Escrito por: Desiderata

Soy incierta de nacimiento… casi invisible por tímidez, que no afloja ni con el paso de los años. Tengo treintaytantos y escribo a orillas del Tormes. Me gusta encontrar la felicidad en las cosas pequeñas de la vida, cosas que hace que la vida valga la pena. Tengo algunos defectos como lo de ser lectora, serie-adicta y buscadora compulsiva Y cómo diría Juan Gelman “Escribo en el olvido / en cada fuego de la noche / cada rostro de ti.”

Fuera dudas. Así se titula el penúltimo capítulo de Out with dad. Así de claro y conciso. Pero ¿las dudas de quién? Porque en el capítulo anterior teníamos a Rose disfrutando de salir por ahí y conocer a alguien especial, pero ya en ese momento dejamos a Rose dudando de lo que sentía por Claire y de cual es el siguiente paso. Y para añadir más dudas a lo que siente Rose pues está volver a ver a Vanessa. Las dos se encuentran en una cafetería y aunque charlan un ratito todo es un poco raro, no solo porque no pueden volver a ser las de antes. ¿Cómo se siente Vanessa con todo eso de hacer lo que su madre le ha impuesto? ¿Eso de tener un novio y todo? Porque eso tiene que ser duro, no poder ser tu misma y vivir una vida que sabes que no te corresponde… Pobre Vanessa. Y en todas partes Claire. Porque conocer a alguien nuevo puede llenarlo todo ¿dónde queda Vanessa en todo esto?

Y claro, después de vivir las mieles de hablar en la reunión con otros gays y lesbianas que han tenido el valor de enfrentarse al mundo y a sus realidades llega el momento de recibir el tortazo en la cara de otras realidades. Porque Nathan está tratando con un cliente que le cuenta encantado una anécdota llena de homofobia y odio. Ese tipo de homofobia que hay en la vida diaria y que puede pasar inadvertida. Así que a Nathan se le atraganta el cliente, el trabajo y el café que tomó hace tres días. Porque Nathan se da cuenta de que es algo que no solo él se va a encontrar habitualmente, Nathan sabe que Rose también va a encontrarse la homofobia de cara y que va a tener que lidiar con ello.

El bueno de Kenny se lanza a pedirle a su chica que vaya con él al baile que organiza el instituto. Es tan majo Kenny… Bueno, la cosa es que inspirada con la invitación de Kenny quien se lanza a la piscina es Claire, que le propone a Rose ir juntas al baile. Rose deja de respirar por un momento, porque parece que no le llega el oxígeno porque no puede hacer todo el razonamiento de un tirón: ir juntas… al baile… como pareja… somos dos chicas… todo el mundo va a saber… Y la respuesta pasa de ser “no estoy preparada” a “me lo voy a pensar”. Y seguramente Rose va pensando en todo esto durante su clase de gimnasia cuando un par de chicas la interceptan para darle su dosis de homofobia. ¿Pensabais que no había para todo el mundo?

La cosa es que dos “compañeras” de Rose le preguntan si Claire es lesbiana porque creen que es injusto que pueda cambiarse en el mismo vestuario que todas las demás. Claro, claro, todas las lesbianas sin excepción vamos mirando a todas las mujeres del planeta porque además de lesbianas somos unas pervertidas. Eso sí, las mozas no se consideran homófobas, pobres. Bueno, yo creo que para empezar lo que son es un poco ignorantes. Así que Rose lidia con ello cómo puede y procura huir cuanto antes de las preguntas capciosas y las afirmaciones absolutas sobre lesbianas y vestuarios.

Lo que tiene claro Rose es que es mejor ahorrarle a su papá todo esto de la basura homofóbica, vamos que cuando él le comenta que ha tenido un día horrible y le pregunta si ha tenido que soportar comentarios homófobos alguna vez, Rose se lo niega. Por ahorrarle el disgusto, claro. Además lo que le preocupa a Rose es que Claire le ha pedido que vayan juntas al baile. Y Rose quiere jugar la baza de “papá ¿tú que harías?”. Porque detrás de todo esto hay algo más. Rose sabe que Vanessa lo está pasando mal pero en el fondo sabe que le gusta Claire y le apetecería seguir adelante, disfrutar de lo que puede suceder. ¿Qué debe hacer? Rose aún siente algo por Vanessa pero también empieza a sentir algo por Claire. ¿Está traicionando a Vanessa por lo que siente por Claire?

Pero el papá de Rose no tiene todas las respuestas, no puede ayudarla a saber si debe esperar por Vanessa o lanzarse con Claire, no puede saber qué es lo correcto ni si todo va a salir bien. Y esa, pequeñas, es la vida, tomar decisiones que van a cambiar cosas en el futuro. De modo que ¿vosotras qué pensáis? ¿Rose debe esperar por Vanessa? ¿O debe lanzarse con Claire? ¿Debe ir con ella al baile y salir del armario con todo el instituto? ¿Vanessa tendrá alguna opción para escapar de su vida y superar lo que está pasando? ¿Entenderá todo esto Claire? Espero que podamos descubrir algo de todo esto en el próximo capítulo (que es el final de la temporada). Saldrá al aire el día 12 de julio ¡y estaré por aquí para contárselo!.

Quizá para entonces podremos saber si hay una tercera temporada de Out with dad. Ya sabéis que están pendientes de recaudar fondos para poder producirla y que podéis informaros de esto (y muchas otras cosas) en su web oficial. ¡Hasta dentro de unas semanas!