Sense8: Resumen de episodio 1×12 – Nomi y Amanita

Ya llegó, ya está aquí el último capítulo de la primera temporada de Sense8. Agarraos que vienen curvas.

De pequeño Will ya tenía complejo de héroe y quería ayudar a salvar a Sara Patrell, una niña muerta de un caso que estaba investigando su padre y que Will veía constantemente tipo fantasma. Ahora está en el mismo plan de camino a Islandia para salvar a Riley, que en su limbo de drogas y dolor recuerda el accidente en el que murió su marido. Iban camino al hospital porque estaba de parto, el coche dio una vuelta de campana y la muchacha tuvo que parir dentro del coche sola, en plena tormenta de nieve, con su marido muerto al lado. Así de bien todo.

Nomi y Amanita también están listas y preparadas en su estación de hackeo casera para lo que pueda surgir, ya que a Riley se la están llevando los de la BPO. Nomi le consigue un coche a Will utilizando las tarjetas de crédito del doctor malvado. Lo que está sufriendo Riley en este momento no está escrito. De hecho, está alucinando colorines con su pasado y sigue viendo a la sensate islandesa, que le dice que ella sabe que hubiese dado la vida por su hija Luna y que ahora tiene su oportunidad. Así que vuelve en sí y coge la pistola de un guardia sin saber siquiera dónde está. Está zombie perdida. ¡Date vidilla, Will!

Están todos los sensates congregados e interconectados con ella, pero es Will el que tiene que visitarla y decirle que relaje la raja y no se rinda todavía. Wolfgang, por su parte, hace una visita a su tío a tiros. Es una escena muy loca, porque la mansión está plagada de mafiosos con armas, así que se tiene que resguardar en la cocina. Kala hace caso al consejo de Sun en el capítulo anterior y cogiendo productos de la cocina monta una bomba casera en menos que canta un gallo.

Así de fácil, con unos sprays, unos polvos y un cacho de tela como mecha. ¿Qué os parece, lesbicanarias? De Van Damme a MacGyver es esto. Se besan y Wolfgang después revienta el pasillo y va a buscar a su tío, a quien descarga un cargador entero de la pistola en la cara. Kala lo ve todo y sufren los dos, porque Wolfgang le dice que se case con Rajan, ya que a la vista está que no es bueno para ella. No, Wolfie, en el fondo tienes buen corazón. A ver si tus sensates te lo recuerdan más a menudo y te suben la autoestima.

Mientras tanto, los líderes del grupo (que son Will y Nomi, es obvio) siguen intentando llegar antes que Whispers, que va por encima de ellos en un helicóptero. Nomi le dice que pare el coche y haga no sé qué historia de romper el conducto de no sé qué. Bff… coches a mí. Resulta que fue idea de Amanita, porque dice que los hombres tienen un instinto primario con los coches, así que lo van a usar como distracción.

Además, ya le han preparado a Will una identificación de un empleado que está de vacaciones para que pase por seguridad. ¡Piensan en todo nuestras chicas! Eso sí, Amanita está un poco preocupada con eso de que Whispers al mirarte a los ojos te lea la mente porque ella lo vio, pero Will explica que eso es sólo entre sensates.

Will: Está a salvo.

Nomi: Excepto por el hecho de que un hombre que usa zombies para asesinar a gente sabe quién es, la policía la está buscando, puede ir presa 20 años por usar este equipo informático… Y todo eso mientras ayuda a su amante fugitiva. ¿A eso te refieres con “a salvo”?

Amanita: No pasa nada, Nom.

Will: La amas muchísimo.

Amanita: En lo que a mí respecta, la seguridad siempre ha estado muy sobrevalorada.

Y como siempre Amanita molando más que todo el mundo, a pesar de ponerse a sí misma en peligro. Y Will dándose cuenta de lo mucho que se quieren y mirándolas como las miramos nosotras, como pensando “qué lindas son”. ¡Te entendemos, Will!

Total, el coche llega echando humo por todos lados y eso distrae a los seguratas. Will entra gracias a las indicaciones de Nomi, que siempre va a su lado porque es la inteligente del equipo (con ayuda de Amanita, claro). Pero no saben dónde tienen recluida a Riley, así que esta vez entra Lito en acción.

Will: ¿Te conozco?

Lito: Sí, tuvimos sexo.

Will: Woooow… Ehhh… Eso fue…

Lito: Muy especial.

Will: ¡Ey! Ahhh…

Nomi: Tenemos prisa, amigos.

 

¡Buenísima escena! La incomodidad de Will es evidente, porque Lito se está cachondeando en su cara y él no sabe qué decir. Pero os recuerdo que tuvisteis ñiqui-ñaca sensate todos con todos. Incluida Nomi, que de hecho está ahí también, pero es demasiado racional para andarse cono tonterías. ¡Ella está a lo que está! Y tiene que ser la que les recuerde que Riley está a punto de ser lobotomizada y eso. ¡Prioridades, amigos!

Gracias a Lito, que se camela a una empleada, descubren el número de habitación de Riley. El problema es que la tienen custodiada con cuatro guardias. ¿Pero qué son cuatro guardias para Sun Bak? Así que aparece en plan “¿Cuatro guardias? Eso es lo que desayuno yo todas las mañanas. Pan comido. Dejádmelos a mí, niños”.

Will y Riley se reencuentran y Will la toma en brazos rollo Oficial y Caballero. Nomi le dice que tienen que despertarla, porque no la pueden llevar así tipo peso muerto con todo el sitio plagado de guardias. Es blanco fácil. Pero tranquilos, que si Kala sabe hacer bombas con especias de cocina, también sabe preparar un chutazo y reanimarla. Lo malo es que cuando están intentando escapar, Whispers aparece y mira a Will a los ojos. ¡La cagaron!

De un modo u otro, llegan a la salida y se suben a una ambulancia, pero las llaves no están por ningún lado. Eso no es problema para Capheus, obviamente. Lo que sí es un problema es que Whispers ya los sigue en un helicóptero, gracias al GPS sensate que consiguió mirando a Will a los ojos. ¡No intentéis entenderlo! Ja, pero para algo está ahí Amanita.

Amanita: Los helicópteros hacen vuelo visual. No vuelan con mal clima y el clima cambia drásticamente con la altitud. Para perderlos, sólo hace falta que vayan hacia aquí.

Nomi: Oh, dios mío. ¡Te amo!

 

Tú y todas nosotras, Nomi. Tú y todas nosotras. Will hace caso y toma un desvío. ¿A dónde lleva ese desvío? A las montañas. ¿Y qué pasó en esas montañas? ¡Exacto! Riley perdió a su marido y a su bebecita recién nacida, y casi muere ella también. Qué casualidad. Antes de nada, eso sí, tienen que llegar a la zona de nubes, pero el helicóptero se les pone delante en plan “a atrancar las caaaalles, que no pase naaaadie”. A partir de aquí Wolfgang toma el mando en plan suicida y casi choca con el helicóptero, pero consigue entrar en la zona de nubes y los pierden de vista.

Imaginaos cómo está Riley en este momento, que incluso vuelve a sentir los síntomas del parto como si lo reviviese. De repente a Nomi casi le da un vahído porque pierde el contacto con ellos, no responden, no los puede visitar… No sé, deben de estar en un círculo recordatorio de Riley chungo.

El coche derrapa y Riley escapa corriendo, se sienta en el mismo sitio en el que casi pierde a su hija… Está fatal. ¡Riley está fatal! A Will se le ocurre que lo mejor para que no los encuentren es meterse otro chutazo y dormirse, ya que de esa manera Whispers no los podría localizar. En esta serie arreglan demasiadas cosas con las drogas, sólo digo eso…

Todo queda en manos de Riley, que sigue recordando a su hija y que no puede dejarla, dice. Will sabe todo lo que está sufriendo porque puede sentir lo mismo que ella. Le dice todo lo que la quiere para darle ánimos. Ya puedes cuidar bien a la niña en el futuro, Will, que se lo merece tela.

La siguiente imagen ya es en un barco del colegui de Riley, que no sabe de qué está yendo el rollo, pero se lo deja igual para que escapen. Riley al final levantó el culo de la nieve y los salvó a todos. ¡Bien esa Riley heroína! Pero para que no los encuentren, Will tiene que estar inconsciente todo el rato, así que a ver ahora cómo apañan esto. De momento tienen drogas y están perdidos en el medio del océano.

En realidad físicamente sólo van en el barco Riley y Will, pero como podéis ver sus sensates están con ellos “sensateamente”. Lo realmente bonito ha sido ver como todos se han unido y han compartido sus habilidades para salvar a Riley, que es como el corazón del grupo. Majos todos. Así que final feliz… De momento. Imaginamos que en la segunda temporada seguirán huyendo de cosas y seguiremos viendo quererse fuerte a Nomi y Amanita. ¡Ya estoy ansiosa! Nomanita rules.