Buenos días Lesbicanarias. ¿Cómo estáis? Espero que disfrutando ya del comienzo de esta nueva época del año donde parece que los días más largos y soleados nos ayudan a ver las cosas con más claridad, más perspectiva y de una forma más positiva de lo normal. También espero que, todas aquellas que estéis de exámenes o vayáis a empezarlos en breve, tengáis mucha suerte, mucho ánimo y a por todas.

Hola, tengo 18 años y sé que sonará un poco típica esta historia, pero aun así no sé qué hacer. Sé que soy lesbiana desde los 10 años.

Hace 10 meses conocí a una chica en mi escuela, desde el principio me llamo la atención todo de ella, pensé que se me pasaría, pero no, lo que sentía por ella se intensifico más con el tiempo. Nos hicimos muy amigas, me tenía confianza y yo a ella. Decidí contárselo pues llega a ser insoportable tener a alguien que quieres, tan cerca y no poder hacer nada. Le escribí una carta, mientras ella la leía yo estaba a su lado, casi al terminar la carta ella comenzó a llorar, y sin decir nada me abrazo, le pregunte que pensaba y me dijo «no tengo nada que decirte».

Acepte que ella no me quería, nuestra amistad siguió igual por un tiempo, pero después comenzó a portarse rara, estaba muy sensible conmigo, se enojaba por detalles, hasta que nos distanciamos totalmente, Ya no me habla. Estamos a punto de salir del colegio y no quiero terminar así con ella. ¿Debo hablar con ella? ¿Lo dejo así? Hasta hoy no he sabido porque lloró al leer la carta, ni porque dejo de hablarme tan repentinamente. Un saludo y gracias por leer mi mensaje.

Zay

Buenos días Zay, ¿cómo estás? Bueno, por lo que cuentas, no te gusta dejar las cosas a medias, y este tema, parece que te tiene a medio camino entre aclarar todo, el por qué reaccionó de esa determinada manera, y el terminar esta etapa dejando todo aclarado.

Desde mi punto de vista, y teniendo en cuenta que siempre es mejor dejar las cosas claras y las etapas cerradas, deberías hablar claro con ella, decirle el por qué decidiste actuar de esa manera, escribirle la carta… si tienes preguntas que hacerle, de por qué reaccionó así, por qué no te dijo nada…éste es el momento, déjale muy claro cómo te ha hecho sentir a ti todo esto, qué era lo que querías explicarle o dejarle claro, y sobre todo, cómo te hace sentir todo esto y porqué has decidido hablar con ella ahora, antes de terminar esta etapa.

Para ti, corrígeme si me equivoco, es importante no quedarte con las dudas y con lo malo de todo este tiempo, sino todo lo contrario, y dado que ella en ti despertó ciertos sentimientos y te hizo tomar esa decisión, debes hablarlo, sincerarte, decirle lo que quieres, el porqué de hacerlo ahora y por qué es importante para ti que todo esto tenga un sentido, una explicación.

Deja que ella haga lo mismo, que se exprese, te explique cómo se sintió cuando recibió el escrito, qué le hizo cambiar de actitud contigo , por qué reaccionó de esa manera y qué siente ahora mismo, pues es importante que ambas partes expliquen su forma de ver y sentir las cosas.

Intenta hacer de todo esto algo positivo, algo que te sirva para encontrar las respuestas que necesitas, para avanzar y cerrar capítulos en tu vida, para así, poder pasar a otras cosas teniendo esto solucionado y sintiéndote bien contigo misma.

Mucho ánimo, y si te apetece, una vez que tomes tu decisión, cuéntanos cómo ha ido todo y si te ha servido a ti para solucionar tus dudas, cerrar el capítulo y avanzar. ¡Un saludo!

Johana

Hola Johana, hace tiempo que te escribí preguntándote cómo salir del armario con mi madre. La cuestión es que ya lo hice, fue el peor error. Mi madre es homofóbica, me ha llevado al psicólogo para que me «cure» porque está convencida de que es una condición psicológica.

Ya no sé qué hacer, trato de mantenerme firme pero no hace más que llorar, me ha dicho incluso que prefiere morir, que le ha pesado más mi homosexualidad que la muerte de su familia, que ya se le acabó la vida… Me hace sentir culpable y ya no encuentro salida, se acaba mi paciencia y no sé si meterme de nuevo en el closet y mentir diciendo que he cambiado y que soy heterosexual… ¿Qué hago?

Andrea

Buenos días Andrea, ¿cómo estás? En primer lugar, decirte que siento que ahora mismo te encuentras en esta tesitura con tu madre pues, comprendo lo difícil que es ahora mismo la situación y todo lo que se te debe estar pasando por la cabeza para poder solucionarlo.

Ahora mismo, tu madre, por desconocimiento, miedo… está reaccionando de la manera más negativa posible, no te está respetando, se está dejando llevar por sus miedos y no te está escuchando. Has comentado que estás acudiendo a un psicólogo, y sé que no ha sido elección tuya, sino de tu madre, pero cuando vas a consultas, ¿le has explicado bien la situación? ¿O él se centra solamente en su propia teoría? Deberías intentar hablar con tu madre sobre esto e intentar que entienda que, si ella quiere que acudas a una terapia, primero debe saber o tener en cuenta si tú quieres acudir a terapia, y además, tienes derecho a decidir con qué terapeuta quieres trabajar pues si no confías en él como profesional, no vas a contarle toda la verdad y si no es así, él no podrá hacer bien su trabajo y ayudarte. Ahora mismo no confías en él y no tienes una relación de paciente-psicólogo estrecha y basada en la confianza, por lo que así, es muy difícil que te sirva para avanzar.

Sé que todo esto es muy difícil, que te has llegado a plantear el volver a “entrar en el armario”, ¿pero eso qué te aportaría ahora mismo? ¿Solucionaría algo la situación? No renuncies a tu vida, a tu propia felicidad porque las personas que tienes alrededor, aún no lo entiendan. Ahora no puedes dejar que otras personas decidan cómo tienes que ser, actuar o vivir tu vida por el hecho de estar en el absoluto desconocimiento. Sé que es muy duro lidiar y convivir con una persona tan importante para ti y que ahora mismo se siente, y te hace sentir a ti, tan mal, pero si cedes a los chantajes emocionales, si cedes por querer que durante un momento ella se sienta mejor o deje de estar disgustada, al final volverás al principio del camino, donde te ahogabas por la necesidad de contarlo, para vivir como tú realmente querías.

Sé fuerte, sigue dialogando con tu madre e intentando que vea la realidad tal cual es. Debe saber cómo te hace sufrir a ti todo esto, que no es un capricho y que no va a cambiar las cosas cuanto más culpable te haga sentir. Sé que es difícil y muy duro, pero ahora es cuando tienen que ver que esto no es algo que hayas hecho para fastidiarles o hacérselo pasar mal, sino que es una realidad, la realidad de cómo eres, sientes y te sientes.

No dejes que la culpabilidad y un mal psicólogo (dado que me parece indignante que a día de hoy haya profesionales que respalden esa absurda teoría y vean la homosexualidad como una enfermedad) te hagan retroceder, aun sabiendo que tu situación actual es muy dura. Déjale tiempo, espacio para que vaya digiriendo todo esto y sé muy sincera, que sepan cómo te afecta todo esto y que, no sólo ella es la que lo está pasando por momentos difíciles, que tú sólo quieres que te respeten, traten y quieran como lo hacían con anterioridad a hablar de este tema pues, lo acepten o no, tú sigues siendo la misma persona, la misma mujer y su misma hija.

Espero sinceramente que vaya todo mejorando poco a poco, que se den cuenta que tú eres tú y siempre lo serás y que esto, no es ninguna enfermedad. Mucho ánimo, si necesitas tratar alguna parte de todo esto que sea más personal o que necesitas hablar de otra manera, puedes mandármelo para respuesta privada. Espero que se den cuenta de cómo están actuando y cómo te están tratando para que lo cambien cuanto antes. Respeta sus opiniones, pero no las aceptes sin más, intenta que, aunque por el momento no lo acepten, al menos lo respeten y te dejen a ti tomar las decisiones importantes que afectan a tu vida, a ti misma.

Mucho ánimo, paciencia y por favor, apóyate en la gente que tienes alrededor que sepa de todo esto, para que al menos puedas desahogarte y tener un apoyo cercano. No dejes de ser tú misma, ni de ser sincera con lo que sientes y te hace feliz en la vida. ¡Saludos!

Johana

Buenos días Johana. Soy una chica de 23 años que vive en un pequeño pueblo alejado de la mano de Dios. Soy una persona tímida, algo inadaptada social porque nunca he sabido como relacionarme bien con la gente. Cuando conozco a alguien nuevo siempre me quedo callada sin saber que decir y como la otra persona no sea de esas que hablan por los codos se producen silencios incómodos e insoportables.

El problema que surge a raíz de todo esto es que nunca he tenido pareja y desearía tenerla. No tengo el mejor físico del mundo, soy delgadita, bajita y algo feúcha (para que voy a negarlo), pero creo que tengo muchas cosas que puedo aportar. Además, aquí en el pueblo están todos enclosetados por eso de las apariencias y es imposible conocer a nadie.

Mis amigos si saben que soy lesbiana, a mis padres se lo diré cuando tenga pareja, no tengo ningún problema con eso, la verdad es que la opinión del pueblo me la trae floja. He intentado convencer a mis amigos para que me acompañen a bares de a ambiente en una ciudad que está a pocos kilómetros, pero no hay manera y yo sola me voy a quedar bloqueada sentada en una esquina sin saber qué hacer. La verdad es que no quiero pasarme la vida sola y rodeada de gatos. Espero que puedas ayudarme.

Bea

Buenos días Bea, ¿cómo estás? Ante todo, decirte que está muy bien la sinceridad, ser clara a la hora de hablar…pero está aún mejor valorarse, quererse y cuidarse para llegar a conseguir las metas que queremos conseguir en nuestra vida.

Por otro lado, intenta no agobiarte con eso de no haber tenido pareja hasta el momento pues, aún tienes 23 años, eres muy joven para vivir todo tipo de experiencias, tanto en el tema amoroso, como en todos los demás. Debes empezar por quererte, valorarte, confiar más en ti misma… pues todo esto ayudará a que las demás personas te vean también así.

Tú comentas que eres una persona tímida y que te cuesta entablar relaciones y actuar de una manera “normal” o cercana cuando te presentan a alguien. Esto no es algo que vayas a cambiar de la noche a la mañana, pero si tú realmente quieres que esto cambie, debes empezar a afrontar situaciones en las que no te sientes cómoda, como por ejemplo, intentar ser tú la que lleva el hilo de la conversación, ser tú la que se presente a otras personas o intentar hablar con gente fuera de tu círculo. En ocasiones no se pueden evitar esos “silencios incomodos”, pero cuando quieras romperlos, o mejor, no dejar que lleguen, debes plantearte tener siempre algún tema de conversación en el tintero, y eso es tan fácil como pensar en, ¿cómo soy? ¿Qué me gusta hacer? ¿En qué soy buena?… intenta, siempre que te sea posible, hablar de cosas que conoces, que a ti te hacen sentir cómoda, temas que tú conoces…así, además de tener conversación, la otra persona te conocerá más, tendrá más oportunidades de sacar otros temas de conversación a raíz de los tuyos y tú podrás valorar si tienen afinidad contigo, si os gustan las mismas cosas…y sobre todo, que al hablar de cosas que tú conoces, te sentirás más cómoda, más segura y eso se lo transmitirás a la otra persona.

En cuanto a que vives en un pueblo, sé que es más difícil por la mentalidad, cómo se puede comportar contigo el resto de personas… por no haber tantos recursos como en otras zonas menos rurales, pero si de verdad no quieres seguir saliendo por ahí, porque no te sientes cómoda, no puedes ser tu misma y tus amigos no quieren salir contigo por el ambiente, tienes varias opciones, por un lado, hablar con ellos y explicarles lo importante que es para ti todo esto, sobre todo al principio, convencerles para que al menos, una o dos veces al mes te acompañen a algún local en la ciudad que sea de ambiente; otra opción sería afrontar esto sola y salir por donde tú quieras, intentando vencer tus miedos y yendo poco a poco, hablando con la gente e intentando conocer nuevas amistades. Por último, como opción y no independiente, podrías buscar asociaciones, grupos en esa ciudad, a los que puedas unirte realizando alguna actividad que te guste o simplemente para conocer gente y poder salir por ahí. Utiliza internet como una herramienta para buscar grupos de personas que estén en la misma situación y quieran salir.

Tienes muchas posibilidades a tu alcance, así que deja el miedo a un lado, afronta tus miedos, comienza a dar pequeños pasos para alcanzar metas cercanas y así, paso a paso, conseguir todo lo que quieras. Mucho ánimo, espero tener noticias tuyas en breve para saber cómo estás avanzando y todos los cambios que estás haciendo. ¡Saludos!

Johana

Frase de la semana

Ser uno mismo es duro, no serlo, es una hipocresía…

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