Aquí les traemos una historia ambientada en la España de los años 50, es una serie de carácter diario donde sus protagonistas son Ana y Teresa. Su historia hace más de un año que está en antena, llegaron en la cuarta temporada de la serie, convirtiéndose en las protagonistas de la misma, a día de hoy van por la quinta, así que mejor les hago una introducción de lo que ha sido la vida y obra de estas dos chicas en todo este tiempo.

Ana es hija de un gran empresario dueño de los almacenes Rivas. Estudió en el extranjero y al regresar a casa se incorpora en el negocio familiar, aunque de una manera un tanto especial, puesto que pasa a ser una dependienta más, sin que nadie sepa que es la hija de los dueños. Es así como conoce a Teresa, que desempeña el mismo puesto que ella en los almacenes.

Teresa llega junto con su madre Carmen y su hermano Alfonso. La familia se ha trasladado a la cuidad en busca de mejores oportunidades. Ambos hermanos entran a trabajan en los almacenes Rivas.

Ana y Teresa

La amistad de ambas va creciendo hasta que un día Teresa se entera de los verdaderos orígenes de Ana, se sintió muy engañada por su mejor amiga, pero la amistad es lo que tiene, y eran muy importantes la una para la otra como para que su relación terminara ahí.

Poco después apareció Héctor, un policía del cual los dos se enamoraron, pero éste tenía predilección por una de ellas, Teresa. Esto causó muchas disputas entre ambas, aunque a veces no estaba claro si tenían celos por Héctor o era por ellas. Junto al policía, también entró en escena el hermano de Teresa, Alfonso, que se enamoró perdidamente de Ana, poco a poco se la fue ganando.

Estaban a punto de empezar una relación con sus respectivos cuando ocurre algo entre ellas. Ambas se besan, fue un beso inesperado y espontaneo en el ascensor de los almacenes. Mientras que Ana piensa que ha sido un gesto hermoso y una demostración de afecto y cariño, Teresa, en cambio piensa que es pecado, que dos mujeres no se pueden comportar de ese modo, pero Ana le dice que no lo es, que es la única forma de manifestar lo que ambas sienten.

Ana y Teresa

Esa misma noche tanto Teresa como Ana, se acuestan por primera vez con Héctor y Alfonso, en un amago de no querer darle importancia de lo sucedido. Y a la mañana siguiente, ambas cuentan su experiencia y vuelven a comportarse como simples amigas. Pero aunque tienen pareja, entre ellas habrá más acercamientos. En uno de ellos, Teresa le dice que no pueden seguir así, que tiene miedo de lo que puede pasar entre ellas y entonces Ana le responde que nunca dejará que pase algo, porque ante todo le importa su amistad.

Ana y Teresa

Pasa el tiempo y las parejas se casan. Las dos comienzan sus vidas y todo parece ir de maravilla para ambas, pero con el paso de los meses, cada vez hay más disputas entre las chicas, llegando a un punto donde Teresa abandona los almacenes en los que la única dueña es Ana, tras la muerte de sus padres. Empiezan vidas paralelas y mientras que Teresa se queda embarazada y tiene una vida ejemplar, Ana no corre la misma suerte, puesto que su marido, ahora convertido en un gran campeón del boxeo, se ve envuelto en un mundo que lo llevará a otras mujeres y a las drogas.

Con el pasar de los meses, Teresa abre una pequeña tienda de ropa en el barrio, negocio que afortunadamente no le va nada mal, mientras que Ana sigue con su trabajo en los almacenes y las peleas constantes con su marido hacen que este se vaya a casa de su hermana.

Un acontecimiento hará que se vean de nuevo y es que el padre de Teresa muere en prisión, estaba en ella por ir en contra del régimen. Pero ni esto hará que las chicas vuelvan a dirigirse la palabra, pues Ana como su matrimonio está prácticamente terminado y no se habla con Teresa decide no ir al entierro, motivo que hace que Teresa se enfade aún más.

Ana y Teresa

Cuando vuelven del entierro, que se hizo en el pueblo de la familia, Carmen, la madre de Teresa y Alfonso que en esos momentos se encuentra viviendo con su hija para ayudarla en los meses finales del embarazo, le aconseja a su hijo que vuelva a casa con su mujer, así que cuando deja la casa de su hermana todos creen que es con ese fin, pero a la mañana siguiente, se lo encuentran en la calle tirado, semi inconsciente, puesto que ha vuelto consumir.

Héctor llama por teléfono a Ana para explicarle la situación, ésta no conocía el problema de su marido con la adicción a las drogas, siempre había creído que su estado era causado por la bebida.

Alfonso vuelve a casa, habla con Ana y le dice que necesita ayudar profesional para poder salir de la situación en la que se encuentra, que está dispuesto a todo, que lo que más le importa es ella y quiere intentar salvar su matrimonio.

Esa misma noche deciden dormir en habitaciones separadas, algo que su marido no entiende muy bien y habiendo bebido más de la cuenta, va al dormitorio de Ana e intenta forzarla, aunque al final logra recapacitar y se marcha.

Ana y Teresa

Ana al día siguiente habla con su vecina y amiga Cristina y sincerándose le cuenta que cometió un error al casarse con Alfonso, porque aunque se querían, eran demasiado diferentes, así que ahora tiene que empezar desde cero sin marido y sin nadie a su lado. Así que cuando Alfonso se levanta por las mañana, su mujer le dice que ya le tiene las maletas preparadas, puesto que le pidió ayuda, ella ha conseguido que ingrese ese mismo día en un centro especializado para acabar con las adicciones. Ella le dice que lo ayudará con ese tema, pero que en lo demás, en lo que se refiere a ellos, todo está acabado.

Ana va a la tienda de Teresa, para contarle lo sucedido, allí también se encuentra Carmen. Ana le relata los últimos acontecimientos y donde se encuentra Alfonso en esos momentos. Mientras Teresa se sorprende y enfada porque no tenía ni idea de lo que le estaba ocurriendo a su hermano, su madre confiesa que algo sospechaba.

Teresa le recrimina que haya dejado aislado a su hermano, pero Ana le dice que era lo mejor y que solo les queda esperar a que se recupere. Carmen le da las gracias por ayudar a su hijo y se va a casa, porque está afectada por lo sucedido con Alfonso.

Ana y Teresa

Una vez solas, Teresa le empieza a recriminar que en parte lo sucedido con su hermano es culpa de Ana, y dice que al casarse con ella se vio sometido a una gran presión que no pudo superar, y empezó a consumir para escapar de una relación que le estaba haciendo mucho más daño. Además no cree que su hermano haya ingresado en un sanatorio por su propia voluntad. Entonces Ana le dice que pregunte a su marido Héctor cual era la situación de Alfonso, ya que éste estaba al tanto de la adicción de su cuñado. Teresa se enfurece y le grita que no meta a su marido. Ana le dice a Teresa que realmente no le importa ni su marido, ni su hermano ni nadie, solo que no se hable si no es bajo su control.

Ambas empiezan a discutir, que si eres una egocéntrica, que si solo miras por encima del hombro, que si complejos de inferioridad…Empiezan a forcejear, pero de repente, y sin apenas darse cuenta todo termina en un tremendo de beso. Después Ana se marcha del lugar sin mediar ni una sola palabra.

Ana y Teresa

Ana se encuentra sola en casa y empieza a recordar el beso con su cuñada de tan solo hace unas horas. Coge una cajita que tiene en su dormitorio y recuerda como meses atrás se besó con teresa en el ascensor de los almacenes por primera vez. Dentro de la caja hay fotografías, de su familia, de ella y Alfonso y de Teresa, se queda mirando esa fotografía última y empieza a recodar esa conversación que tuvo lugar después de ese primer beso

Ana: Crees que no entiendo lo confusa que te sientes. Teresa, aunque no vuelva a pasar, me gusta haberte sentido, haber sentido tu beso.
Teresa: Pero es un pecado.
Ana: No es pecado, es una demostración de cariño. Las dos sentimos algo que solo se puede expresar así. ¿Qué dicen que es pecado? Pues que lo digan, tú y yo sabemos la verdad.

Ana decide ir de nuevo a ver a Teresa, ésta la recibe de un modo muy agradable, pero Ana le dice que tienen que hablar de lo que pasó ayer, de ese beso. Teresa actúa como si nunca hubiera ocurrido mientras que Ana le dice que puede si quiere ocultarlo, pero que no podrá negarlo.

Ana le dice que lo de ayer fue importante para ella, no el beso, sino que le hizo recordar lo que han sido la una para la otra y le confirmó que lo siguen siendo, entonces Teresa le dice que no son nada, pero Ana le responde que sí, que ambas se quieren; Teresa no puede creer lo que está escuchando.

Teresa: Yo solo tengo un amor en mi vida y es Héctor, y lo quiero con toda mi alma.
Ana: Puedes engañarte a ti misma si quieres, negar todo lo que pasó entre nosotras, pero terminaras haciéndote daño como ya me lo estás haciendo a mi.
Teresa: ¡Pero estás loca! ¡Completamente loca! Tú como puedes pensar que yo puedo querer a una mujer.
Ana: No estamos hablando de una mujer, estamos hablando de mi…y me quieres.

Pero Teresa no puede seguir escuchando todo aquello y termina echándola de la tienda. Esta muy afectada por lo ocurrido y cuando llega a la tienda Adela, una profesora jubilada que le dio clases durante un tiempo a Teresa, en una etapa en la que quiso estar más preparada y tener mas conocimientos. Se abraza a ella, llora desconsoladamente. La mujer que la conoce bien le pregunta si le pasa algo más, pero Teresa responde que está así por la muerte de su padre

Estaba pensando en mi padre, en lo mucho que nos quería y que a veces no sabía demostrarlo. Quizás sea algo de familia, o solo de mi padre y de mi que a veces no somos capaces de demostrar nuestros sentimientos

¿Me parece solo a mí o está refiriéndose a sus sentimientos con Ana? Llega a la tienda también su madre, y al verla tan afectada opina que lo mejor sería que se marchara a casa a descansar pero Teresa se niega y dice que lo que menos necesita en ese momento es tiempo para pensar, que eso es lo que menos quiere.

Vemos a Ana en su oficina, tiene muchos proyectos para su negocio entre ellos una expansión del mismo. Todo se ve interrumpido por una llamada, es alguien a la que no ve desde la facultad, y confiesa que le pidió a su secretaria que le buscará el teléfono para ponerse en contacto de nuevo, toda la conversación es un tanto misteriosa y solo queda claro que quedan para comer e ir a una sala de baile. ¿Quién será esa persona? Estoy por pensar que es una mujer, pero no sé, no sé.

Ana y Teresa

Nos encontramos a Teresa caminando con su profesora Adela, hablan sobre la muerte y los duros momentos que atraviesa. Le trae 3 libros. “Coplas a la muerte de su padre” de Jorge Manrique, reflexión sobre la muerte y su sentido. “Cumbres borrascosas” que habla de la historia de amor de dos personas de diferentes clases sociales. “Madame Bovary” la que busca constantemente el amor puesto que no es feliz con su marido. ¿Me lo parece a mí o su profesora es demasiado lista y se ha podido percatar de algo? Porque es mucha la casualidad los libros que le da para que lea.

Y hasta aquí de momento la historia, veremos que nos depara la próxima semana. Le tengo que agradecer a una persona que me ha ayudado muchísimo a la hora de escribir la historia de Ana y Teresa desde el principio hasta esta misma semana. Esa persona es mi madre que es la autentica fans de la serie, todo habría sido más difícil sin sus aclaraciones y correcciones ¡¡Gracias!!