Recuerdo que mi mamá me decía que llegaría el hombre indicado que me haría sentir como una princesa y me casaría con él; hasta entonces no tendría relaciones sexuales con nadie. Como podrán imaginar, nunca llegó ese hombre indicado porque se me cruzó una chica muy guapa por el camino.

¿Por qué el sexo se convirtió en parte tan importante de nuestra vida?

Claramente no quiero generalizar, conozco chicas que solamente tendrán relaciones si es con la chica que se casarán, en mi caso, soy una chica que sólo puede tener relaciones sexuales con la persona a la que me siento atraída emocionalmente y tengo varias amigas que disfrutan del sexo casual.

Sin duda la sexualidad forma parte importante para el ser humano, aparentemente somos la única especie animal capaz de disfrutar el sexo (creo que también los delfines pueden, pero eso sería chisme), así que por qué reprimirnos a practicarlo.

Éste claramente es el panorama bonito en cuestión de sexo, la pregunta importante de hoy es ¿Qué le pasa a mi cuerpo si dejo de tener sexo?  Empecemos por el hecho; en ésta sociedad, una persona sexualmente inactiva tiende a ser objeto de diversas burlas; afortunadamente en el lado L de las siglas LGBT+, es un poco menor la presión sobre el sexo, pero eso no significa que nos libremos de los problemas físicos y psicológicos que la falta de sexo provoca.

Antes de empezar con la lista me gustaría aclarar, la lista aplica a chicas que han tenido relaciones sexuales; claramente las chicas que son virgenes no sufren de abstinencia.

Propensa a enfermedades

Aunque no lo creas, una vez que tienes relaciones sexuales, tu organismo empieza a reforzar tu sistema inmune, esto te hace menos propensa a tener infecciones, resfriados y prácticamente tu cuerpo empieza a tener una mejor salud (claramente teniendo los cuidados necesarios). Estudios comprueban que el cáncer cérvicouterino puede estar vinculado a la falta de sexo.

Así que dejar de tener sexo, puede incrementar tu probabilidad de contraer algún resfriado o ser propensa a generar mucho más rápido una infección. ¡Tenemos que cuidarnos!

«Me siento algo muerta»

Libido al piso y ni Manuela nos puede ayudar

Cuando nuestro cuerpo se acostumbra a liberar una energía sexual, se vuelve propenso a almacenar esta energía como una pila recargable. Cuando no ocupamos la pila recargable empieza a tener fallas y no cargar como antes o simplemente queda obsoleta. Lo mismo pasa con nuestro organismo, el libido disminuye y puede llegar a desaparecer; lo que generaría relaciones sexuales con complicaciones para llegar al clímax como solía ser.

La masturbación tiende a ser una técnica para mantenernos “en forma” pero la realidad es que, muchas veces ni Manuela nos podrá ayudar con la perdida del libido.

«No es justo»

Lubricación natural disminuye

La lubricación va un poco de la mano con el libido. El lubricante natural se ve drásticamente disminuido cuando aparentemente no lo necesitamos; la falta de relaciones sexuales manda la señal al cerebro de que la lubricación es inútil en este periodo de tiempo. Lo que puede ocasionar es el aumento de la insatisfacción sexual, una vez que retomes la actividad, lo que genera frustración, estrés… Todo es como una bola de nieve cuesta abajo.

Estrés a toda marcha

Este es un dato que todas sabemos (o debemos saber), la actividad física reduce casi a cero el estrés y la ansiedad, todo esto gracias a la liberación de diversos químicos naturales que reconfortan a nuestro organismo de forma física y psicológica.

El corazón se pone en riesgo

En este punto hablaré del corazón como órgano y no como icono que representa al amor. De acuerdo con un artículo del Doctor Chris Iliades, el sexo tiene gran implicación sobre la salud cardiovascular. Cuando no se practica tanto la actividad sexual, la presión sanguínea se ve afectada, el corazón tiene un poco más de trabajo al bombear sangre y puede traer una que otra complicación al corazón. Así que, háganlo por el corazón chicas.

«Mi corazón»

También el cerebro se ve afectado

No obstante de dañar a nuestro corazón con falta de sexo, también lastimamos a nuestro cerebro. Existen estudios que afirman que las neuronas tienen un mayor crecimiento en el periodo de actividad sexual. Las funciones de ámbito cognitiva se ven beneficiadas debido al placer generado; esto según los científicos, aumenta nuestra capacidad intelectual. No podemos dejar que nuestro cerebro se atrofie.

A pesar de que vemos el sexo como un status quo en la sociedad, en realidad sí puede llegar a afectar muchas áreas de tu organismo, áreas que son importantes para que podamos estar plenas y felices. Empecemos a ver al sexo como una actividad placentera con beneficios únicos, como una rutina divertida en la vida individual y en pareja. Nosotras estamos para disfrutar y cuidar de nosotras mismas.

Recuerden que toda actividad sexual tiene sus riesgos. No se se estresen, pero si mantengan el cuidado necesario para poder tener sexo de manera placentera y segura.