¡Ahoy mis queridas piratas lesbicanarias! La arena se sigue moviendo en Black Sails y no hay paz para nuestras protagonistas. La última vez que hablamos, Max y Anne decidieron romper por el bien de sus pueblos (oh wait… serie equivocada) y Eleanor iba de camino a la isla de sus amores a reconquistar su tierra ¿Se reencontrarán Max y Eleanor. ¿Listas para la acción? ¡Pues allá vamos!

Eleanor pisa Nassau

Nuestro episodio comienza con Eleanor y Woodes asentándose en la casa que una vez fuera patrimonio de la familia de ella. Eleanor le cuenta que, cuando se fueron al interior los traficantes de Opio se la quedaron y todos saben que después fue el lugar de Reunión de Rakham, Vane y Max. Él sonríe y dice que espera poder encajar en esa lista, así que ella le recuerda que antes que ellos también hubo una larga lista de gobernadores, pero a Woodes le da más miedito encajar con ellos. Con esa declaración le saca una sonrisa a Eleanor que claramente empieza a confiar cada vez más en él.

Max en la taberna

Tú tienes de pirata histórico lo que yo de hetero

Mientras tanto, en la taberna, Max entorna los ojos a la platica de Featherstone que está muy preocupado porque a diferencia de Jack y Anne decidió pedir el perdón y ahora lo tiene, pero en su mente cree que toda su reputación como pirata quedará olvidada en los anales de la historia. Lo cierto es que tenía razón para preocuparse, pero no por el perdón sino porque las ideas y la acción la pusieron otros, pero bueno…

El caso es que Max está ahí ocupada en esos menesteres cuando de repente:

Reencuentro Max y Eleanor 1

Reencuentro Max y Eleanor 2

¡Sí señoras! El reencuentro que estábamos esperando se produce, porque Eleanor entra en la taberna acompañada por el sol y un ejercito detrás y a Max se le detiene el universo en ese instante. Sus ojos se encuentran en cámara lenta y ambas intentan hacer como que no pasa nada pero se están quemando por dentro ¡y nosotras lo vemos en sus ojos!

Claro que siendo las mujeres cerebrales que son, mientras sus corazón hace chiribitas, sus mentes están dándoles la tabarra con las posibilidades.

Max y Eleanor hablan

Una plática como la que se avecina, por supuesto no puede darse en público, así que las dos se marchan a la que una vez fue la oficina de Eleanor, los papeles han cambiado, pero de alguna manera u otra, siempre terminan las dos con la arena de Nassau lamiéndoles las plantas y sus ojos mirándose de frente.

Max empieza la conversación diciéndole a Eleanor que cuando no se supo más sobre su juicio, pensó que la habían matado sin testigos o le habían perdonado la vida pero encarcelado para siempre.

Max: Supongo que debí haber previsto esto. Que de alguna manera, tu control sobre este lugar es tan fuerte que no puede negarlo ni un rey, sus leyes o ni si quiera tu muerte.
Eleanor: En invierno el sol entra por esas ventanas. Te cegará ahí a menos que las cierres durante todo el día. Tenía mi escritorio donde estaba por una razón, pero supongo que aún no has estado aquí el tiempo suficiente para saber como sentarte en esa silla.

¡Uh! La cosa empieza dura, con las dos reconociendo a la oponente y no precisamente en un cuerpo a cuerpo, como nos gustaría a todas nosotras. Se están midiendo y las dos quieren dejar en claro cual es su posición y que no se van a mover un ápice.

Eleanor-le-hace-una-propuesta-a-Max

Eleanor empieza por proponer, porque alguna tenía que empezar, así que le dice que Woodes va a crear una especie de consejo de gobierno compuesto por seis personas de su confianza y otras seis de Nassau. Lo hace para mostrar buena voluntad a la gente de la isla, para que todos sepan que su voz será escuchada y tanto Eleanor como él desean que Max le de el visto bueno.

La morena, que es muy inteligente le hace ver a Eleanor que no le ha propuesto formar parte del consejo y la rubia le responde que lo siente muchísimo, pero que no puede serlo por haber sido una pirata. Permítanme que me ría un rato junto con Max, porque que Eleanor le diga eso es para reírse un rato.

Max: Lo que he hecho palidece en comparación de lo que has hecho tú antes de mí.
Eleanor: ¡Y perdí todo por esa razón! Lo perdí todo… recuerda eso cuando te sientes en esa silla.

¡Dios este momento fue gloria para mí! Porque sí, hay política en la parte superior, pero en el fondo es Eleanor diciéndole a Max que está cometiendo los mismos errores que ella, recordándole que lo perdió todo y la segunda vez que lo repite la mira a los ojos y es imposible no darse cuenta de que está hablando de ella.

Max intenta recomponerse y llevar la negociación a sitios más seguros recordándole a Eleanor que, si ella se niega a reconocer ese consejo, la calle no lo aceptará. Eleanor lo entiende perfectamente, pero también le hace ver a Max que, si no lo acepta, se estará fojando un poderoso enemigo y le pide que sea lista antes de girarse para marcharse.

Max y Eleanor conectando

Eleanor está a punto de salir por la puerta cuando Max le hace la pregunta que nos hace ver a todas lo mucho que aún le importa.

Max: ¿Yo estaba en esa lista? Esa noche, antes de que te secuestraran, cuando hiciste la lista de aquellos que querías ver muertos… El señor Stayton, el señor Atz, el señor Featherstone, Jack, Anne… ¿Estaba yo en esa lista?
Eleanor: No… La noche que me secuestraron ¿le informaste a Hornigol dónde podía encontrarme?
Max: No.

Eleanor mira a Max una última vez con cara de acordarse una vez más de ese maldito momento en el que apostó por la isla en lugar de por ella y sale pitando del lugar. Y yo solo puedo decir señoras que ¡Maxanor está de vuelta! Es increíble para mí como en un solo episodio te pueden recordar tantas cosas. ¡Es que estas dos en una escena de un minuto en un cuarto peleadas tienen toda la química que no han podido acumular Callie y Penny en toda la temporada!

Max-hace-una-propuesta

Lo siguiente que vemos es a Max hacer su jugada, porque si hay algo que tenemos claro es que la morena no tiene un pelo de tonta y siempre tiene un plan. Max se presenta en la casa de Woodes para proponerle que la acepte en el consejo. Así dicho parece tonto, pero Max tiene mucho que ofrecer, muchísimo, en forma de dinero que se ha quedado por su parte del robo al tesoro de España

Eleanor-mira-a-Max-de-reojo

Max le dice a Woodes, que España no sabe que ella tiene ese dinero y que, si ambos consiguen ser amigos, ella se encargará a base de pagar, de que tenga éxito dentro de la isla. Vamos, que se convertirá en su patrocinadora y todos sabemos que el hombre anda un poco escaso de plata, así que parece una propuesta muy difícil de rechazar.

Esta mujer shipea Maxanor fijo

Esta mujer shipea Maxanor fijo

Más adelante vemos a Woodes hablar con Eleanor, él piensa que este dinero que Max le está entregando puede ser el golpe de suerte que estaba esperando, ese que siempre aparece cuando consigues un gran éxito. Y ya de paso le cuenta la historia de como consiguió la cicatriz que tiene en la cara. Eleanor le acaricia la cicatriz y lo besa y yo no sé si es porque realmente él la ha encantado, si es porque se siente sola, si es porque ha visto a Max, pero el caso es que tampoco podemos averiguarlo porque la mujer que siempre los acompaña entra a interrumpir.

Lo hace para confesar que es una espía de los españoles (y porque está hasta las trancas por él, se ve a lo lejos) y que los españoles saben que el dinero que tiene Max es de su tesoro y lo quieren completito. Le avisa en cierta manera que, si lo acepta se echa a España encima y es lo peor que podría pasarle. Él acepta entregarlo completo y olvidarse del asunto, pero ella le dice que lo que hay en la mesa es solo la mitad. Y es que no podemos olvidar que Jack y Anne se han llevado la otra parte.

Jack-y-Anne-huyendo

Y hablando de los reyes de Roma, Anne y Jack están listos para partir, a unos kilómetros de lo que será el principio de su nueva vida. ¿Pero alguna vez ha habido algo fácil en esta serie? ¡Nos castigan! La cosa es que Jack sabe que, para poder sobrevivir necesitan cambiarse el nombre y él ya lo ha perdido todo, así que no quiere perder también eso. No quiere dejar de ser Jack Rackham.

OMG! ¡Que fui yo la que cortó con la novia!

OMG! ¡Que fui yo la que cortó con la novia!

Anne le hace ver que han ganado el juego, que la fortuna está de su parte y son libres, pero como ya sabemos, para él es importante su legado, así que decide que volverá a la taberna para pedir su perdón y poder seguir siendo Jack Rackham. Anne lo ve con cara de «madre mía que cruz tengo que aguantar», pero lo deja marcharse con la promesa de que volverá antes del anochecer y se marcharán.

Claro que ahora, con lo que sabemos que sabe Woodes, no tenemos nada claro que eso vaya a suceder. ¡Y así señoras termina este episodio de Black Sails! Yo tiemblo por lo que puede pasar. Por un lado Max está en peligro total otra vez y una vez más se interpone en el camino para la felicidad de Eleanor. Y esto nos indica que puede pasar algo que puede llevarnos a la felicidad lesbicanaria o hundirnos en la miseria.

Lo primero es que Eleanor vuelva a elegir sus planes para la isla y se ponga del lado de Woodes, que obviamente tendrá que utilizar a Max para saber donde está el resto del dinero. La segunda opción es que Eleanor decida actuar con el corazón y no con la cabeza y se ponga del lado de Max, con lo que las dos estarán en peligro. Todo esto mientras que Anne en algún momento tendrá que regresar a sacarle las castañas del fuego a Jack. ¡Miedo! ¿Cómo han visto el episodio lesbicanarias?