En un lugar de Alemania, de cuyo nombre no quiero acordarme, tiene lugar una historia entre Miriam, una chica que trabaja de camarera en el No Limits. Sus jefes son una pareja de gays, que están en trámites de adopción de un niño. La rubia es de estas chicas por las que te pierdes cuando la miras a los ojos, o por lo menos a mi me pasa, ¿qué les puede decir?, soy muy débil. Después, al otro lado de la barra nos encontramos con la sexy y guapísima Rebecca, una chica de clase algo mas alta, aunque teniendo en cuenta que vive en un Castillo-Mansión, como prefieran, pues adivinamos que su nivel es muchísimo más superior, se dedica al diseño, y para quien haya seguido un poco la serie, Verbotene Liebe, esta morena es familia de la tan conocida Carla. Estas son nuestras protagonistas
Si nos ponemos en antecedentes, las dos han tenido pésimas relaciones con los hombres. Miriam llegó a estar comprometida y bueno, en algún momento ha llegado a caminar por nuestra acera soleada, solo fugazmente, porque el miedo a lo que estaba sintiendo no la hizo seguir adelante. Y Rebecca va de relación en relación sin ese final feliz que a veces buscamos, por una razón o por otra, la cosa termina acabándose a veces antes de que si tan siquiera empiece. Y así en como comienza su historia. Rebecca llega al café donde trabaja Miriam acompañada de alguien de quien parece que ha empezado algo. Ambas se conocen del lugar y de algunos amigos comunes. A la morena se la ve contenta, parece que ha pasado la noche con su acompañante, pero cuando llama a la guapa camarera para pedir el desayuno al chico se le borra la sonrisa de la cara. Rebecca extrañada pregunta si se conocen, y claro que sí, porque la camarera conoce a la mujer de este, dato que nuestra morena desconocía totalmente. Así que Rebecca termina pidiéndole a su acompañante que se marche, porque no quiere ni una sola explicación.
Y ahí es cuando va Miriam a intentar animar a la chica, que no puede entender la mala suerte que tiene con los hombres. La camarera le contesta que no es la única, que ella no tiene mucha más suerte en ese tema y piensa que no son ellas, sino el mercado en general. Así que hacen lo que todas hemos hecho en algún momento, sentarnos y visualizar las posibles opciones del lugar en que nos encontramos.
Igual las opciones no son las mejores, que si muy mayor, que si el otro de la derecha tiene pareja, que si el de mas al fondo solo se gusta a si mismo… Entonces Miriam le dice una verdad enorme, como dos chicas como ellas se encuentran así, ok, eso también pero que la realidad es que siempre hablan de cosas que les hacen sufrir y al final terminan frustradas, con lo que la otra le sugiere que tenían que hacer algo divertido. A mi ya se me viene a la cabeza una fiesta de pijama solo chicas tipo la serie skins, o una partidita al strip poker. Pero igual la opción que eligen esta bastante bien. Ir a un centro de relax, con bañito, masajito, bikinis… doy mi aprobación para ello, seguro que ustedes también.
A partir de aquí tengo que confesar que tengo mi inhalador al lado y es que lo siguiente que vemos es a las chicas totalmente solas bañándose en una piscina cubierta, muy relajadas y disfrutando de esa tranquilidad. En un momento dado Rebecca le pide ayuda porque se le ha enganchado algo en el pelo y yo pensé “puff que excusa más típica” pero todo estaba en mi cabeza, era cierto. Y seguimos babeando con las chicas hasta que aparecen un grupo de chicos, haciendo marcar el territorio, y no orinando como los perros, pero llegan en plan gallitos y toda la tranquilidad se esfuma. Las chicas salen del agua y se ponen a leer revistas, pero como era inevitable los pesados de turno se acercan y después del típico “ ¿te doy un masaje?” La negativa de las chicas no les importan ya que siguen insistiendo hasta que nuestra Rebecca se cansa y le pide a su amiga que se vayan de allí, pero la otra, le dice que no conseguirán que las echen y con un “no te asustes…” sucede lo siguiente:
Ni tiempo de reacción, termina besando a la morena, que perpleja le corresponde al beso, y bueno para ser una táctica para que los pesados se fueran, es bastante largo. Cuando el beso termina Miriam sigue leyendo su revista y Rebecca, se queda, extraña, pensativa, en fin, como que algo se le movió, no ha significado lo mismo para ambas…
Ya de vuelta, se despiden en mitad de la calle, pero antes hablan del beso. La rubia le dice que fue una buena idea para librarse de ellos, pero su amiga, está más nerviosa de lo normal, y sin que sirve de precedente, termina chocando en plena calle con una pareja de chicas, yo solo le digo algo “Hermosa, sigue las señales”.
Y si nos quedaba dudas de que para la morena ese beso ha significado algo, vemos que sueña con su amiga, lo que empieza con un baile termina con tremendo beso, cuando despierta, su cara solo reflejas dudas y preguntas…
Después se encuentra con su hermano y la conversación que tienen no hace más que crearle más dudas a la sexy-labios-carnosos (perdón, pero lo tenía que decir). Puesto que nunca ha tenido demasiados amigos chicos y siempre estaba rodeada de chicas, además recuerdan esa mejor amiga que todas tenemos a esa edad y lo inseparables que eran, siempre juntas y de la mano. Aquí Rebecca roza la paranoia porque eso no quiere decir absolutamente nada, pero igual, ya todo lo ve extraño.
Como la familia es grande, aparece otro miembro, a la que llamaré “la bonita chica rubia” y al verle esa cara de preocupación, le dice que no parece que venga de un dia de relax. Cuanto le cuenta lo sucedido la bonita chica rubia le dice que porque le haya gustado el beso no quiere decir nada, que puede ser porque Miriam besa muy bien, asi de simple, pero, no le mientas, a mi me puede besar el mejor besador masculino de la tierra y como que pocas confusiones iba a tener… Pero Rebeca le confiesa que ha sido más que gustar, que ha sentido maripositas en el estómago, y ya saben que eso quiere decir que pasamos a un segundo nivel y más si añade que piensa en ello todo el día. Entonces se pone a pensar que nunca ha tenido suerte con los chicos y que quizás pueda ser esa la razón y comienza a pensar que igual le gusta una mujer.
La chica bonita rubia le dice que igual por suerte no vivimos en el siglo XIX y la otra le responde que igual tiene miedo porque cambiaria todos los planes, pero si es lesbiana, tiene que aceptarlo, esto último la escucha media familia que se encuentra en la mesa cenando… A eso lo llamo yo plantearse cosas en mínimo tiempo.
Un vez cenando, el padre de la hermosa cricura, le pregunta si lo que ha escuchado se trataba de ella, pero lo niega al instante, y la bonita chica rubia le echa un cable diciendo que hablaban de una amiga, y cuando terminan de cenar de la manera más sutil, esta le dice a nuestra Rebecca, que le diga a su “amiga” que ser lesbiana no es una enfermedad. Que mona que es esa chica…
Una vez a solas, recibe un mensaje de Miriam en el que le dice “Gracias por una tarde increíble” y bueno, dudas, dudas y más dudas.
Al día siguiente la bonita chica rubia le pregunta si quiere ir de compras, pero nuestra morena aparentemente está muy ocupada con unos bocetos de bolsos. La otra le pregunta si siguió el interrogatorio en la cena cuando ella se marchó, pero Rebecca le dice que gracias a su intervención el tema se terminó, se lo agradece nuevamente, y bueno, aprovecha para decirle que recibió un mensaje de Miriam y que quizás la camarera espera algo de ella. La bonita chica rubia le dice que lo mejor es preguntarle directamente, pero nuestra Rebecca le dice que está muy asustada…quiero decir, ocupada.
En el café, encontramos a la guapa camarera y a la bonita pareja, Olli y Christian, hablando sobre la adopción, hay muchos miedos que llevan a supuestos negativos y como nuestra Miriam es una gran persona les aconseja algo que también escucha Rebecca que llega en ese momento y que hace que su confusión si ya que es enorme, aumente “deberías escuchar a tu corazón, siempre sabe que es lo mejor” y con una increíble sonrisa le suelta a Rebecca “¿verdad?”. Así que cuando la camarera va a atender una mesa, la confundida la sigue y tiene una conversación que es muy graciosa porque mientras una habla de ellas, la otra habla sobre la adopción. Hasta que llega un punto que Miriam le pregunta de que están hablando, y la otra al darse cuenta que son temas distintos le quita importancia.
Así que mientras la pareja vuelve a los servicios sociales para que les vuelvan a explicar el proceso de adopción, las chicas se quedan en el café y la camarera le entrega a nuestra morena el capuccino que había pedido, con un extra, que viene en forma de corazón, su cara está entre salir corriendo o ponerse a llorar. Hasta que la rubia con una sonrisa le suelta un
Miriam: Lo sabía
Rebecca: ¿Qué sabes?
Miriam: Piensas que estoy enamorada de ti
Rebecca: ¡NO!… ok, sí, pero es la primera vez que me besa una mujer
Miriam: Ya, pero solo para librarnos de esos chicos estúpidos
Rebecca: ¿De verdad?
Miriam: ¡Que pensabas!
Se retira para seguir su trabajo y la morena no puede evitar deshacer el corazón antes de tomárselo.
Al día siguiente, mientras nuestra Miriam está trabajando, Rebecca que se encuentra allí, no le quita los ojos de encima. Esta con Christian y Olli porque van a ir al cine y el argumento de la película es otra señal más mi querida Rebecca, o sino escuchen “Toby tenía una vida feliz, trabajo y una familia. Hasta que un día empezó a sentir algo por su amigo. Homo-Gene cuenta la historia de un chico heterosexual que descubrió tardíamente su identidad sexual”
Pero nuestra morena no está de acuerdo, ya que piensa que si siempre has sido heterosexual, lo seguirás siendo. A eso lo llamo yo auto convencimiento… pero Christian no está de acuerdo, porque antes de estar con Olli no había estado con ningún chico, y además le dice algo muy cierto, que te enamoras de la persona, independientemente que sea hombre o mujer, pero Rebecca le dice que solo es una bonita teoría. Y mientras mira a Miriam de una manera, que no es precisamente de amiga, puesto que se la está comiendo con los ojos dice “es la apariencia de la persona lo que me atrae primero” por lo que deducimos en la forma de mirarla, que la camarera le atrae muchísimo, cuando baja de la nube, lo arregla diciendo “la apariencia masculina” pero nada, ya todas nos hemos dado cuenta.
Y así van pasando los días en la que nuestra pareja de chicos consiguen adoptar a una niña. Vuelve nuestra Rebecca una vez más al bar y de nuevo se queda embobaba mirando a la sexy camarera, ains, las miradas te delatan amiga mía y ni escucha el interrogatorio que le están haciendo a Constantin, el chico que vive actualmente con la pareja, les garantiza que los chicos lo están haciendo genial con la pequeña.
Y bueno hasta aquí el resumen de esta semana, si quieren seguir viendo la serie, visiten mi nuevo canal del youtube lescarolll (ya que el anterior me lo cerraron), y bueno, les agradecería que no comentaran el final de la pareja en los comentarios, para respetar a ese 15% de la población lésbica que no lo ha visto. Nos vemos a la próxima