Hoy les vengo a hablar sobre una película que ya hace rato está dando vueltas por la bollósfera. No es que la misma sea muy vieja, de hecho , es de este año, pero bueno, nosotras somos así de rápidas y cuando aparece algo enseguida lo hacemos circular a la velocidad de la luz.

La película en cuestión se llama Kyss Mig (Suecia, 2011), que en castellano significa Besame. Dirigida por Alexandra-Therese Keining, y protagonizada por Ruth Vega Fernández (Mia) y Liv Mjönes (Frida).

Para resumir de qué se trata, podría decir que las dos protagonistas se conocen cuando sus padres (padre de Mia y madre de Frida) hacen una fiesta de compromiso porque van a casarse. En esa misma fiesta, Mía y su novio (sí, ya venía con un problema) aprovechan para anunciar, que próximamente ellos también les van a seguir los pasos.

La atracción entre ambas se podría decir que es inmediata. Ni bien se conocen comienzan ese jueguito de miradas tan particular entre mujeres. La historia, por determinados acontecimientos, favorecerá que estas dos mujeres tengan que conocerse más y de alguna manera, desarrollar lo que van sintiendo.

Por supuesto, el drama existe y es variado. Frida es lesbiana y lo lleva perfectamente asumido. Mia no es lesbiana ni bisexual (o al menos es lo que cree), o por lo menos le deja muy en claro a Frida “yo no soy como tú”, pero dejando de lado etiquetaciones varias, tiene novio con planes de boda, niños y demás sueños compartidos por la mayoría de las parejas monogámicamente establecidas.

Así que ya pueden vislumbrar cual es el conflicto de la película. Pese a que es un drama ya de los habituales y que hemos visto mil veces, la película merece mucho la pena. ¿En que me baso para decirlo? Las actuaciones son muy buenas, tanto de ellas como de los personajes que las secundan. La fotografía es simplemente maravillosa, esas luces, esos planos… (bueno, me controlo que comienzo a babear), le da todo un aire a las escenas, simplemente hermoso.

Para quienes estén acostumbradas al cine estadounidense, que suele ser un poco más rápido, tengamos en cuenta que es una película sueca y los tiempos son otros. Igual quiero aclarar, la película no es pesada para nada, al contrario, creo que los tiempos son los justos.

Las escenas románticas y eróticas me parecieron muy bien hechas. Y no, no se la pasan en la cama, pero hay una cuota justa de todo, la película en sí me pareció muy balanceada, tiene la proporción perfecta de drama, romance, erotismo, etcétera.

Te mantiene enganchada hasta el final y creo que no decepciona. No sé porque, la película no ha venido a inventar nada, ni cuenta nada extraordinario, pero me pareció muy bien hecha, y si la comparo con tantísimas películas vistas, yo creo que entra en mis favoritas casi seguro.

Espero puedan verla y la disfruten tanto como yo. Y si alguna la vio, y le pareció todo lo contrario, también está invitada a dejar sus impresiones.¡Hasta la próxima!