Hace unos días le agradecía a Tania G que fuera una lesbiana visible por todas nosotras sobre todo porque no hay prácticamente ninguna otra en la televisión española en este momento. El hecho quedo más que patente cuando Amnistía Internacional lanzó su campaña de sensibilidad social ante las consecuencias de ser homosexual en ciertas partes del mundo y no encontró una mujer lesbiana que pudiera salir en el cartel así que tuvieron que pedírselo a Patricia Vico.

A muchas de nosotras nos gustaría ver más chicas famosas animarse pero esta semana he tenido dos pruebas muy claras de porque la mayoría prefieren hacer pico de cera antes que hablar de su homosexualidad.

Esta semana Tania G ha sido «entrevistada» en el programa de Ana Rosa Quintana en lo que solo puede catalogarse de un espectáculo vergonzoso y triste. Durante toda la entrevista los supuestos periodistas se dedicaron a acosar a la chica preguntándole una y otra vez por su supuesto enamoramiento con Tania S.

No importaba cuantas veces Tania G repitiera que entre ellas solo había una amistad, ellos seguían insistiendo y alegando que el cariño que se profesaban no podía ser normal. El tiempo que dedicaron a sus planes musicales, su carrera o cualquier otro tema que pudiera ser interesante sobre su persona para el montón de personas que le seguimos fue prácticamente nulo.

Me cabrea no solo porque así demuestran la baja calidad de su programa sino porque es un insulto a los espectadores que en su mayoría buscaban otra clase de información sobre la chica.

Eso si Tania se merece un aplauso por su buen estar y lo paciente y formal que fue al contestar todas las preguntas (cuando podía y no le interrumpían). Yo directamente me hubiera marchado del plato sin contemplaciones.

A finales de semana la volvieron a entrevistar en Esta Pasando y pan con lo mismo, la pobre chica es que se nota super incómoda con las preguntas y con la insistencia en pasarle una y otra vez unas imágenes que todos sabemos están sacadas de contexto.

En fin que es una tristeza darse cuenta que al menos en los medios de comunicación las cosas no han cambiado mucho y si decides salir del armario vas a perder toda oportunidad de que la gente se centre en tu trabajo y no en tu vida privada.

La próxima vez que eche de menos una lesbiana en televisión ya sé a quien culpar.