Autor: Sara Levesque

Adivina quién soy Y allí estaba yo, tembloroso y rojo de rabia por un miedo incoherente a no...

Alcancé a odiarla No fue fácil alejarla. Odiarla sí. Pero alejarla hasta el olvido…, eso ya es...

Me es imposible olvidarte Si me llamas “pequeña”, me es imposible olvidarte. Si te acercas hasta...

Qué fácil resulta todo contigo Es fácil querer entregarte mi más íntima confianza cuando se te...

Océano sin mareas Existe un océano sin mareas. Al sumergirme en él, la Luna me mece entre sus...

No soy poeta No soy poeta. Solo una desgraciá’ a la que las mujeres le dan la espalda cuando...

Pecio Todo el océano que le cabía en la mirada lo lloré cuando mis sentimientos naufragaron en su...

Nomeolvides Yo quería tener un detalle contigo, y lo mejor que se me ocurrió fue regalarte la...

Ventana sin puerta   Hay días en que me levanto a las seis de la mañana sin ayuda del...

¿Cómo miras el agua? Hay quien ve su interés para saciarse la sed. Hay quien trafica con su...