En el episodio pasado de Anatomía de Grey, fuimos muy felices porque Callie y Arizona tuvieron un par de escenas juntas. Y aunque su acercamiento no fue nada romántico, sino más bien amistoso, ya fue como un buen sorbo de agua para estas sedientas mujeres caminando por el desierto que últimamente es la relación de CalZona. Como dirían por ahí aceptamos pulpo como animal de compañía. ¿Listas para ver que se coció en el último episodio de la serie? ¡Pues vamos allá!
Nuestro episodio comienza con un terremoto. No señoras, para variar no es uno emocional, es que realmente la tierra se ha movido en Seattle. A mí todo este asunto me asombró tanto como a Maggie, porque no tenía ni idea de que en esa ciudad había temblores. Tachadita de mis posibles ciudades a vivir en un futuro.
El caso es que tanto Callie como Maggie atienden la urgencia de una señora que se ha roto la cadera. Hasta aquí todo bastante normal, lo divertido está en el como, porque resulta que la señora tiene una vida sexual muy activa y no le da la más mínima pena explicarlo con todo lujo de detalles. Yo en esta escena me reí mucho. Primero por lo que les estoy comentando, pero segundo porque la actriz que hace de la mujer es la misma que era la abuela de las Embrujadas, así que en mi mente sus dos personajes se fundieron y la trama fue aún más divertida. ¿Qué dirían Prue, Piper, Phoebe y Paige si se enteraran de las chocoaventuras de su abuela?
El caso es que nuestra querida abuela (así la llamaremos a partir de este momento), no está tan preocupada de sus huesos rotos como de la posibilidad de no poder volver a ejecutar las variadas posturas del Kamasutra que estaba llevando a cabo cuando le ocurrió el accidente. Maggie y Callie no saben qué hacer, si sentir envidia cochina, morirse de la risa o salir corriendo. Pero igual Callie sale de ahí con una misión vital ¡conseguir que esta mujer vuelva a tener sexo!
Solo espero que se concentre igual que Amelia en el episodio pasado, porque insisto que la pose de superheroína es genial y debe quedarse para la posteridad antes de cada operación.
Puede que si parpadearan se lo hayan perdido lesbicanarias, pero Arizona salió en el episodio. Una milésima de segundo… buen vale un minuto y un poquito más, pero por lo menos estuvo. Gracias a ella nos enteramos de que la doctora Herman se recupera favorablemente en una clínica especializada donde le están enseñando a manejarse con su ceguera.
Y ya está, eso fue todo amigas, solo lo perdono porque los últimos episodios Arizona ha salido muchísimo y hemos podido disfrutarla a tope, así que de vez en cuando está bien que nos enteremos de qué pasa en la vida de otros doctores.
Volvemos con la abuela a la que Callie está muy contenta de informarle que le hará un reemplazo total de la cadera que la dejará totalmente flexible. Una noticia que deja a la mujer muy pero que muy contenta, sobre todo después de que la morena le asegure que podrá alcanzar ciertas posiciones XD. La única que no sonríe es Maggie, porque está preocupada por su corazón. No, no porque piense que su corazón pueda resultar roto por tanto sexo señoras, sino porque la mujer tiene el corazón frágil y una operación como la que comenta Callie podría poner en peligro su vida.
La señora dice que a ella le vale madre, que quiere su cadera nueva para poder seguir viviendo su vida loca. Ella ya conoció el amor, lo tuvo durante 40 años con su marido que en paz descansa. Ahora está por la labor de conocer el sexo, de manera extensiva y repetidamente.
Una vez salen del cuarto, Maggie le dice a Callie que tendría que haber consultado con ella sobre la operación antes de presentársela a la paciente. La morena le dice que la señora quiere una vida completa y saludable y que la prótesis que ha elegido le servirá perfectamente para realizar todas las actividades que requiere. Maggie le responde que no vale la pena arriesgar la vida por intentar nuevas posiciones sexuales, pero Callie no está de acuerdo. La mujer quiere vivir y ella quiere darle vida a base de una cadera nueva que mover. Igual los ojitos de Maggie de perrito triste la convencen y promete echarle otra ojeada a las radiografías para ver si encuentra un método mejor.
Callie y Maggie ponen manos a la obra, o mejor dicho, ojos en las radiografías y efectivamente, encuentran un método menos invasivo de conseguir que la mujer pueda volver a darlo todo en la cama. Todo esto mientras Callie se quedaba con la movida de que Ethan, el radiólogo, le está tirando los tejos a Maggie.
Ya en la operación, Callie pica un poco a Maggie para que le cuente sus chocoaventuras con Ethan, pero ella de inmediato le dice que no es su tipo por aquello de que es radiólogo. Callie la mira como ¿ein? ¿y eso qué? Y Maggie intenta explicarse pero se lía cada vez más, así que Callie termina riéndose y picándola como si hubiese entendido que no sale con él porque «es menos que ella».
Maggie se queda traumada de que Callie tenga ese concepto de ella, así que cuando termina la cirugía se acerca a explicarle mejor lo que pasa. Resulta que, siempre que ha salido con un chico las cosas se han torcido. Primero pensaba que era por su juventud, pero con el tiempo se ha dado cuenta de que es simplemente ella. Hay un abismo raro y ella está en un lado y ellos en el otro y no hay manera de que se unan. Así que tiene flojera de empezar algo nuevo que terminará igual.
Maggie querida, te he escuchado y he pensado: «wow, así me sentía yo cuando salía con chicos» XD. ¡Bienvenida al mundo lesbicanario!
No, ya en serio, menos mal que Callie es a la que le toca dar consejo en esta ocasión, porque yo para estas cosas tengo lentes muy lesbicanarios. El caso es que la morena le dice que todo su discurso del abismo es muy bonito pero en esencia el abismo es más bien puro miedo de su corazón. Así que necesita abandonarlo por ahí y volver a vivir, preferentemente en este año. Luego procede a soltarle un montón de eufemismos del estilo «cogerte los cocos» XD pero mi favorita fue «Poke your hontas» que suena igual que Pocahontas pero significa algo muy diferente XD.
Teehee!Cant believe they kept it! @KMcCrearyNYC: ad-libbing the end of post-surgery scene had me& the crew on the floor! #greysanatomy #tgit— Sara Ramirez (@SaraRamirez) marzo 13, 2015
Por cierto, dato friki del día, gracias a Kelly McCreary que hace de Maggie en la serie, nos hemos enterado de que todos esos eufemismos fueron una improvisación de Sara Ramirez que la producción decidió dejar en la edición final. ¡Que grande es!
Y así terminamos el episodio señoras. Este ha sido un poco de relleno, pero se cambios. Como hay gente a la que no le gusta spoilearse no hablaremos en este post del adelanto del 11×16. Pero no se preocupen, que mañana crearé un post específico para que podamos comentarlo como se merece. ¡Porque tela marinera!
Creí que no iba a seguir interesada en Grey’s, una vez que Christina se vaya. Y sí, se necesitaron 3 personajes para reemplazarla, pero funciona re bien igual. La super-heroína (jajajaja, pura coincidencia) Amelia es genial, y no es en nada parecida a Derek, ella es «THE» Shepherd en mi opinión y me encanta. Al igual que Maggie, es rara pero graciosa. Ni hablar de Nicole Harper.. Fue la protagonista de la mejor cirugía que vimos en el Seattle Grace y nos dio una historia excelente con Arizona, para reír, llorar, etc. Me gusta un montón esta temporada, están volviendo a la magia de la medicina, y es lo que siempre la hizo una serie tan genial. …..
«Poke your hontas» Jajajajajaja.