Señoras, vamos a tener que engancharnos a otra serie. Permítanme que les presente a Greer y Brenna la pareja lésbica de Chasing Life. Sinceramente, cuando la serie presento al personaje de Greer no pensé que fuera a dar mucho juego, sobre todo porque parecía que el personaje de Brenna estaba bien definido y con novio. Pero a medida que han ido avanzando los episodios, la relación entre las chicas se ha empezado a consolidar, así que no me queda otra que recomendarles que le echen un vistazo a está nueva parejita conocida en el mundo del hampa lesbicanario como Grenna.
Empiezo por contarles un poco de la historia hasta ahora para que se pongan al día. Greer y Brenna se conocieron porque van a la misma escuela y les ha tocado hacer un trabajo juntas. Son polos opuestos totalmente. Greer es la típica chica cool de la escuela, con una sonrisa eternamente en la boca y un vestuario en el que impera el rosa. Brenna por su parte tiene una actitud más irónica respecto a la vida, ahora mismo no la alumbra el sol porque su hermana está enferma de cáncer y en su vestuario impera el negro.
El caso es que, en consonancia con su personalidad, Greer de inmediato intenta hacer migas con Brenna para quedar y hacer el trabajo juntas, pero la morena casi que no la tolera porque la considera la típica niña rubia y tonta. Igual tienen que hacer el trabajo juntas, así que quedan un día para poner manos a la obra, pero la única interesada en trabajar es Greer porque Brenna está muy ocupada mensajeando por su teléfono. En fin que por hacerlo rápido, las chicas deciden hacer una apuesta. Greer juega al tenis, así que Brenna le dice que jueguen un partido y la que pierda hace todo el trabajo.
El momento del partido llega y Greer le está poniendo un repaso a Brenna que básicamente ni ve la pelota. Pero extrañamente dobla la apuesta y añade que la que pierda hace toda la tarea de la otra de la materia durante una semana. Total que en cuanto acepta Brenna saca su verdadero potencial y la hace picadillo porque resulta que es un crack del tenis. Igual Greer no pierde la sonrisa y al final termina sacándole una también a ella.
Al otro día en la escuela, Greer se topa con Brenna y la saluda, pero resulta que como la morena está con una amiga no quiere que se den cuenta que se está llevando bien con ella. Greer capta de inmediato el tema y se pira con cara de «¿en serio tía?». Pero igual el malentendido no dura mucho porque se vuelven a encontrar y vuelven a hacer migas, de hecho, se llevan tan bien que una amiga de Brenna se da cuenta de la química y cuando se quedan solas a platicar le pregunta diréctamente si tienen algo.
Brenna le dice que no, pero no porque esté con su novio o porque le preocupe que sea una chica, sino porque cree que son diametralmente opuestas y no harían buenas migas juntas. Igual cuando las cosas se le ponen pesadas en casa por lo de su hermana, a la primera persona a quien piensa en llamarle es ella. Greer por supuesto acude de inmediato y las dos platican sobre su hermana y la rubia abraza a Brenna para consolarla.
Al otro día, Greer invita a Brenna y a una de sus amigas a una fiesta en su casa. La morena va con ganas de encontrarse con Greer, pero su amiga tiene ganas de causar problemas solamente. Ya en la fiesta Brenna le presta su teléfono a su amiga y se pone a platicar con Greer sobre su hermana y los sentimientos que tiene al afrontar su mortalidad. La rubia le cuenta lo que sintió cuando murió su abuela y le dice que para ella la muerte no es el final, así que sabe que su hermana va a estar bien pase lo que pase. Las dos se miran a los ojos y la conexión está a tope, pero justo en ese entonces llega el novio de Brenna porque la amiga lo llamó para que se pasara.
En un momento de estupidez mental, Brenna se deja convencer por su novio de enrollarse en el cuarto de Greer. Obviamente, la rubia se los encuentra en su cuarto a medio faje y les pide que se marchen de su casa con una carita de decepción que nos deja a todas con el corazón en un puño.
Al otro día, Brenna intenta por todos los medios disculparse con Greer, pero la rubia está muy enfadada y no tiene ganas de hablar con ella, así que las cosas se quedan tan cual. Pero esa noche, Brenna no puede con su vida, así que va hasta la casa de Greer para pedirle disculpas. Le dice que no puede soportar el hecho de que la odie y que siente muchísimo lo que pasó. La rubia le responde que no la odia, que a veces ser lesbiana es una mierda porque una no sabe si la chica que te gusta te corresponde (¡estamos contigo Greer!) y que ella sentía que las dos tenían una conexión, así que por eso hirió su sentimientos.
Greer: Pensaba que teníamos algo.
Brenna: Lo teníamos.
Greere: Teníamos… En pasado…
Brenna: No, en tiempo presente.
Y beso que te pego señoras. Brenna se lanza a por todas y hace score porque la siguiente vez que las vemos juntas están besándose otra vez mientras planifican escaquearse en un viaje para ir en búsqueda de la hermana perdida de la morena.
Lo cierto es que, como ven, están desarrollando la historia muy bien. Me ha sorprendido que básicamente nadie ha puesto el grito en el cielo por la relación de las chicas o la homosexualidad de Greer. Básicamente es el sueño que todas querríamos vivir en el que, que estés saliendo con una chica no tiene una relevancia especial más allá de lo mucho que te gusta.
Por esa razón señoras, las invito a que se enganchen a la historia de Greer y Brenna en Chasing Life. ¡Ojalá nos dure la parejita! Mil gracias a todas las chicas que me mandaron este tip. En especial a Jennyfer por recomendarme el canal de YouTube con los subtítulos en español.