El capítulo 2 de The Loyal Pin lo empezamos revolucionado. ¡Que alguien secuestre a la princesa Anin y que no se la lleven, por dios! Y a Pin, que ya sabemos que las dos vienen como pack.
Y es que, si en el capítulo anterior dejábamos a la princesa no queriéndose marchar. Hasta habla con su hermano mayor para decirle que no quiere, pero él indicándole que será por el bien de todos, que si lo pasará bien, que si será una buena experiencia para alguien tan inteligente como ella.
Si nosotras sabemos que es una buena experiencia, pero ¿no podía llevarse también a Pin?
Sea de la manera que sea, Anin se tiene que marchar y ya empieza hasta despedirse de Prik, que es básicamente el fandom. Esa mujer es el fandom en persona (como Nam lo es en la vida real, todo hay que decirlo, la verdad). Esta le dice que no se marche, pero Anin le promete que será poco tiempo y que quien deben de cuidar realmente es a Pin, que es la que peor lo lleva. Se van a quedar sin mangos con la manía de tallar de la chica (no sé por qué, pero este detalle, como alguien que ama los mangos, me hace mucha gracia).
El caso es que Pin, madre mía, es el drama personalizado. Anin ni se marchó, solo está con los preparativos; y Pin ya siente que se marchó a la guerra. El amor de esta chica por Anin es que no tiene límites. Es la que más está sufriendo con la partida de la princesa y es que ni se ha ido todavía… Aunque claro, cuando piensas que son siete años lo que se tiene que ir. Todas nos volvemos Prik en ese instante. Intentando cuidar de la enamorada de su princesa y al final, es Pin la que tiene que cuidar de ella cuando se derrumba.
Es que los momentos de Prik son oro puro. El momento de debajo de la cama, cuando Anin llega de la calle y la pilla llorando. (Permitidme que mande todo mi amor a Nam por darnos tremendos momentos, de verdad).
Pero volviendo a la trama, aquí todo el castillo en general está revuelto con la salida de Anin al extranjero. Desgraciadamente, Pin la que más y, sabiendo esto, Prik que allá va a contárselo a la princesa. ¿Qué hará esta? Pues ponerse de lo más romántico, claro está y allá que, con la ayuda de Prik, le prepara una comida para las dos solas. Bueno, las dos, con la compañía de Prik. Los fans siempre presentes.
Sin embargo, aunque le hace feliz toda aquella tremenda sorpresa; no es suficiente para Pin. No es que quiera más, la chica está en las nubes con aquel detalle, pero sí que termina confesándole a Anin que se va a sentir muy sola cuando no esté con ella. Pero, como Anin le prometió, ahora que estaba con ella, nunca más estaría sola. No la deja ni a sol ni a sombra. Cocina con ella, se preparan para el festival juntas, aunque Anin se lo pasa más jugando con Prik que otra cosa, pero bueno; lee con ella, Pin hasta la alimenta. (De verdad, ¿por qué todos estos momentos lo hacen Freen y Becky tan perfectos? ¡Qué química, señoras!). El momento de la fruta es que es muy bello.
Aunque para momento el del festival que se marcan.
Intentando de que nadie las vean, Pin y Anin terminan colocando su ofrenda en el festival en un lugar apartado, lo que hace que finalmente, tengan un momento de corazón a corazón las dos. Pin le confiesa que tiene miedo a lo que pasará todos estos años y Anin, como bien le prometió, le asegura escribirle todos los días, incluso estudiar más para que en vez de estar los siete años que dice que tiene que estar fuera, estar menos para que puedan volver a estar juntas las dos.
Si esto no es amor, ya no sé lo que es, la verdad.
Pero amor o no, Anin tiene que marcharse y nos toca llorar con la despedida de esta. Su madre llorando, Anin llorando, Pin llorando, el fandom llorando. Madre mía, ¿quién mandó tanta llorera de repente? Esperemos que estos siete años que esté fuera, duren poco. Mientras Pin tendrá las cartas de Anin.
Porque, lo prometido es deuda y, como ya le dijo, enseguida le manda cartas contándole su experiencia en Londres, como vive, como le va, cuando conoce a Emma. El careto de Pin cuando lee sobre Emma, es lo más. Pin ya se imaginó hasta que vuelo cogía para asegurarle a Emma de quien era la princesa. Pero como no puede elegir la violencia, elige echarla de menos. Le escribe de como le va, de la universidad como la empezó. Menos mal que no le escribe de todos los pretendientes que ya le buscan a Pin.
Primero la amiga de la universidad, que la quiere ligar con su hermano. Luego, el hermano de la misma princesa Anin, que quiere que conozca a un amigo de él. Vamos, que o viene Anin pronto o a esta chica le salen pretendientes de debajo de las piedras. Aunque ya sabemos que quien va a dar más guerra a Pin y a Anin, será Kuea, el amigo del hermano de Anin, quien tendrá que vérselas con Prik. Que no esté Anin, no significa que tengan libertad para estar con la mujer de Anin, Prik ya se asegura de eso. Toda esa escena es oro puro.
Y mientras que una es cortejada, Anin se encuentra en Londres, recibiendo la visita de su madre y su hermano, que le cuentan como van las cosas y que le preguntan para su regalo de graduación. Literalmente, cumplió su promesa de graduarse antes solo para estar con su amada Pin. Esto sí que es amor y lo demás tontería. Porque Anin ya tiene algo en mente y tiene que ver con Prik diciéndole que o vuelve, o le quitan aquí todo Dios a su querida. Si Mon era posesiva en Gap, Anin aquí es jugar al siguiente nivel.
Porque como descubrimos con Pin hablando con su tía, lo que está es haciendo construir un palacio para poder estar a solas… con Anin. Porque es otra promesa más que le dio a Pin y que está cumpliendo. Si es que cualquiera compite así por el amor de una persona. Anin es el estándar de cumplir lo que se promete, ayuda a ganar a la chica de tus sueños.
Solo hay que ver como le cambia el humor a Pin en el momento en el que se entera de que Anin vuelve a casa. Se acabó la espera, Anin y Pin vuelven a estar juntas.
Y es que si ganas tenía Pin de que su querida princesa volviera, más ganas teníamos nosotras de verlas juntas de nuevo. Porque FreenBecky son de las que alimentan estilo buffet las necesidades del fandom y esto solo acaba de empezar a ponerse de diez.
Nos vemos en el siguiente capítulo. Mientras tanto, ¿qué pensaron ustedes del capítulo?