Anueng: aquel en el que contaban la historias de amor que las dos solían escuchar juntas en la cama y discutir. Nueng no es que quiera mucho, pero por primera vez, escuchamos a esta abriendo su corazón, contando la historia, por así decirlo, desde su punto de vista y demostrando lo que siente.
Cosa que también escucha Anueng de principio a fin.
Por primera vez, parece que vamos a tener un poco de suerte en todo esto. Anueng vuelve a llamar a Nueng para poder dejar las cosas y claras y decir que ni de coña se marcha sabiendo que esta sabe que Nueng la quiere.
Ahora, de verdad.
¿Tenemos por fin un poco de final feliz? No… nos queda otro capítulo, desgraciadamente.
Y es que, aunque las dos están dispuestas, ahora sí, a luchar por lo que quieren, por lo que sienten; juntas… el destino es caprichoso. Anueng sale de su casa, dispuesta a reunirse con la mujer que ama cuando, por no mirar, un coche aparece de la nada y se la lleva por delante.
Hay, señor. Encima, dejándonos así al final del capítulo. Con una Nueng esperando a Anueng, que acababa de ser atropellada…
Menos mal que esto es Tailandia y, por el momento, el trofeo de bury your gays no existe. ¿Qué pasará ahora con Nueng, Anueng y con todo? Pues lo sabremos en el capítulo final de Blank The Series.
Nos vemos en el siguiente resumen, mis sáficas.