Muchas de nosotras nos sabemos la historia de como San Valentín y Cupido nos engancha con personas que se quedarán para siempre o que simplemente se equivocó a la hora de lanzar su flecha; pero hoy me quiero ir un poco más profundo y explicar cómo es que muchas de nosotras disfrutamos el 14 de Febrero como si no existiera un mañana, a esto le llamaré, La química de Cupido.

Empecemos describiendo el juego del niño en pañales. El pequeño y volador Cupido lanza su flecha en Inserte su nombre y hace que se fije en Inserte nombre de chica admirada entonces es cuando empiezan esas miradas, los mensajes por medio de los ojos, el coqueteo de distancia y es ahí cuando se forma la explosión a la que hoy conocemos como enamoramiento; en esta fase se libera cuanto químico natural podemos imaginar; muchas de nosotras nos quedamos en algunas fases porque nos damos el tiempo para construir día a día la estabilidad y muchas de nosotras dejamos que la química vaya desapareciendo.

Fase 1: Lo que los mortales denominamos ENAMORAMIENTO

Esta fase puede surgir dentro del primer año de relación y puede ir cambiando hasta después de 3 años; muchos dicen que el climax de todo este proceso son 3 meses, pero la verdad es que es un lapso muy corto para determinar si en verdad se aman o no.

Dentro de esta etapa, se genera un coctel químico bastante interesante. Se ven incrementados los niveles de dopamina y oxitocina, la amígdala cerebral es la que controla las emociones y nuestras conductas se ve alterada y las redes neuronales se ponen a trabajar al mil; a todo esto se le determina como ‘El coche sin frenos’ porque literal parecemos coches sin frenos. Dejamos entrar a nuestra flechada con todo y todo, defectos, virtudes y hasta con la futura suegra. Científicamente hablando, es cuando el receptor D2 y D3 de dopamina frena lógica y congruencia, por eso parecemos un poco tontas o irracionales.

Hablando de oxitocina, pues se puede presentar como un neuroquímico que dura muy poco tiempo en el hipocampo (lugar en donde almacenamos recuerdos); la oxitocina la liberamos al besa, al abrazar y al tener orgasmos. La forma en la que duramos tanto tiempo enamoradas es porque el contacto físico mantiene a la oxitocina viva en el hipocampo.

Gracias a la dopamina y oxitocina las lesbicanarias solemos tener relaciones más intensas, ya que liberamos mayores cantidades a comparación de los hombres.

Fase 2: Amor Crítico

Entramos en la segunda etapa, cuando pasan los 3 años de relación; la dopamina se ve menos dentro del organismo; por eso le llamamos a esta etapa ‘Amor crítico’ porque nos ponemos un poco más racionales; las emociones y sentimientos pasan por el filtro de la lógica. El organismo es tan selectivo ahora, que pide más neuroquímicos para sentir felicidad y como ya no liberamos tantos como antes cada vez es más difícil lograr la satisfacción en la relación. Si el interés aun existe por los dos lados, el hipotálamo de ambas recuperará esas memorias bonitas y lograrán regresar a la Fase 1.

«Así que, nosotras sólo…Tenemos que hacer que funcione»

Fase 3: ¡Peligro, peligro!

Llegar a esta etapa sólo indica que no lograste ponerle un freno al proceso y pasaste las fases en linea recta; la ruptura fue inminente y sólo queda pasar el duelo. Los expertos dicen que por cada año de relación que se tuvo las mujeres tardan aproximadamente 3 meses en recuperarse.

Muchas veces las relaciones no terminan del todo bien, aunque no lo crean, los expertos dicen que es lo mejor que puede pasar, ya que terminar mal implica un poco de dolor y odio dentro del proceso, eso activa zonas del cerebro que ayudaran a que los niveles de dopamina se regulen y lleguemos al punto de estabilidad de nuevo.  ¿Podremos entender por qué no es bueno regresar con una ex?

Nadie dijo que el amor fuera fácil, es un ciclo bastante completo y complejo, pero no podemos negar que muchas de nosotras disfrutamos las primeras Fases. De acuerdo a la gente que se tomó el tiempo para investigar todo este ciclo, la fase 1 puede permanecer por muchos muchos años, todo depende del interés de ambas personas en mantenerse en determinada etapa.

Así que, para todas las Lesbicanarias empezando relaciones en esta época llena de todo tipo de amor, las invito a cuidarse mutuamente y evitar llegar a etapas nada agradables, para las que están en la fase 2, les recomiendo que hagan cosas que les recuerden cosas hermosas de sus inicios o bien creen nuevos hermosos momentos; por último, para las chicas que vivieron la fase 3, sólo puedo decirles que siempre llega la persona indicada, la que las hará sonreír y disfrutar mucho esta época del año.

¿Qué opinan Lesbicanarias?