La semana pasada todas sufrimos un estado generalizado de depresión después de que Laura y Carmilla hablaran y nos dejaran con el corazón roto. Porque estas dos se aman con todo su ser, pero sus diferencias les impiden estar juntas y por lo tanto nos dejan sin nuestras dosis de Hollstein necesarias para vivir.
Esta semana comenzamos observando el día a día de Carmilla, JP y Mattie en el encierro. Y es que eso de tener 3 vampiros en una casa sin poder salir no es que sea un campamento. Eso sí, les sorprenderá saber que los tres son muy fans de Orange Is The New Black. Me pregunto si serán team Alex o team Stella. Pero mientras ellos ven maratones interminables de televisión, se pelean por los litros de sangre que les puede conseguir LaFontaine y Carmilla intenta no coquetearle a Laura cuando todo su cuerpo se lo pide la vida sigue pasando.
Y hablando de la vida, ¿se acuerdan de que Laura está estudiando? Pues yo tampoco me acordaba y aparentemente se le está juntando el trabajo con todo esto de salvar al mundo, así que la mujer está intentando concentrarse sin mucho éxito porque Carmilla y Mattie (estoy segura de que JP se comporta) no dejan de darle golpes al piso para ver si ya los dejan salir.
Y justo estaba renegando cuando aparece Danny con una caja de manzanas. Y es que aparentemente, ahora que está más sola que la una, Danny se vio la primera temporada completa de OUAT y quiere atacar a Laura al estilo Regina. Pero algo me dice que la «fruta prohibida» que Danny tenía en mente era otra.
En fin, que Laura está feliz como lombriz porque con toda la guerra entre el nuevo jefazo de Sylas y los vampiros, la comida natural escasea y ya sabemos que a nuestra chica le van las frutas. Porque vale que le guste la comida chatarra, pero todo con medida.
Volviendo a Danny, la pobre se ha pasado básicamente porque ya no tiene un lugar en este mundo. Y es que traicionó a sus hermanas SS con lo que ahí ya no la quieren. Podría ir con los Zetas pero ahí está Kirsh y aunque Danny lo aprecia casi que lo quiere a tres metros. Así que solo le queda Laura, que tampoco es que sea la mejor opción ahora que vive con su ex novia, pero así es el amor.
Danny: De verdad pensé que estábamos mejorando las cosas. Y odio que esta situación haya hecho que las cosas vuelvan a ser incómodas entre nosotras.
Laura: ¡Yo no me siento incómoda!
Danny: ¿En serio?
Laura: ¡Defendiste lo que creías correcto! ¿Creíste que eso haría que no me cayeras bien?
Danny: Cuando lo pones así…
Danny y Laura se miran peligrosamente cerca y la química vuelve a fluir por nuestras pantallas y no voy a mentirles ¡que ganas tengo de que estas dos se besen! No sé cuanto quiero que dure, pero aunque las masas me odien yo confieso que si quiero algo de Hollence (Rogue se esconde debajo con Carmilla y Mattie… Oh wait… mal movimiento…)
Pero ¿saben quién más estaba ahí lista para interrumpir el momento? ¡Carmilla! Que convenientemente decide que ese es el mejor momento para volver a hacer ruido.
Danny: ¿Cómo vas con eso por cierto?
Laura: ¿Te refieres a la amenaza constante de desangramiento o a vivir con mi ex? ¡Ambas muy divertidas!
Pobre Laura, no tiene un respiro en el universo. En fin que Danny se preocupa pero Laura le responde que tiene un plan secreto de contingencia y en eso entra LaFontaine corriendo porque están separando a los protestantes del pez y eso los está matando. ¡Mal rollito!
Laura, Perry, Danny y LaFontaine están discutiendo sobre las últimas noticias y es que las primeras tres no están del todo seguras de que los nuevos acontecimientos puedan ser clasificados como algo negativo pero para LaFonteine, que recordemos también estuvo durante un tiempo con el lavado de cerebro del pez, cree que es y cito: «Meditación. Escuchar sus mentes en armonía alivia el sufrimiento constante de de Lophii».
Pero lo realmente importante e igualmente espeluznante, es que cuando se los llevaban, les empezaron a dar ataques como si los estuvieran matando y gritaban sobre las «siete puertas y el hombre muerto de las sombras». Y si eso no diera ya suficiente miedo, luego agregaron que todos eramos «comida para cuervos». ¡Mal rollito!
En fin que las chicas necesitan respuestas. De Mattie y Vordenberg no las van a obtener, así que deciden tratar por el eslabón débil de la cadena aka Kirsh.
Danny interroga a Kirsh en buen plan intentando sacarle información, pero me temo que nuestro pequeño saltamones del amor no sabe nada de nada. Y en estas están cuando entra Theo totalmente enfadado porque considera un movimiento bajo el que Danny se aproveche del enamoramiento de su hermano Zeta para sacarle información.
Theo le hace entender a Kirsh que Danny se está aprovechando, pero a él no parece importarle porque es más bueno que el pan. ¡Pequeño! Igual Theo se lo lleva a rastras del lugar porque a él sí que le importa que su compi les revele información relevante.
Cuando se quedan solas, Danny le pregunta a Laura si cree que realmente ha usado a Kirsh y ella le responde que un poquito sí. Algo que no le hace mucha gracia a Danny porque piensa que hacerle daño a Kirsh es como golpear a un Golden Retriever. Y casi que esta situación podría hacer reflexionar a Laura que más de alguna vez ha dejado que alguien «enamorado de ella» lo de todo por salvarla. Y no lo digo solo por Danny…
En fin que, dado que siguen sin saber nada, deciden atacar al equipo vampirico… oh boy…
El plan de Laura es dejar a JP, Carmilla y Mattie sin comida hasta que la última suelte la sopa. Que alguien le explique a Laura por favor que los vampiros no llevan muy bien eso de estar sin comida y son super fuertes por favor…
En fin Mattie insiste en que ella no sabe nada de nada, Laura no le cree, JP se va poniendo cada vez más nervios y Carmilla está nefasta porque esta es la segunda vez que su ex novia la pone a dieta forzada. Al final las negociaciones se rompen cuando un JP que es más joven en esto de ser vampiro y tiene menos experiencia controlándose, se lanza a por la sangre que tiene LaFontaine. ¡Agh! A ver si no nos la mata. ¡Y aquí termina Carmilla esta semana señoras! ¿Cómo lo vieron?
A mí no me gustaría que Laura y Danny se besaran porque sería completamente incongruente. En un episodio no puedes decir que echas de menos a tu ex de una manera tan intensa como dijo Laura, para dos episodios más tarde darte un beso con otra, por muy atractiva y cariñosa que sea. De todas formas, los guiones los escriben otros y yo solamente puedo disfrutar de una serie que, de momento, sigue siendo muy interesante. Yo estoy con Carmilla hasta el fin. Y si Laura se besa con Danny, al menos Carmilla que se bese con Perry !!!
Antes estaba más q segura del amor de Laura por Carmilla, pero con cada episodio lo pongo más en duda y no me gustaría ver a estas dos ahi… No ya es mucho el sufrimiento y más si chequean el twitter de Carmilla