Esta semana en nuestro capítulo de Faking it las cosas han estado muy moviditas. Aunque nuestras Karmy solo han coincidido en el principio esos cinco segundos abrazadas ya merecen la pena. Además Karma parece que ha terminado del todo la relación con Liam, así que no se puede pedir mucho más, bueno, la verdad es que se puede pedir mucho más, pero tampoco es necesario abusar. Empecemos con ello pues.
Nuestro capítulo comienza con Amy y Karma en la cama. La pelirroja abrazada a su amiga mientras duerme y yo muriendo de emoción y tristeza al mismo tiempo al pensar como no se dan cuenta del bonito despertar que se están perdiendo cada día juntas. Cuando Karma es consciente de la situación pone una cara de por-favor-que-no-se-despierte-y-me-encuentre-abrazada-como-cual-babosa. Así que rápidamente se levanta y se empieza a vestir.
Amy le dice que es sábado, que relaje un poco pero Karma le recuerda que quedaron con sus amigos. Pero la rubia no ve nada claro el plan, porque que pinta ella entre “Shuke” y “Kiam” parejas acarameladas como sino hubiera un mañana. Así que prefiere regodearse en su dolor y quedarse en casa.
Y es que la pobre Amy quiere estar separado del mundo de algodón que tienen las parejas enamoradas de su alrededor. No sabe que bajo esa misma casa también hay alguien que va llenado el aire de suspiros de amor. Recordemos que Lauren se reconcilió con Theo y ahora tienen una relación un tanto secreta. Ya que el chico puede perder de nuevo el trabajo si se llega a enterar alguien y ella la presidencia. Así que de momento no comparten su amor con el mundo. Pero claro, si Theo deja una nota de amor en el jardín anónima y no llega a su destinataria, sino a Amy puede dar lugar a confusión.
Y claro, Amy lo tiene bien claro. Su madre está teniendo una aventura. Y más teniendo en cuenta lo mucho que se arregla la señora últimamente. Lauren no sabe como parar lo que se le ha formado en la cabeza a su hermanastra, porque sabe que la nota era para ella. Pero todo cambia para Lauren cuando buscando Amy en la ropa sucia, encuentra una tarjeta de un motel. Ahora solo tienen que averiguar cual de los dos es en que está engañando a su pareja. ¡Ay que se nos va a traste esta familia!
Mientras en la cafetería vemos la mar de acaramelados a Shane y su novio. Rapidamente le piden perdón a Karma por ser tan empalagosos pero la chica le quita hierro diciendo que no se preocupen porque cuando llegue Liam también estarán igual. Veis esto es lo que quería evitar Amy, menos mal que se quedó resolviendo temas familiares al más estilo de Verónica Mars. Pero el gozo de la pelirroja a un pozo, ya que su… Liam, se presenta con Zita, su compañera de trabajo. Pelea de gatas a la vista…
Duke, el novio de Shane tiene que viajar a Los Ángeles por trabajo y todos lamentan no estar ahí. Por lo que Karma propone verlo por la tele juntos. Pero Zita, sube la apuesta y les propone ir a Los Ángeles en su jet privado. La cara de Karma es un poema. Así que la próxima vez que los vemos ya están en el lugar y en una limusina. Los chicos se bajan para ir a ver a Duke pero Zita le propone a Karma irse de compras. Y claro, como se va a negar, pero la ilusión muy justita a ese plan, pero tiene que chupar.
Mientras las hermanas están tratando de averiguar que progenitor es el que está siendo infiel porque viendo los antecedentes de ambos podría ser cualquiera. Y aparte claro, la madre yendo de peluquería, con la manicura perfecta y el padre con camisas nuevas y demás, yo no podría intuir quien de los dos es. Solo espero que no sea nada porque la verdad es que me gusta mucho esa familia, bueno, las mujeres de esa familia, porque el padre ni fu ni fa. Me ganará el día que tenga más de cinco líneas en el guion.
Lo siguiente que vemos es a una Karma realmente guapa con un vestido blanco que vale un pastizal. Quiero hacer aquí un inciso porque ¿no veis a Karma muy guapa está temporada? Yo le veo un no sé qué, que no se algo que para mí está increíble. Las chicas empiezan a hablar y la pelirroja se da cuenta de lo amigos que son Zita y Liam porque saben todo el uno del otro. La morena le quita hierro diciéndole que tienen que hablar sino quieren morir a veces de aburrimiento, pero nuestra Karma tiene ya la mosca detrás de la oreja y más cuando la otra le empieza a contar cosas que ella ni siquiera sabía. Y no quiero decir nada, pero a mi parecer es un poco culpa de Karma que tiene esa relación rara con el chico, que no se sabe si están juntos o son amigos pero está claro que hay algo entre ellos que no es igual.
Mientras Amy y Lauren no terminan de tener claro quién es el mentiroso de los dos. Y todo se complica cuando ambos se van a sus trabajos un sábado ya tarde. Así que las chicas no saben a quien seguir de los dos así que optan por lo práctico: se irán a hacer guardia al motel. Así que se presentan con sus sudaderas con capuchas y se disponen a hacer guardia. Con lo más importante en un momento de espionaje como ese, una buena bolsa de patatas para matar el rato. Me encantan las escenas de las dos. Aparte no sé si os habéis dado cuenta que Amy lleva todo el rato puesto el pijama. Me recuerda a una amiga que tengo que solo le falta ponérselo para ir a la discoteca…
En Los Ángeles, por fin llega la noche de la pelea de Duke y todos van super guapos vestidos para la ocasión. Tenemos además para mi desgracia momento de amor Disney cuando Liam ve aparecer a Karma enfundada en un vestido brillante. Como dice Zita, casi se le cae la mandíbula al suelo. Pero la pelirroja no puede disfrutar el momento porque quiere hablar con Liam, pero es interrumpida por la estúpida representante del luchador que quiere que tanto Zita como Liam pasen por la alfombra para las fotos como si fueran pareja. Dejando eso a Karma más hundida en la miseria. Y Liam como siempre, no enterándose ni de la misa la mitad. Aishh no soporto ver a mi amorcito fakinil llorar…
Para Shane la noche no va mejor, ya que la representante de su novio le dice que normalmente a sus clientes les prohíbe tener una relación abierta y si lo hacen, con alguien que sea impresionante y que el chico esté en el instituto no ayuda (¿perdona? Pedazo de bruja). La falsa le dice que ya ha hablado con Duke de eso y que puede ver el combate desde una sala. Después Shane va a verlo y le recrimina que quiera que su relación este armarizada perdida de nuevo. Además se va de la lengua y le dice que él fue el que sacó a los medios que Duke era gay. El chico pone una cara de asombro tremenda y le dice que cuando su representante le dijo de tener la relación en secreto él dijo que no. Así que bueno, ahora están todas las cartas sobre la mesa y ya no hay más secretos entre ellos. La pregunta es si Duke podrá perdonarlo…pobre, pero tampoco actuó bien, sacándolo del armario y ocultando que había sido él. Ya sabéis, siembra tormentas y recoge tempestades.
Las futuras Nikitas están casi muriendo de aburrimiento en el coche. Lauren medio dormida y Amy sufriendo por el modelo de padres que tienen. Los cuales les dejarán secuelas y jamás podrán mantener una relación sana y duradera con nadie. ¿No la amáis cuando se pone tan fatalista? Pero toda la conversación termina cuando ven a la madre de Amy llegar al motel. Ya parece que vamos descubriendo por parte de quien viene la infidelidad ante el auténtico cabreó de Lauren que no tiene otra cosa que llegar hasta la puerta del motel y exigir a la señora que abra la puerta. Tremenda sorpresa cuando quien abre la puerta es el padre de nuestra faunisima Amy.
En otro lugar por fin Liam da con Karma que le devuelve el vestido a Zita y le pide que por favor vuelva a llevarla a casa con su jet a casa. Cuando están solos tiene lugar otra discusión entre ellos:
Liam: Sabia que el dinero sería un problema. Siempre lo arruina todo.
Karma: No es solo el dinero. Tuve que enterarme esta noche por Zita que pensabas que habías conocido a tu verdadero padre. Liam siento que eso pasara pero, ¿por qué no compartiste eso conmigo?
Liam: Porque estuviste con Amy toda la semana pasada.
Karma: Viendo la tele. Podrías haber llamado.
Liam: Mira, no sé que es lo que puedo y no hacer contigo. ¿Cómo se supone que tengo que saber cuáles son las reglas si ni siquiera sé lo que somos? Quiero decir, somos más que amigos con beneficios pero no volvemos a estar juntos y sí, también me has estado atando a levantarme. Así que dime Karma, ¿cuál es la respuesta?
Karma: No he recibido ninguna respuesta desde que te acostaste con mi mejor amiga.
Liam: Ahí está, ¿Cuántas veces tengo que decirte que lo siento? ¿Qué quiero estar contigo? ¿Será eso algún día suficiente?
Karma: ¡No lo sé! No lo sé…
Aquí tengo que decir que Liam tiene un poco de razón. Porque el chico no sabe en que punto está con ella y karma claramente no ha superado lo que pasó entre él y Amy, así que es muy difícil seguir adelante con las heridas abiertas. Yo si fuera karma, estaría un tiempo sola y esperaría a ver que quiero. Porque si vuelve con el chico no le puede estar echando en cara lo que hizo, si lo hace tiene que ser con todas las consecuencias y sabiendo perdonar y yo creo que la pelirroja aún no está preparada para ese punto. Así que mejor para todas nosotras, que mientras más lejos esté el guaperas, mejor.
Liam sigue desolado y se encuentra con Zita que le pregunta como está. El chico anda perdido y le responde que ni lo sabe, pero ella, tiene claro lo que quiere. Sin pensárselo dos veces se abalanza sobre él y comienza a besarle, y éste tampoco es que se resista… Odio esto en las series, estás mal y te lías con el primero que pasa. Que igual pasa en la vida real pero oye, a mí eso nunca me ha pasado. Así que un punto menos para el majete de Liam. Mientras Karma llega a su casa y la está esperando una limusina. Es el padre de Liam, la invita a pasar dentro y todas nos quedamos con la duda de saber lo que quiere. Mala espina que me da esto también, y no porque se vaya a liar con su padre, sino porque a saber que quiere el señor.
Y así termina nuestro capítulo. Nos deja muchas dudas porque: ¿Se romperá la familia de Amy y Lauren? ¿Perdonará Duke la traición de Shane? ¿Qué pasara ahora entre Liam y Karma? Las cosas están muy en el aire, pero tendremos que esperar al siguiente capítulo para ir desvelándolas. Hasta entonces, a ser felices.