GAP es esa serie que no es que te deje con ganas de más, es que necesitas más de la serie porque consigue dejarte con la miel en los labios de una manera inimaginable. Sobre todo, si en el capítulo anterior te dejaba con las protas pilladas en plano beso deseado y pedido por todas; siendo descubiertas ahora por su amiga Kade.
Porque sí, en pleno momento de andar en las nubes con el beso, Mon y Lady Sam son descubiertas por Kade que, no pudiéndose quedar ella en silencio, corre a decírselo a las más sin que la parejita de moda pueda hacer nada. Literal, cuando llegan, ya Kade lo ha gritado a los cuatro vientos. ¿La respuesta de Lady Sam a que si ha besado a Mon? “Todo el mundo lo hace”, a lo que tengo que añadir, más quisiéramos algunas.
El caso es que no lo van a dejar en un “algo normal”, porque Jim, para sacarla de sus casillas a las dos, intenta besar a Mon. Total, si es tan normal, ¿qué importaría que ella la besara también? Pues importaría, porque el sopapo que se lleva por Lady Sam es pequeño. Aquí solo una persona va a besar a Mon y esa es ella, que para eso estamos.
Por lo que un poco ya a la defensiva y habiendo montado el numerito con Jim, esta deja el restaurante junto con Mon. La pobre, a penas dice palabra alguna hasta que están fuera del lugar a solas sobre como se ha portado Lady Sam con su amiga. Sin embargo, y creyéndonos que nos va a soltar una excusa boba, por el contrario y es que Sam, admite casi, que lo que tuvo es un ataque de celos en todo su esplendor cuando Jim fue a besarla. La primera vez que vemos a señorita Sam siendo tan honesta. Además de Mon comprendiéndola de la manera en que lo hace.
Así que, ¿cómo arreglar la situación? Lady Sam llamará a su amiga y lo arreglará por teléfono. Después de todo, ya tiene claro que fue ella misma la que arruinó todo. Sin embargo, Mon le hace que vaya en persona a disculparse. Es lo mejor, siendo amigas como lo son, ¿no? ¿O te disculparías con tu amiga por teléfono si le importaras?
Mon solo quiere lo mejor para la Lady Sam y esta que decide ir y hacer lo que quiere. Veamos lo que pasa.
Pasamos al día siguiente, Mon en la oficina, cuando ¡sorpresa! Jim indica por el grupo de chat que se ha disculpado Lady Sam con ella y nada más y nada menos que en persona para intercambiar golpes por besos. ¿Qué ha pasado para que ocurra eso? Ni idea, solo se ve que a Mon le ha gustado eso de que Lady Sam le escuchara. ¿Están de buenas entonces? Bueno, más o menos porque cuando Jim empieza a decir que si Lady Sam la había besado , a Mon eso no le cae nada bien.
¿Quién es la celosa ahora, eh?
Pero celosa que está porque nada más hay que ver como se pone, incluso cuando la llama Sam a su oficina, esta se pone en sus trece de que no va. Los de la oficina están que flipa con la chica haciéndole frente a Lady Sam. Sin embargo, sabemos que su jefa puede ser muy persuasiva y diciendo que, si no va, ella va a buscarla, Mon termina entrando al despacho de la misma.
¿Qué quiere su jefa de ella? Pues otra sesión de “mordisquitos”, aunque Mon, como que no está por la labor después de enterarse de lo de Jim. Así que, no.
¿Ir a comer a un sitio caro? Va a ser un no por parte de Mon.
¿Volver a la casa de Lady Sam para seguir con el “trabajo”? va a ser que tampoco.
Va a ser que Sam se va a quedar con las ganas porque Mon rotundamente, se niega todo y Lady Sam se tiene que quedar con las ganas de todo. Enfadó a la amada.
Volviendo a su casa finalmente, vemos a Mon trabajando cuando Nop llega. De verdad que este chico no tira la toalla y, aun habiendo tensión entre ellos, los dos se ponen a hablar un poco, parece que se van a arreglar y todo, hasta que saca el tema en cuestión: ¿Es pareja Mon ahora de Lady Sam? Porque, por lo que se ve, Mon sigue viéndola solo como la idola que tenía de pequeña. ¿La quiere? Desde pequeña la quería, ¿no? Sin embargo, si algo sacamos en bueno de que Nop se atreviera a hablar con lady Sam es que por fin, parece que Mon ha empezado a preguntarse eso del “¿qué somos realmente?”
Aunque no solo esta porque después de tremendo plantón que le pega Mon, Sam está que no sabe que hacer. “¿Cómo reconciliarse con tu novia?” honestamente, que busque esto en Google es de lo más tierno, dado lo señora que es, todo hay que decirlo porque sí, lady Sam quiere reconciliación y reconciliación que va a tener. ¿Cómo? Al más estilo del siglo XXI, con un video al modo TikTok que ella misma se graba.
Es que no se puede tener más ternura. Estamos como Mon cuando lo recibe, se lo enseña hasta a su perro cuando lo recibe. Mon la tiene más que perdonada. Lo que queda ahora es hablarlo, ¿no? Asique, aunque con aviso de Sam, Mon termina por fin teniendo la dichosa charla con su jefa empezando por lo importante: que se enteró que se reconcilió con Jim, que la besó, pero no se lo dijo. Total, no son “amigas”, como le dijo Jim, pero es estúpido que Mon se sienta así, ¿no?
Pues no, por que Sam vuelve a reiterar que también se sintió así cuando Jim intentó besar a Mon.
En resumidas cuentas, estas dos tienen el mayor ataque de celos y están que no se enteran. Madre mía, si es que hay que reírse con lo ciegas que están por la otra. Es que ni se dan cuenta de que lo que están es enamoradas. “¿Qué somos entonces?” le pregunta entonces Mon a Sam, arruinando más el momento. Porque sí, se arruina. ¿cómo? Primero diciendo que no podrían ser amigas por las diferencias entre las dos. ¿Hermanas? A Mon ni le hace gracia que la denomine así. Encima cuando le sigue de que podría ser “su asistente” …
Ay, señor. La paciencia que hay que tener con las dos.
De una manera u otra, la cosa se consigue arreglar y, aunque a Sam le toca prometer que nunca besará a nadie más y suplicar por el perdón, por fin parece que la cosa se tranquiliza un poco y la cosa consigue seguir su flujo. Para que luego digan que la comunicación no es la clave.
Pasamos al día siguiente, pillando a Lady Sam ensayando su baile en la empresa, nos salió bailarina la mujer; cuando recibe una llamada de Kade. Tienen un baile para la fiesta de matrimonio de Jim donde parece que vamos a ver a nuestra jefa bailar y donde quiere destacar. Aquí la estrella es ella y lo sabe. Vuelve entonces a ensayar y de nuevo, el móvil, esta vez, Mon, que se lleva bronca cuando Sam se cree que era otra persona.
Mon ha terminado el trabajo y se ofrece a llevar algo de comer. ¿la sugerencia de la jefa? Los labios de Mon. Si es que la chica es simple, ya se ve. Y, aunque alagada, Mon ofrece más alternativas.
Sea lo que sea, al traste el baile. Sam recupera la compostura y a esperar a su chica.
Sin embargo, Mon no es que vaya a volver pronto a la oficina porque de repente, ve a Kirk y nada más y nada menos que con Nita, la competencia y la mujer que haría temblar a cualquiera. Como impone. Nada más hay que ver su presentación a Mon.
La cosa es que aquí todo se lía porque cuando Kirk es pillado, enseguida va a hablar con Mon para que no cuente a Sam nada. Incluso confiesa que el topo ha sido él y que lo que quiere es que Nita y Sam se unan para fortalecer la empresa cuando Nita los pilla. Al parecer, ¿todo lo que está haciendo Kirk? Es por el bien de Sam, aunque aquí nadie le está diciendo nada a la susodicha, todo hay que decirlo.
Así que, con la promesa de no contar nada a Sam, Mon vuelve a la oficina distraída. Sus compañeros pensando que es por el límite que le dio la jefa, cuando Mon, sin verlo ni quererlo, está en un problema mayor. Sobre todo, cuando ve que Sam y Kirk salen discutiendo de la oficina de su jefa y, claro está, Mon pensando que es por una cosa, sale corriendo a pararles cuando todo es porque alguien está troleando a Sam en Facebook y Kirk quería ayudarla.
Sin embargo, esto lo que abre es otro problema: el de que Kirk quiere meterse en la vida de Sam, cuando literalmente, esta está teniendo una aventura con Mon. Pobre Mon, ya no sabe ni lo que hacer en este caso.
De aquí no se escapa ni el apuntador, como dicen donde vivo.
Con el momento vivido, Mon vuelve a casa cuando es interceptada por Lady Sam que, cansada de haber lidiado con Kirk, quiere invitar a Mon a comer. Sin embargo, de nuevo se niega y rechaza la invitación, diciendo que tiene que hacerle la compra a sus padres… lo que Lady Sam se toma como un desafío al parecer porque lo siguiente que vemos es Lady Sam con un supermercado entero comprado para los padres de Mon. Un poco más y no le trae el supermercado a la casa porque está con los cimientos pegados al suelo que si no, también.
Los padres de Mon ni siquiera saben como actuar. Tienen que pararla incluso cuando se ofrecen a comprar hasta la comida para Singha, quien parece amar tanto a Lady Sam como lo hace su ama, hay que añadir.
Estando de esta manera, Mon llega por fin casa también y, siendo salvada por su padrastro, amamos a ese super padre; pide de cambiarse primero. Sin embargo, Sam va a aprovechar y digamos que, aunque esta pide permiso para ver el cuarto de Mon, quien sufre por ello; los padres le dan permiso enseguida. Literalmente, si por ellos hubiera sido, la hubieran llevados ellos mismos.
El caos de la escena es que es icónico.
Aunque más icónico cuando ve Sam el mural de admiración que tiene Mon en su cuarto. La pobre, no sabe donde meterse para ocultar las cosas a Sam. Sin embargo, a esta no es que le interese tanto los murales de admiración, si no que Mon le explique por fin qué le pasa. Incluso llega a acorralarla contra la pared pidiéndole las explicaciones. Incluso con la amenaza de “morderla”.
Esta chica no se anda con rodeos, pero Mon, antes de que Sam se lance, responde “se siente despreciada” y cuando le aparta la mirada, Sam le pilla el rostro y hace que la vuelva a mirar. ¿Os digo la verdad? Amo cada vez que Sam agarra el rostro de Mon. Es tan momento fanfic que es icónico, la verdad.
Pero volviendo al tema: Mon se siente despreciada, una extraña para ella. Sin embargo, para Lady Sam es todo lo contrario. Mon quiere que se lo deje claro, pero cuando Sam no puede expresarlo y Mon entonces siente que solo malinterpretó el momento. Era mejor que la dejara en paz. Aunque Lady Sam no va a aceptar aquello como respuesta. “Puedo ser todo lo que quieras que sea” le dice entonces, pero Mon es realista y sabe que eso no es posible.
Sam insiste, por lo que Mon entonces lo pone a prueba. ¿Puede ser lo que sea que le diga ella que sea? Pues que sea un perro entonces… Su perro la quiere mucho, entonces, que sea como Singha. ¿Aceptará Lady Sam? Por supuesto.
Y es que cuando están juntas, a lady Sam solo le importa una cosa: la felicidad de Mon, como vemos. Si quiere que sea un perro, ella será un perro y hará lo que hace un perro: besará a su ama, la lamerá…
Sam empieza a jugar con Mon. Será el “Chamcham” de “Monmon”… y nosotras estaremos derretidas porque la dulzura de estas dos nos va a matar. Si es que están muertas la una por la otra y ni se dan cuenta. Esas son las mejores historias de amor, ¿verdad? Las que se viven sin saberlo casi.
Por lo que ahora, cada vez que Mon llame a Lady Sam “Cham Cham” esta le dará besitos y, claro está, Mon que no es tonta, la llama así, lo que hacen que las dos terminen una encima de la otra en la cama y disculpándose en la reconciliación a “mordisquitos”.
Con estas dos ya reconciliadas, pasamos a la fiesta de compromiso de Jim. Todos están allí, sacándose fotos, bebiendo y disfrutando: Jim, Yuki, Mon… incluso Kirk, a quien Mon confunde cuando lo que quiere es ver a Lady Sam. Sin embargo, toca aparentar por el momento, sobre todo, frente a Kirk, que se hace la víctima de que Sam nunca lo lleve con ella a sus reuniones.
Con las fotos echas, por fin sabemos donde está también de paso Lady Sam, cuando Jim nota que Mon solo la busca: es que está esperando al momento del número de baile que tienen por delante de parte de Jim para su ahora esposo. Porque sí, nuestra Lady Sam se marca un pedazo de rutina con la sintonía de la serie, junto con Tee, Kade y Jim. Oficialmente, nuestras 4 Fantásticas del programa.
Un bailecito que tiene embobada a Mon y Kirk, que casi las pilla cuando comenta como podrá haber tenido el tiempo para ensayar y Mon le suelta un comentario dudoso. Sin embargo, Kirk parece que ni se da cuenta y, de repente, lo único que le pide a Mon que le ayude con algo cuando llegue el momento.
Miedito me da.
Reuniéndose los tres, Kirk, Mon y Sam tienen un pequeño encuentro algo incómodo. Sin embargo, lo incómodo llega cuando un familiar se les acerca y, como que recuerda un poco que allí Mon no pinta gran cosa, aunque Lady Sam le diga lo contrario. Pero que Mon no se preocupe que para ayudarla, estarán allí sus amigas. Es Yuki incluso la que, cuando empiezan a hablar del futuro amoroso y ve como su amiga lo ve un poco negro dado su situación; la que le anima. ¿Quiere a Lady Sam o ama a Lady Sam?
Todo hay que confesarlo, ¿no? Después de todo, lo malo de una relación es eso, no saber nunca en qué punto de sus vidas están en realidad. ¿La quiere o la ama? Sea lo que sea, lo que Mon ve es que Lady Sam está tomada por Kirk y nada más. Cosa que no convence ya a la pandilla. Mucho rodeo, pero no queda claro. Entre ellas, ¿qué siente realmente Mon? Pues lo que se siente es desplazada, porque cuando pregunta si Lady Sam ya dijo algo, todas se quedan en la evasiva….
Así no, eh. Así, no.
¡Hora del ramo! Esto salva a Mon y cuando todas se adelantan a cogerlo, es la misma Sam la que lleva a Mon hasta en frente para que también lo pille. Porque lo pilla, Mon termina llevándose el ramo con Sam a su lado… ¿una pista de lo que viene? ¿El momento feliz de la pareja?
Bueno, no por mucho porque cuando Mon sube al escenario tras pillar el ramo, Kirk de repente sale de la multitud para nada más y nada menos que pedirle ante todos los presentes la mano a Lady Sam.
¡Ay, señor! Nos gusta el drama, pero así no.
La cara de Mon al darse cuenta de que puede perder a la mujer que quiere, la impotencia de Sam de verse entre la espada y la pared. Kirk que parece que no se entera de que, llegados a este punto, como que sobra un poco.
Aquí van a salir todos muy mal parados porque el drama se viene y va a doler como el mismo, como se dice donde vivo.
Desde luego, no todo iba a ser de color de rosa en la historia de Lady Sam y Mon, pero la pasión que tienen estas dos y el amor que desprenden la una por la otra, hacen que esta historia se esté convirtiendo en una de mis favoritas. Además, para una romántica empedernida como yo, es todo un sueño, todo hay que decirlo.
¿Conseguirán Mon y Sam salir de este bache? ¿Qué pasará con Kirk?
Decidme ¿Qué pensáis de esta historia? Que mientras tanto, yo me voy viendo el siguiente capítulo que el drama que se viene va a ser del bueno.
¿Tienes Telegram instalado? Recibe nuestros artículos al momento en tu teléfono suscribiéndote a nuestro canal.