Queridas lesbicanarias, como lo prometido es deuda, aquí va la primera películas de las que iremos reseñando en Oldies Films. Esta semana hablaremos de High Art. Esperamos que las disfruten y que nos inspiren diciéndonos cuáles son las películas lesbicanarias antiguas que quieren ver reseñadas aquí. Un saludo.

Nuestra opinión Lesbicanaria

High Art cuenta la historia de Syd, una ayudante de dirección en una revista, y de Lucy Berliner, una veterana fotógrafa cuyo prestigio ha caído en el olvido a causa de las drogas. Lucy tiene una tormentosa relación con Greta, una ex actriz alemana enganchada a la heroína y Syd por su parte vive con su novio con el que sale desde la universidad.

Syd y Lucy son vecinas y se conocen por casualidad pero entre ellas en seguida surge un punto de conexión fuerte a través de su pasión mutua por la fotografía. Juntas encontrarán un proyecto conjunto que estrechará su relación más allá de lo profesional.

Dyke

Si hablamos de High Art, hablamos de 1998 ¡Ya han llovido años! Han llovido 13, para ser más exactas, desde entonces y mucha, mucha visibilidad a este lado del océano. ¡Qué recuerdos! Vi esta película en los cines Renoir de Madrid cuando se estrenó. Me acuerdo bien porque era la primera película lesbicanaria que iba a ver al cine. Eramos unas 20 personas en la sala y entre ellas había dos matrimonios de unos 60 años que no pararon de escandalizarse hasta que a mitad de película se fueron horrorizados.

A mí también me impactó muchísimo la película, pero en un sentido bien distinto del que afectó a estos señores. Yo, una babylesbicanaria, vi un mundo de modernas, guapas, jóvenes y, por qué no, yonkies lesbicanarias. Y me encantó. Me encantó la historia, cómo estaba contada, la fotografía, las actrices (me enamoré platónicamente de las 2 protagonistas) y todo lo demás menos el final que me dejó sin habla. Es una película estupenda que recomiendo a todo el mundo, creo además que sigue siendo actual y que el paso del tiempo no le ha perjudicado, sigue siendo interesante verla. Aún así, con todas sus virtudes, la película tiene un gran inconveniente a mis ojos: su final que es megadramático. Sí, para mí es duro ver que una historia que me ha emocionado termina mal. Jane Austen, tenía como lema que en sus libros sus heroínas siempre tendrían el final feliz que la vida muchas veces niega a las personas. Estoy con Jane Austen y detesto que las cosas terminen mal. Quizá sea una ñoña pero lo detesto. Además en High Art no te lo esperas, llega de repente, sin aclaraciones, sin remedio y te deja pegada en la silla sin palabras.

Mz

Yo vi High Art en 2003, es decir, cuando conocí a la sita Dyke y a la que era entonces su videoteca. He de decir que la vi en inglés sin subtitulos y que por aquel entonces no sabia decir mucho más allá de My name is… pero aun así la película me impactó con sus imágenes, con lo muchísimo que transmitían sus actrices y con la iluminación y el sensual movimiento de la cámara. Me gustó especialmente la actuación de Patricia Clarkson (Greta) ya que la actriz le imprime esa intensidad que necesita el personaje. Sinceramente, la primera vez que vi la película no sabía decir si me gustó o no, me explico. Después de ver toda la peli sin entender apenas nada va y acaba como acaba, pues en fin, que hasta me enfadé un poco y todo, jajajaja. Aun así, estoy con Dyke en que es una película que no pasa de moda. Quizá tiene personajes muy estereotipados pero para poder hacer la crítica que lanza creo que era inevitable. A pesar del final y de los esterotipos, creo que es una película que te hace reflexionar sobre muchas cosas: drogas, amistades interesadas, la ambición por ascender, el regodeo en un pasado que fue mejor y el surgir del amor pese a todos los inconvenientes.

Con High Art tengo un sentimiento de amor-odio que me ha sucedido pocas veces con una película. Me gusta, sí, pero al mismo tiempo detesto la forma en la que acaba y eso le resta las ganas verla. Aun así la he visto varias veces y la recomendaría sin dudarlo.

Muchos años después de verla por primera vez, nosotras hemos comentado hasta qué punto la relación entre ellas es una huída de sus respectivas relaciones en ese momento que ya parecen acabadas; o si creemos que surge esa fuerza imparable… amor del bueno, vamos. En la película se confiesan amor la una a la otra (una de las escenas más brutalmente íntima es el momento en el que Syd le dice a Lucy que cree que se está enamorando de ella) pero por otra parte, su relación parece un rollo liberador sin más. Ahí está el debate.

La película está muy centrada en las dos protagonistas, pero nos encantan casi todos los secundarios y los papeles que representan en la historia: La recepcionista maliciosa, la impostura de los jefes de Syd que son un par de snobs, la actriz yonqui que vive en el pasado, el novio de la universidad que no evoluciona al ritmo de Syd, la madre rica y judía de Lucy, los amigos de fiesta enganchados al jaco… Todos actúan haciendo crítica de sí mismos y de sus vidas. Incluso las protagonistas pueden ser vistas como una trepa y una artista underground que crítica el sistema pero que está encantada con volver a él. La película tiene también esa lectura, muestra el mundo no tan glamouroso del High Art a través de sus personajes.

Esta películas nos encantó en 1998 y nos encanta en 2011. En su estreno tuvo muy buena acogida entre el público del cine independiente. Recibió premios importantes como el del festival de Sundace y fue considerada por la crítica como una película clave dentro del cine independiente de finales de los noventa. Eso sí, High Art te deja un sabor agridulce. Por un lado tenemos grandes personajes perfectamente definidos, un buen guión y una crítica a las drogas; y por otro lado tenemos un amor que acaba de forma trágica.

En conclusióbn

High Art es dura, crítica, romántica, intensa, absorbente, sensual, concisa y melancólica. Muy recomendable por todas estas cosas y, aunque odiemos los finales megadramáticos, es sin duda una película para incorporar a la dvdteca de todas las lésbicanarias.