Bienvenidas a otro resumen de The L Word: Generation Q. Esa serie en la que cuando por fin decides que ya no quieres serle infiel a tu novia y se lo dices a tu amante, te pillan con las manos en la masa. ¡Mala suerte Shane!
Y hablando de Shane, empezamos el episodio con ella hablando con Alice porque las dos han quedado de ver una película. Ellas dos solas, sin Taylor, porque la mujer tiene que trabajar. Alice le recuerda que hay que ir tempranito porque a ella le gusta ver los trailers con calma, ya cómodamente sentada en su butaca y comiendo palomitas. Nada de llegar cuando ya empiezan los créditos de la película. Shane promete llegar puntual pero luego tiene que colgarle porque justo en ese momento llega Tess y las cosas entre ellas, como es lógico, están más tensas que la cuerda que estiraban los equipos en «ese episodio de El Juego del Calamar».
Shane intenta hablar con ella comentándole unas cosas que hizo para su madre, pero Tess esquiva la conversación como si de una ninja esquivando patadas se tratara. Al menos hasta que llega la tercera en discordia. No, no es Ivy, es una abeja que pasaba por ahí y ha decidido posarse a su lado.
Yo no lo sabía, pero Tess le tiene pánico a las abejas, así que quiere que Shane la atrape pero sin matarla porque los animales tienen derecho a vivir. Shane consigue atraparla en un vaso y le pide a Tess que le abra balcón para lanzarla por ahí y en esas están las dos cuando se les cierra la puerta del balcón y se quedan encerrada. ¡Pesadilla en la calle del infierno!
Viendo que ya no hay salida o salvación, Tess decide que toca hablar del tema que lleva esquivando todo este tiempo.
Angie está en su cuarto procrastinando alegremente en su cama cuando le llega un mensaje de su novio diciéndole que le gustaría que se fueran juntos de viaje a algún lugar bonito. No le da tiempo a contestar porque en ese momento llega su compañera de piso con una urgencia de las grandes. Se ha acostado con un chico y en la emoción de la acción se le ha quedado un condón metido dentro en salva sea la parte. ¡Habrá que sacarlo!
Cambiamos de escenario hasta centrarnos en Finley y Sophie que están volviendo a hablar sobre el encuentro cercano del tercer tipo que Sophie tuvo con otra persona. Finley pregunta por qué y Sophie le responde que se sentía sola. Finley quiere saber como se llama y si era una persona atractiva. Sophie responde que Dre y no le calificaría con ese adjetivo, de hecho solo tuvieron sexo una vez.
Finley y yo nos quedamos un poco confundidas porque hace medio segundo Maribel había dicho que Sophie y Dre se la pasaban fornicando. Pero Sophie insiste en que fue solo una vez, eso sí, quedaron otra vez para salir. Finley le pregunta entonces porqué no se lo contó y Sophie le dice que temía que al contárselo ella recayera. Y parece que la conversación funciona porque Finley se queda más tranquila.
Giro de 180 grados para dirigir nuestra mirada hacia Micah que acaba de contarle a su madre que sale con Maribel y no hubo ningún drama. Podemos quedarnos tranquilas con eso. Maribel propone celebrar organizando los tuppers y Micah se apunta y propone que hagan un dos por uno y se dediquen a buscar donante de esperma al mismo tiempo.
Tess también quiere saber por qué le puso Shane los cuernos que adornan su cabeza, pero la mujer no sabe/no contesta. Tess le dice que ya que están encerradas y tienen muchísimo tiempo libre se puede poner a pensarlo.
Y mientras Shane hace examen de conciencia, Angie está analizando Google para tratar de encontrar soluciones para Bella. Dice San Google que te pongas en posición de ponerte un tampón y explores el territorio hasta dar con el objeto perdido. Así que Bella intenta adentrarse en la jungla pero y cito: «todo está muy resbaloso» así que no lo puede sacar y le ruega a Angie que le eche una manita, literalmente.
Mientras tanto Dani está escuchando un mensaje de Roxy que le informa que ya está en Costa Rica, pero dispuesta a volver cuando el corazón de Dani sane sus tristezas. Tan concentrada estaba recordando su casi momento de sexo con Roxy que no se da cuenta que una persona va en patinete a toda velocidad y está a punto de llevársela de corbata, pero una persona le salva un segundo antes como en esas películas románticas de toda la vida.
De hecho Dre, que así se llama, le dice que siente que debería besarla como indican todos los buenos guiones. Y Dani, que es más de acción que de palabra procede a hacer exactamente eso. Una escena que tuve que ver después de haber pasado la imagen por Photoshop porque ¡alguien sigue empeñado en no iluminar bien a las parejas cuando se besan!
Otras que están también muy amorosas son Finley y Sophie, porque después de la plática todo va a pedir de boca. De hecho, Finley le propone a su chica que se vean dentro de unos minutos en las oficinas para que le haga una inspección profunda. Me hace gracia porque Finley se supone que trabaja en el bar, pero siempre está ahí haciéndose pato, no sé yo si le sale a cuento el sueldo a Shane y Tess.
En ese momento entra Dani y le cuenta a Sophie que acaba de conocer a una persona genial y le ha besado. Sophie le echa porras y le dice que: «Tenemos que besar a todas las chicas que queremos besar»
Dani le da detalles, por un segundo fue J.Lo en Sucedió en Manhattan, pero en lugar de quedarse atorada con un tacón en medio de la calle, fue salvada de un inminente atropello por patinete que es más de esta generación. Así que las dos se quedan hablando de lo mucho que les gusta la película
Alice por su parte está ya en el cine esperando a Shane que no llega. La pobre está intentando acomodarse con dos botes gigantescos de palomitas cuando de repente, ve a Taylor con otra chica en la parte de adelante. Sí, la misma Taylor que le dijo que no podía ir porque tenía que ir a trabajar. WTF!
La rubia le pide consejo a la vecina de butaca y sí, ella también tiene claro que hay cuernos de por medio. ¡NO!
Cambiamos de escenario para volver al triste balcón de la ruptura en donde Tess y Shane siguen platicando. Shane intenta explicarle que para ella el sexo no tuvo ningún significado. No es lo que le dijo a Ivy pero ¿quién soy yo para meterme en medio de esta maraña de relación? Tess le pregunta si le está proponiendo que abran su relación de manera ética. Y para mi sorpresa Shane le responde que no porque eso nos es para nada lo que quiere.
¿Alguien me lo explica? ¿Qué demonios quiere Shane? ¿Una relación monógama en la que ella pueda poner los cuernos y la otra persona la perdone constantemente? ¿Cuál es el plan aquí? No entiendo a esta Shane la verdad.
Tess se queda igual en pesca como yo y le pregunta si entonces es que es adicta al sexo, porque eso es algo en lo que pueden trabajar juntas. Pero no, Shane lo que tiene es que el cambio radical que ha dado su vida ha sido «demasiado». Entre que ahora su suegra vive en casa y ahora tienen 2 bares pues ya no hay suficiente tiempo para ella y lo resiente.
Shane se siente desconectada de Tess, como que la rubia ya no tiene tiempo para ella y su manera de lidiar con el problema ha sido acostarse con Ivy.
Shane: No intento echarte la culpa, solo intento explicar que ha habido una desconexión.
Tess: Sí, es verdad. Ha sido duro. ¿Pero sabes lo que hice cuando empecé a sentirme saturada? Escribí en mi puto diario Shane.
¡Auch! Punto y partido para Tess.
De nuevo en el Dana, Dani le está contando a Sophie que esa semana le toca organizar el lanzamiento del nuevo álbum de Fletcher. Ojalá que se líen y Fletcher escriba una nueva canción bollodramática sobre su ex. En esas están cuando alguien sube al escenario y empieza a cantar. Dani está encantada porque es ¡la persona que le ha besado! Pero la cara de «la hemos liado parda» de Sophie nos indica que es también la persona no sexy con la que se acostó mientras Finley estaba en rehabilitación.
Viendo la que se puede liar, Sophie corre a la oficina para intentar hablar con Finley. Pero claro, habían quedado en un rollito lesbicanario, así que Finley entra directa a la acción y no le da mucho espacio para reaccionar. La acorrala contra la puerta y le empieza a meter mano.
Sophie está entre disfrutando y sintiéndose culpable. Pero claro llega un momento en el que Finley está ahí concentrada dándoselo todo y ella está escuchando a la otra cantar y se le va la mente hacia esos lares y tiene que parar en seco. Finley está toda confusa pero respeta a tope a Sophie así que le pregunta si pasa algo. Ahí es cuando Sophie le dice que Dre está afuera y claro, Finley sale corriendo a ver quien es y cuando le echa una ojeada descubre que lo de «no es una persona atractiva» es una mentira como una casa. Al menos si nos guiamos por la cara de: «me la como bañada en leche nestle» que tiene Dani.
Finley no puede lidiar con la situación y decide activar la alarma para incendios del local.
En el balcón de la desolación, Tess sigue intentando entender las movidas de Shane. Porque vale, es un patrón, lo tenemos claro pero ¿ha probado Shane lo de ir a terapia? La respuesta es no y ahora tiene todo más sentido. Shane no tiene del todo claro que la terapia pueda ayudarla y Tess mira al cielo clamando piedad de las diosas lesbicanarias.
Tess le dice que necesita hacerse cargo de las cosas que hace mal, que todas las personas pasamos por cosas horribles en nuestra vida y eso no es excusa para pagarlo con los demás. Shane admite su culpa, dice que no ha mentido y sí puso los cuernos. Pero para Tess lo importante no es eso sino ¿quiere cambiar Shane? Porque claro ¿de qué sirve que la perdone si van a seguir en las mismas y la próxima vez que se sienta desatendida se encuentra otra peluquera?
Volvemos al Dana para ver a Finley pidiéndole a todo el mundo que se vaya por su seguridad. Sophie intenta hablar con ella pero Finley le dice que no puede hacerlo cuando hay peligro inminente. Sophie le dice que la vio jalar la palanca ella misma y Finley le responde que se vaya porque no puede hablar y le de espacio.
Afuera del local, Dre intenta mover ficha con Dani, pero ella dice que no puede porque Dre se acostó con su ex y eso complica mucho las cosas, pero si necesita una representante se apunta porque se ve que tiene talento.
Angie por su parte está preparada para la acción, ya tiene puestos los guantes y solo le hace falta el valor para empezar el viaje de exploración en búsqueda del condón perdido.
La mujer está nerviosa y Bella no entiende por qué dado que sabe que su amiga tiene experiencias con el cuerpo femenino. Pero no, Angie salió dos años con Jodie, pero las dos estaban de acuerdo en que no estaban listas para tener sexo, así que jamás dieron ese paso. Angie aprovecha para comentarle que su novio quiere irse con ella de vacaciones y no sabe como empezar el tema sexo. Bella le aconseja que le diga todo lo que le gusta para que la cosa vaya bien, pero Angie no tiene muy claro que le gusta.
Dicho eso, se pone las pilas y por fin decide buscar y en menos de nada se hace con el condón perdido. ¡Misión exitosa completada! Luego las dos se ponen a buscar consoladores guays para que Angie empiece a descubrir exactamente lo que le gusta.
En el cine, Alice no puede más y armada con sus botes de palomitas se enfrenta a Taylor. Taylor se defiende diciendo que nunca han hablado de ser exclusivas, vamos que ella pensaba que las dos estaban saliendo con otras personas.
Alice alucina un poco porque en nuestros tiempos todo este tema de la exclusividad se daba un poco por sentado. Taylor se disculpa por el malentendido y le dice que le gusta Alice pero al mismo tiempo le dice que son muy diferentes, la vida que lleva Alice está a años luz de la de ella y le gusta su vida. Alice insiste en que es una persona normal.
Taylor le dice que necesita ir más despacio, lo que me hizo mucha gracia porque apenas el episodio pasado le estaba diciendo a Alice que quería profundizar en la relación. ¡Pónganse de acuerdo escritoras!
Al final Alice se va spoileandole la película a todo quisqui del cabreo.
Micah y Maribel por su parte están intentando encontrar al donante perfecto pero descubren que es más complicado de lo que pensaban y entran en depresión porque ¡los heteros hacen bebés hasta sin querer queriendo! Y claro, a ellos les cuesta tiempo, dinero y experiencias que quisieran no tener que pasar, pero es la triste vida de muchas parejas.
Shane y Tess siguen a lo suyo. Tess sufre porque se veía en una relación para siempre con Shane por primera vez en su vida y le ha resultado rana. Shane le dice que lo está intentando pero jamás ha podido tener una relación que dure. Tess le dice que no va a pasar si no se pone a trabajar en sus problemitas. Y Shane solo le contesta que no es feliz.
Tess se suelta a llorar y Shane intenta consolarla, pero ella la rechaza y le dice que no puede con este tira y afloja. Que la está volviendo loca. Justo en ese momento llega Finley y les abre la puerta. Así que Shane decide salir corriendo porque no quiere «herir más a Tess».
Finley se queda acompañando a Tess y se pone a sacarle platica un poco para hacerla olvidar del mal rollito con Shane y otro poco porque le tiene que contar que la ha liado parda en el bar otra vez y tienen que pagar un pastizal. Pero Tess se lo perdona todo porque esto es una serie.
Dani y Sophie terminan juntas comiendo helado y hablando sobre lo totalmente lesbicanario que es que las dos hayan besado a la misma mujer. Sophie le dice que tiene campo libre si le gusta Dre. pero a Dani le dice que ella es «fiel a muerte» a su amistad, algo que Sophie no pudo ser cuando salía con ella pero ¿eso es agua pasada?
En fin, las dos deciden olvidarse momentáneamente de los amores para darle una oportunidad a las películas románticas.
Shane termina pidiéndole asilo a Alice, que por supuesto se lo da. Ahí descubren las dos que alguien le tomó vídeo a Alice en su aventura en el cine y no sale muy bien parada. Shane le cuenta que ha destruido su relación y Alice intenta darle esperanzas porque sabe que Tess la ama, pero Shane sabe que el amor a veces no es suficiente.
Y así termina este episodio señoras, con Shane siendo la cucharita pequeña y Alice la grande. ¡Nos vemos en el siguiente! ¡Por fin podemos hablar de la actriz que volvía que era un secreto que me carcomía por dentro!