El amor está en el aire chicas, no sé si es que ya estamos tan cerca de la navidad o simplemente que las estrellas se han alineado, pero si cierran los ojos y respiran profundo lo sentirán rozándoles la piel. Y no somos la unica especie afectada, los pingüinos también están románticos. De hecho ya conocemos a la primera pareja de pingüinas lesbianas. ¡No me dirán que no son tiernas!

Se llaman Suki y Chupchikoni y su historia de amor comienza en el zoológico de Ramat Gan en Tel Aviv. Resulta que es prácticamente imposible descubrir si un pingüino jackass o «patas negras» (la especie a la que pertenece nuestra parejita) es hembra o macho a simple vista. Por este motivo, los cuidadores lo medio adivinan fijándose en sus características físicas, cosas como su tamaño o su comportamiento.

El caso es que al ver a la nueva pareja, sus cuidadores de inmediato llegaron a la conclusión de que Suki era una hembra y Chupchikoni el macho. La pareja pasó totalmente desapercibida hasta que un veterinario Israeli que está investigando la malaria en las aves, tomó algunas muestras de sangre y descubrió que Chupchikoni era una hembra.

Sus cuidadores han explicado que la suya es una historia de amor en toda regla. Las chicas se han elegido mutuamente porque así les salía del corazón.

Hay algunos machos disponibles en la exhibición. Estamos seguros de que han escogido estar juntas.

La parejita está en plena construcción de su nidito de amor. De momento están reuniendo todos los materiales necesarios y lo mejor de todo es que viven felices y en paz, porque al parecer a ningun otro de los pingüinos le importa que sean lesbianas. ¡A ver si aprendemos de ellos y vivimos todos en paz!

Vía: Ambiente G