Hola lobas, aquí estoy para contaros todo sobre el Festival Internacional de cine LGTB de Andalucía, evento organizado por la Fundación Triángulo Andalucía que este año celebra su 9ª edición, dónde nuestras amadas Adriana Torrebejano y Berta Hernández han recibido el Premio Andalesgai 2013 a la visibilidad por su labor en lo que la mayoría de sus seguidoras en twitter conocemos cómo Tierra de lobas.

Era una noche realmente fría, por fin había llegado el invierno a Sevilla, y allí íbamos mi compañero de reportaje Teo y yo, dispuestos a sacar el máximo de fotos posibles, sin saber que acabaríamos con mucho más que eso.

Como somos unos ansiosos y yo estaba algo nerviosilla, llegamos muy temprano al evento, prácticamente de los primeros y en cuanto dijimos que éramos de lesbicanarias nos hicieron pasar e incluso nos ofrecieron resguardarnos del frío dentro, dónde había una barra con tapitas y bebidas. Como quiero contarlo fiel a los hechos para que lo viváis lo más nítido posible, os confesaré que no probé ni una gotita si quiera de agua, tenía un nudo de los nervios y sólo me dedicaba a mirar la puerta esperando la llegada crisabelina.

Después de un rato, salimos fuera porque yo necesitaba sentir frío para asentar mi emoción, yo pensaba que las vería de lejos, que haría fotos como una posesa a lo que pudiera y que quizás estaría a algunos metros de ellas. Nunca imaginé que podría ser mil veces mejor que eso.

Así que ahí estaba yo, divagando en fantasías lobunas de meterme a guionista y mandar al señor lobo a las Américas y al teniente enamorarlo de una de las criadas, mientras la historia de crisabel acaba BIEN o no acaba nunca, y cómo llega una a sobornar a la producción, cuando detrás de mí, escucho una frase que rompe mi burbuja de pensamientos: -Mirad, ahí viene Berta.-

Mi cerebro tarda medio rato en reaccionar, pensando ¿Berta? ¡¿BERTA?! Y miro al frente, y ahí estaban, las lobas, sonriendo sin parar, entrando con ese glamour y saludando a todo el mundo. En estos momentos, me encantaría deciros que fui toda una profesional, que saqué mi cámara y me puse a hacer fotos muy decentes, y me acerqué a saludarlas y darles la enhorabuena por el premio, pero como todo en esta vida no sale como en tu imaginación, ahí que me veis con cara de OH-DIOS-MIO-SON-DEMASIADO-GUAPAS-ME-CAGO-EN-MI-VERGÜENZA-INNATA, totalmente paralizada y pensando: la ropa de época no les hace justicia.

Menos mal que en la batalla cerebro-cuerpo mi amigo Teo decide zarandearme y decirme que si pienso hacer alguna foto o acercarme a ellas, o hemos venido para balbucear cosas ininteligibles mientras las observamos (¿En serio esa era mi imagen?).

El caso que consigo reponerme y me pongo en modo reportera digna, así que las chicas se ponen en el photocall junto a guionistas (si chicos, nos hemos quedado con vuestra cara, cuidadito con el desenlace de nuestras chicas) y allí estuvieron pacientemente que si mira pa’ca que si mirad pa’allá.

El caso que iban hablando amablemente con todas las personas que se acercaban a ellas, siempre con esas sonrisas que tanto se agradecen.

Así que en una de estas cuando las dos iban adentro saqué mi fuerza interior lobuna y las llamé por su nombre a cada una, en plan colega de toda la vida, y ambas se giraron y les dije si podían mandar un saludito para sus fans lesbicanarias, ambas sonrieron (otra vez esas puñeteras sonrisas matadoras) y dijeron que por supuesto, Adriana encantadora, me dijo que sabía que íbamos a estar lesbicanarias por allí, y nosotras sabemos que nos lee, y claro, que levante la mano quién no se encandile con esta muchacha que es pura dulzura.

La fiesta seguía, todo estaba lleno, y allí estaba yo más feliz que una perdiz por lo simpáticas que eran, lo guapísimas que son sin tele y maquillajes por medio, y lo sencilla y naturales.

Porque pocas actrices con su éxito son tan adorables con su público, y tan atentas. Yo iba allí modo reportera, pero asumid que soy fan, y no quería quedarme con las ganas de alguna foto con ellas, aunque estaba todo lleno de gente, pero eran tan majas, que se paraban con todo el mundo.

Así que me armé de valor de nuevo, (ya mi espíritu lobuno campaba en mí a sus anchas) y me acerqué a Berta, ella tan linda se hizo hasta dos fotos conmigo, ya que Teo insistía en repetir por si acaso. He de deciros que ella simplemente es preciosa, tiene unos ojos que dan miedo, y cuando sonríe te embobabas, fue muy atenta con todas las personas que se le acercaban, de verdad que se merecen todo el éxito que tienen.

Cuando me acerqué a Adriana a pedirle una foto, llegó el momento gafe de la noche, mi cámara no iba bien, el móvil de Teo tardó ocho siglos y medio en reaccionar, y como medida desesperada saqué mi móvil y el cuajón no sabía acceder a la cámara del mismo.

Imaginaos mi situación, ahí agarrada cual lapa a la guapísima Isabel de tierra de lobos y la pobre chiquilla esperando a hacerse la foto y nada va, pero para añadir más presión al asunto, llega una organizadora del evento y le dice que tienen que entrar ya, total, que ahí ya desisto y ya buscaba la pared más cercana para pegarme chocazos contra ella, cuando Adriana tan jefa, dice que espera a hacer la foto y no se quita de la posición, (en serio, si estas mujeres son así de perfectas, ¿qué hacemos las mortales?) así que ahí se pone Teo como puede a hacer la foto, que gracias a las diosas lesbicanarias vuelve a funcionar todo. Y yo me quedo con una paz y subidón interior que ni las drogas duras.

Luego vamos entrando todos a la sala dónde se hace el acto y ellas se sientan muy monas juntitas y charlan mientras empieza todo, cómo se nota la complicidad que tienen y lo bien que se llevan, eso es genial, y se transmite a la perfección dentro de la pantalla.

Pudimos ver varios trailers de las películas del festival, y vimos los premios de la organización a entidades que han colaborado con la causa LGTB en Andalucía, así como la actuación en directo de la cantante y compositora Melu, que cantó dos canciones realmente bonitas. Y que os aconsejo escuchar, porque son canciones entre otras de amor entre mujeres, y llegan.

Y ya, por último subieron a recibir el premio nuestras lobas. Insisto, ¡que guapaaaaaasss!

De los agradecimientos, me quedo con éstas palabras de las chicas:

(Adriana coge el micro muy decidida y Berta la mira y se ríen y le pregunta Adri a Berta que si quiere hablar ella primero, y Cristina le dice que no a su Isabel riéndose ambas).

Adriana: Estamos muy contentas de poder estar aquí, porque nunca habíamos pensado que ésto pudiera llegar hasta este punto. Siempre hemos trabajado la trama desde una forma muy pequeña y muy humana y la verdad es que me alegro de ver todo el apoyo que nos dais en redes sociales, todos los días, los días de la serie, todos los mensajes que nos escribís, y no tenemos palabras de agradecimiento. Sobretodo, toda la gente que gracias a nuestra trama puede ser cómo es, chicas que se han acercado a nosotras y nos han dicho que gracias por haber interpretado a Isabel y Cristina, porque han podido sentar a su madre en el sofá y decirle: ¿las ves? Pues así soy yo. Eso siendo actriz es un regalazo…

En ese momento, Berta la mira riéndose mucho y ambas se miran y se parten de risa, porque Adri es la qué mas habla siempre de las dos, y Berta le dice riéndose: -sigue sigue-. Así que Adri le da el micro a Berta diciendo que ya está, que se enrolla mucho. Lol. Son tan divertidas y con tanta complicidad…

Berta: Yo tengo poco más que decir la verdad, estoy de acuerdo con todo lo que has dicho. Doy las gracias al festival por el premio, y a vosotros por llevar tan lejos nuestra historia de amor, aprovecho para decir que en una sociedad que sigue siendo tan hipócrita y que sigue teniendo ésta doble moral, dónde censuran videos dónde se cuentan historias de amor entre una pareja de mujeres de una manera tan natural o dónde censuran tramas de amor entre dos chicas y vosotras hacéis que esto siga llegando tan lejos. Muchas gracias.

Sólo digo: ¡oleeee! Qué pedazo de artistas, qué pedazo de mujeres. La noche culminó con la proyección del film ‘It Gets Better’. Y cómo última anécdota, decir que al final de la noche y al despedirse unas chicas empezaron a gritarles a ambas: -guaaaapaaaassss, tias bueeenassssss, cueeerpooos – y tan geniales cómo siempre contestó Adriana con to su arte: -¡¡cuerpo el de vosotras!!-. Y toda la sala estalló en risas y aplausos.

No hay duda de que estas chicas, se merecen su éxito y aún más.