Siempre me tembló mi mirada, si tenía cerca tu sonrisa, siempre te deseé incluso más que a mi misma, mi niña mimada, mi juego a escondidas, mi realidad que nunca quise ver, por tener miedo a la despedida.

Siempre fuiste tú, la única dueña de mis audios tontos en la madrugada, la verdad que siempre me negué, incluso ante mi misma!

Si el alcohol nublaba mi vida, en un descuido idiota, yo te buscaba y raras veces te encontraba

Siempre te deseé y ahora que te tengo cerca, intento no hacerlo, alejarme, alejarte pero si te veo, ¡todo vuelve!

Un día tonto por la mañana con sueño todavía en la mirada, mi vida se desordena si tu silueta lejana aparece ante mi, como una visión en medio de la nada.

A veces parece que no, pero en mis días sin miedo, me refugio en tu forma de tratarme, borde, sin cariño, todo es súper raro… Tan raro que parece una mentira que algún día te explotará en las manos…

Siempre hablas con la verdad, con los sentimientos, con el duro recuerdo de mi comportamiento…

Piensas que el tiempo es eterno, piensas que te esperare por encima del viento y mis miedos… pero algunos ratitos no lo creo, otros la eternidad se disfraza de un efímero aleteo… las mariposas vuelan a mi alrededor pero yo ya no las quiero.

En algún descuido tu vida parece que se desordena un poquito y me sueltas un: «Yo siempre pienso en ti», un «estoy asustada con todo lo que me está pasando»

Con tus palabras desordenas mi vida y me dejas todavía más perdida… No se si alejarte o lanzarme a ti como si fueras mi balsa salvavidas

Besarte y que tus labios me respondan todas las preguntas que te quise hacer algún día…

Siempre fuiste tú la primera en llegar a mi corazón, por más que yo me diga que no