La semana pasada en Vis a Vis terminamos en depresión, porque Maca y Rizos se pelearon otra vez y encima nos quieren casar a Saray que es más bollo que todas nosotras juntas, así que la cosa no pinta muy bien para las lesbianas en la serie. ¿Será que cambia nuestro destino televisivo? ¡Se los cuento ahora mismo!
Nuestro episodio comienza con Maca duchándose, que por cierto, me extraña que ella siempre esté sola en las duchas, creo que tiene más tiempo para ducharse que yo en mi casa que siempre está colapsada. Pero obviemos este detalle para platicar de lo verdaderamente importante que es que la «asistenta» de Zulema se presenta ante ella para decirle que su jefaza se la «prestado» a Maca por una semana como regalo de reconciliación.
A la rubia no le hace mucha gracia eso de tener una guardaespaldas detrás de ella todo el tiempo, pero como la secre le dice que si no la acepta Zulema la muele a palos, pues al final decide aceptar el regalo.
Mientras tanto Miranda les ordena a todos los guardias que estén atentos, porque hay drogas pasando por la cárcel y ella quiere detener el flujo de estupefacientes. Cuando todos se van le dice a Palacios que se quede, porque necesita un testigo para revisar también a los funcionarios. Vamos, que se pone dura.
Mientras tanto, en la celda de Saray, nuestra gitana favorita (aunque con muy mal carácter) se está preparando para su boda. La pobre tiene cara de funeral, pero las chicas intentan animarla contando chistes y burlándose un poco.
Rizos: La tradición dice que tienes que llevar algo azul, algo prestado y algo usado.
Antonia: Usado ya lleva el chocho, que tú te has encargado de dejárselo holgado y del color del chocolate. ¿O no?
LOL, esta Antonia es lo más. Saray invita a Rizos a ser su testigo, porque quiere tener al amor de su vida en la boda, aunque no se pueda casar con ella. Otra que aparece por ahí es Zulema y Saray sufre por aquello de que piensa que viene a regañarla, pero no, Zulema la apoya en la decisión y le dice que se ve muy guapa.
Por otro lado Miranda sigue revisando los casilleros de los guardias y revisan todo menos lo del maldito doctor del mal que es el que realmente está pasando la droga. Y mientras Miranda está distraída peleando con él, Palacios se encuentra un pequeño alijo en la taquilla de Valbuena.
Maca mientras tanto se pone a hablar con su nueva acompañante a quien conoceremos como Casper. La rubia le pregunta por qué está en esa situación y Casper le confiesa que fue porque tenía una deuda y no la pudo pagar. Así que o le cortaban los dedos o servía a Zulema. ¡Mal rollito! Maca le dice que eso es esclavitud y puede denunciar, pero ella le dice que está bien así, que Zulema le cuida mucho.
Palacios le cuenta a Fabio que se encontró la droga, pero claro, ahora ya no la puede entregar porque ya no está en su taquilla sino que la tiene él. Fabio le dice que él se encarga del asunto.
Fuera de la cárcel, el padre de Maca habla con el inspector que sigue tirando anzuelos, pero el hombre no le cuenta nada. Eso sí, para haber sido policía es muy despistado, porque el inspector se encuentra la bala perdida que disparó el egipcio cuando se pasó a «visitar» la casa.
Palacios y Fabio por su parte están revisando toda la correspondencia de las presas y descubren que a Zulema le han enviado un billete de 500 con una frase en un idioma extraño, así que de inmediato interpretan que es un mensaje del egipcio.
Maca se pasa a visitar a Zulema porque sospecha que algo hay detrás de su «regalo». La malota se hace la inocente, pero nosotros sabemos que en realidad ha mandado a Casper a espiar todos los pasos de Maca.
Por otro lado, se está llevando una investigación interna por lo del billete a Zulema y se llega a la conclusión de que se lo van a entregar para intentar rastrear con quién se comunica.
Más adelante vemos a Maca recibir la visita de sus padres. De inmediato intenta tranquilizarlos diciéndoles que está bien, que se está adaptando perfectamente a la vida de la cárcel y que incluso está empezando a aceptar que quizá se quede ahí los próximos siete años. Luego les suelta la bomba: ¡está embarazada!
Los abuelos obviamente entran en shock por aquello de que el niño es de Simón, pero Maca les dice que el bebé le está trayendo muchas ilusiones y que se siente muy conectada con él. Que ya no se siente sola porque el bebé está con ella y que lo quiere.
Rizos: ¡Que ganas tenía de conocerlos! Yo soy amiga de su hija. Muy buena amiga. Pero ahora estamos un poco de la gresca porque yo la vendí para conseguirme un tercer grado, pero ella me lo jodió. Bueno, me voy, pero ha sido un gusto conocerlos mis futuros suegros.
Siento haberla embarazado, pero juro que me caso con ella
Los padres de Maca se quedan bastante en shock por aquello de que su hija va a tener un hijo con una lesbiana (o al menos eso deseamos nosotras). Pero Maca sigue bastante enfadada con Rizos, así que yo no lo veo muy claro por el momento.
Más adelante vemos a la Rizos comiendo cuando Maca se acerca y le dice que jamás en la vida vuelva a acercarse a sus padres y mucho menos a hablar con ellos. Rizos se pone super triste, pero en lugar de seguir afincada en la depresión decide solucionar el problema. ¡Comunicación ante todo!
Rizos: Maca, yo te jodí a ti mucho, tú me jodiste a mi mucho. Ya está. Vamos a hacer las paces por favor, que es muy coñazo estar así… ¡Anda dime que sí! Que ademas dentro de unos meses vas a estar hormonando insoportable que no te va a aguantar nadie y lo sabes. ¿Eso es un sí negrita siéntate a comer conmigo?
Maca: No, eso es un ya veremos negrita, si te portas bien.
Rizos se queda contentísima con esa respuesta, porque un más adelante es diferente a un no, así que se va toda contenta. ¡Son tan monas!
El que no está tan contento es el padre de Maca, que está nefastísimo porque encima de que su hija está embarazada sospecha que tiene nuera en lugar de nuero y no le hace mucha gracia. Ais… ya veo a la pobre de Rizos cantándole So Rude a sus suegros.
Y hablando de Maca, Anabel le llega con la pastilla abortiva y la rubia le dice que ya no la necesita. Pero eso a Anabel la trae sin cuidado y le exige el pago por sus servicios. Como Maca no responde, Anabel la amenaza con ponérsela en la comida cuando no se de cuenta y ya esté pasada de cuentas para que el bebé salga con malformaciones. Maca acepta entonces recoger cierto paquete de Anabel otra vez.
Otra que está pasando otro viacrucis es la pobre de Saray, que encima de que sus padres la casan, le han escogido el espécimen menos agraciado del lugar. La pobre sufre mucho, pero Rizos está ahí para apoyarla y hasta se escribe en sus sandalias un «te quiero gitana» para darle ánimos. Porque todos tenemos claro menos el novio, que Saray no se quiere casar. ¡Sufro mucho por la presión familiar a la que se ve sometida!
Encima, la pobre mujer se casó para reconciliarse con ellos y lo que es su madre la trata peor que la escoria con todo y que se casó para salvarlos. Vamos que encima de todo malagradecida. La verdad sufro muchísimo por Saray porque su historia es la de muchas mujeres que no pueden con la presión y terminan vendiendo su vida para no perder a la gente que tienen a su alrededor. Vamos que la misma historia a la que se enfrentan Jade y Althea pero esta con toque carcelario.
En fin, que se rompió el corazón cuando antes de irse a su noche de bodas se detiene para decirle a Rizos un: «Estefanía, yo voy a ser de ti siempre»
A Maca le toca ir a una «visita marital» para recoger el paquete que le encarga Anabel. En la visita obviamente le tienen que pasar. Como es una desgraciada a la que todo le pasa, a la salida le toca que la revisen y le encuentra la droga el doctor pervertido del mal.
A Maca no le queda de otra que dejar que el asqueroso le meta la lengua en toda la boca para salvarse y encima le quita la droga. ¡Ascoooooooooo! (Pero mis respetos al actor que hace que no haya una mujer en este mundo que no lo odie).
La poli mientras tanto está atentísima a los pasos de Zulema que por fin llama al teléfono que traía el billete. Rastrean la llamada y está en el automóvil del Inspector jeje. Vamos que se las ha colado a todos.
Maca le explica a Anabel el asunto de la droga y la tía se nefastea muchísimo. Las cosas se ponen rudas y Maca pierde los nervios y estrella a Anabel contra la pared. Luego se le caen las bragas y casi que le pide perdón de rodillas, pero la otra ya está cabreadísima y la amenaza diciéndole que quien perjudica su negocio se perjudica a sí mismo. Y como vimos con Casper, no va de broma.
Fabio agarra a Valbuena y le dice que o se mete la raya de la coca que se encontraron o lo denuncian, porque él respeta el consumo personal, pero no a los que trafican. Así que al hombre no le queda de otra que apoquinar, y vamos seguro que no vuelve a llevar droga.
Zulema por su parte azuza a Anabel para que se enfade más con Maca diciéndole que la rubia se le está subiendo a la chepa.
Saray regresa a la cárcel con cara de derrotada, pero en cuanto entra se arma de esa fuerza que tienen las mujeres que han tenido que sobrevivir a grandes retos y pone a todo el mundo a felicitarla por su boda y a bailar. Eso sí, cuando su mirada se encuentra con la de Rizos sí que enseña lo que realmente siente.
Ahora la que lo está pasando peor de todas es Macarena, porque Anabel y sus secuaces la han agarrado y deciden que se van a cobrar la deuda con los pezones de la Maca. ¡Joder! Les juro que sufrí de solo pensarlo. ¡Holy Shit! Miren que llevamos toda la serie cotorreando con aquello de que a la Maca le vemos la delantera al aire todos los episodios, pero no creo que nadie quiera verla en estas circunstancias. ¡Pesadilla en la calle del infierno!
Menos mal que en ese momento llegó Zulema a pagarle un adelanto a Anabel para que deje en paz a Maca. ¿Por qué? No tengo ni idea, pero seguro que tiene sus razones y son para bienestar de ella misma y no de la rubia. Yo de todos modos le estoy muy agradacida por habernos conservado con bien y felicidad los pezones de Maca.
Y así terminamos el episodio de Vis a Viss de esta semana señoras. Pero aquí no termina lo importante porque al finalizar nos dieron un adelanto de lo que viene en el próximo episodio y ojito a lo que pasará entre Maca y Rizos.
¡Ala! No se ustedes, pero yo no puedo esperar a que ver el siguiente episodio. ¡A ver con que nos salen la próxima semana!
