¡Buenas, Sense8 ya está aquí! Tras el final del capítulo anterior Riley no ha tardado en convencer a sus sensates y subirse a un avión rumbo a Chicago. Más o menos, porque Will no las tiene todas consigo y se pone un poco en plan “nononono, esto es muy mala idea”. Que vale que estés preocupado porque la quieres mucho pero no mola que te pongas en plan controlador, no mola nada. Menos mal que está ahí tita Nomi para interceder y calmarlos a ambos.
Nomi y Amanita están en una cabaña, pero está ahí Bug ayudándolas vía webcam para que el clúster permanezca atento a los niveles de seguridad en aeropuertos y demás. Por su parte Kala está un pelín enfadada porque leyó unos informes y resulta que la compañía está enviando antibióticos viejos y caducados a otros países como si fuesen medicinas supermolonas para personas con VIH, pero Rajan le explica que es un procedimiento estándar que hacen todas las compañías farmacéuticas. MUY MAL ESTO. Además no va el tío y la intenta tranquilizar diciéndole que esos productos se envían a otros países, como a África. Y entonces Capheus se entera de que podrían ser los que envían a Kenya y este es el empuje definitivo que necesita para ceder a la petición del partido que habló con él e involucrarse en política.
Volviendo a Nomi y Amanita, están cenando con la madre y los padres de Amanita que, aclaro, tienen una relación poliamorosa y son increíblemente abiertos de mente y maravillosos. De verdad que creo que Amanita es lo puto mejor por la educación que recibió. BLESS THEM. De hecho, ninguno sabe ni ha querido saber nunca quién es el padre biológico de Amanita porque no importa. Claro que no. Nomi adora a su suegra y suegros tanto como nosotras y está feliz de la vida ahí. Es que comparad con cómo la han tratado sus padres a ella… Dan ganas de llorar.
Menos mal que tiene a Amanita y a su nueva familia sensate ahora. Por su parte Lito, Hernando y Daniela regresan de Sao Paulo y se encuentran en casa con una sorpresa nada agradable, porque Joaquín ha reaparecido con el padre y la madre de Daniela para llevársela de vuelta. Vaya mierda de padres, otros que tal bailan. No todo el mundo tiene la suerte que tiene Amanita. Daniela dice que no se va a mover de allí ni cuando la amenazan con dejarla sin un duro, que es feliz por fin, que esa es su familia. Lito y Hernando también la rodean como quien “es nuestra mariliendre y la queremos”, así que frente a eso poco queda que decir. Joaquín y sus padres se van y un problema menos.
Nomi y Amanita están pasándolo bien bailando en la cocina mientras limpian, pero Will no las deja ni cinco minutos tranquilas y visita a Nomi del tipo ¿llegó ya Riley? ¿y ahora? ¿Y ahora? La están controlando para ver si su carné de identidad falso no da ningún problema al pasar por seguridad. Que digo yo que si es por eso puedes visitarla porque sois sensates. OS RECUERDO.
Yo también estoy un poquito preocupada, not gonna lie, pero Will ha avisado a su amigo policía para que la acompañe, a pesar de que está bastante cabreado con él porque no sabe dónde está ni qué es de su vida. Riley le cuenta lo de las “voces en su cabeza” y que una de ellas es Will para que entienda que está allí con ella. Que fijísimo que lo va a entender, oye, a mí me dicen eso y lo primero que pienso es ¿has tomado tu medicación? pero ok. Además, que es un alucine lo larga que tienen la lengua para contar que son sensates, como si una organización multimillonaria no estuviese asesinándolos por medio mundo. Obviamente no se lo cree, así que Will decide llamarlo por teléfono en ese momento para disculparse.
Rajan se disculpa con Kala, la madre de Capheus se enfada un poco cuando se entera de que se va a meter en política y blablabla. A lo que verdaderamente hay que prestar atención es a Sun visitando la tumba de sus padres en una escena superbonita. Que ojalá una fila de súbditos que le fuesen besando los pies o las musas de Hércules cantándole que es una puta ama, porque es lo que se merece con ese porte y esa elegancia y ese molonguismo y ese vestido que le sienta tan bien. Además se emociona bastante hablando allí a su recuerdo y esta actriz llora de forma muy realista. La quiero mucho.
Menos mal que tiene a su clúster, que enseguida la visitan y la reafirman en que decida lo que decida estarán ahí apoyándola. Y ojalá decida cortarle los huevos a su hermano, la verdad. Es lo único que pido. VENGANZAAAAAAAA. Después aparece por allí el policía de siempre, que por algún motivo la sigue y no la deja en paz (estás obsesionao, chaval) y le asegura que está de su lado y quiere ayudarla. Sun se pone en plan “tú de qué vas, tolai? Yo no necesito a nadie que me proteja, me basto solita”, así que deciden tener un combate por sugerencia del policía en plan si yo gano, me dejas que te ayude. Sun está como “bufff, qué pesao”, y tira el bolso a un lado hartita de la vida. Y lo que sigue es una escena que mirad lesbicanarias, yo no soy de solucionar las cosas a golpes, pero esto me hace replantearme muchas cosas porque Sun es brutal y verla pelear da directamente Stendhal. Y además tienen un intercourse ahí breve y se besan en medio de la acción porque se nota que hay una tensión sexual no resuelta grande, con lo cual Sun aprovecha y le hace una llave para dejarlo dormidito en el suelo. ÍDOLAAAA!
Tras la euforia del Orgullo de Sao Paulo, Lito regresa a su agencia con mucha energía, pero le dicen que se la guarde porque ya no lo representan. La bajona, tías. Todo se debe a que hay muchos señoros que ponen el dinero que son una panda de homófobos. ¿A QUE LES METO UN MECO? Nomanita siguen investigando sus cosas y descubren que el tío que acaba de cometer un tiroteo es Todd, uno de estos del clúster de Angelica que le sale a Nomi en los recuerdos.
Y se le queda esta cara. Todo esto porque Amanita no podía dormir y se puso a investigar en cama con el móvil porque es maravillosa, no hay novia igual, cómo se quieren, cómo se apoyan, me da algo.
Volviendo a Riley por fin sabemos qué es de ella en Chicago porque gracias al Archipiélago de las narices le han organizado una reunión con esa supuesta persona que conoce a Whispers. Nomi rápidamente avisa de que Whispers ha estado en prisión desde que no saben nada de él porque zombieficó a Todd para matar a un político. Riley tiene que ir a una iglesia abandonada y bajar unas escaleras un poco chungas pero lo tiene que hacer sola, esas son las condiciones. Así que sin poli amigo ni nada se adentra ahí como una campeona y a mí se me sube el corazón a la garganta. Allí se tiene que tomar un bloqueador que le han dejado estratégicamente en una mesita porque así tampoco están con ella sus sensates. Justo después aparece una señora que le da una dirección. Cuando Will va allí pensando en matar a Whispers va y se le aparece Jonas. ¿Pero este no estaba muerto?, estaréis pensando. Pues me quedo igual que vosotras. ¿Qué pensáis? La trama es un lío padre y yo echo de menos más escenas de Nomanita, pero es que todos son muy majetes y hay que quererlos, así que cero quejas por mi parte.