En el capítulo anterior de Wynonna Earp nos dejaron la cabeza del revés contándonos todo lo que pasó en el pasado con Bobo y Doc, así que toca ver cómo enfila la serie esta recta final con tantísimas revelaciones. De momento Waverly y Wynonna no pierden el tiempo y están entrenando duramente porque tienen que estar preparadas para patear culos cuando la situación lo requiera. Sobre todo Waverly, que está ahí con dos palitroques cual ninja y ojito eh, OJITO CON ELLA, que los maneja muy bien y da un miedo de cagarse.
Pero cálmate, animal, que tu hermana está embarazada y le puedes dar en la pancita. Aunque a ver si os pensáis que eso impide a Wynonna hacer volteretas hacia atrás y ganar a Waverly, que termina con su culo y espalda en la colchoneta. Aaaaamigas, no contabais con super Wynonna. Y durante la pelea Wynonna intenta azuzarla recordándole a Nicole, porque está enfadada con ella todavía, lesbicanarias. Hace dos días que no hablan.
Doc entra a una especie de anticuario que también es ¿bar? No entiendo nada de Purgatory. El señor de la tienda ve su anillo y quiere comprarlo pero Doc le dice que tararí que te vi. Eso sí, le consigue vender un cuadro que es feo hasta los tuétanos. Y luego vemos que en realidad este tipo tiene una cola de demonio. ¡No nos lo esperábamos para nada!
Dolls está como muy sonriente y contento con esto de no tener a Black Badge comiéndole el culo y ahora que le han dado una dosis de suero efectiva que lo hace estar de puta madre. Para agradecerle a Rosita le regala una tarjeta-regalo para un spa. Para dos. Sí, exacto, para ella y para Doc. Como si Doc quisiese ir a un spa… o a algo con Rosita. Es que no se la merece, ¿eh?
Mirad qué carita le pone a Doc incluso cuando no le quiere dar un beso de buenas noches y prefiere irse con Wynonna a cenar a su casa. ¡A Rosita hay que protegerla!
Entre tanto, Nicole y Waverly siguen sin hablarse y cuando Nicole va a la oficina donde está con Doc y Dolls se nota la tensión. Viene a avisar de que han encontrado un cuerpo y Waverly le dice si no será el cuerpo de otra persona que ella robó y escondió como si tuviese derecho porque está muy picada con lo de sus resultados de ADN. Let’s keep it professional, Waverly. Así que salen a hacer trabajo de campo y se encuentran con un cadáver carbonizado que identifican como Tucker porque lleva una pulserita identificadora de esas que dicen a que es alérgica cada persona.
Se lo cuentan a su hermana (que es una de las Viudas, pero ellos no lo saben), que tampoco es que esté muy afectada y lo que quiere saber es cuando se lo puede llevar lo más rápido posible. Así que cuando Dolls le quiere hacer preguntas sobre si sabe algo de dos Viudas, la tía finge un desmayo. QUE SE TE VE EL PLUMERO, GUAPA. Pero cuando despierta se encuentra con la carita de Waverly y esa es una forma muy bonita de despertarse siempre. Waverly simpatiza con ella porque… ¿quién sabe por qué? ¿No tienes ojos para ver que esta chica es mala espina, Waverly? Lo peor es que aparece por ahí Nicole y a la tía no se le ocurre otra cosa que disculparse ante las dos por la actitud de Tucker, algo a lo que Waverly es muy receptiva pero Nicole no tanto. Y yo aquí estoy con Nicole 100% porque la pava esta pretende comparar la obsesión enfermiza de Tucker con que a Nicole le guste Waverly porque es lesbiana, porque “lo que para algunos es algo desviado para otros es normal”. PERO SERÁS ASQUEROSAAAAAAAAAAAA. Ante esto Nicole se rebota un poco, como es normal, pero Waverly aquí defiende a la Viuda y le dice que si necesita algo que la avise. Mira, Waverly, get your shit together.
Nicole: No puedo creerme que esté intentando racionalizar el comportamiento de su hermano.
Waverly: Él está tumbado en una mesa quemado y esperando a ser reconocido. A veces mentir es una cuestión de amabilidad.
Nicole: Sí, ya intenté eso. Contigo. Y míranos ahora. Waverly, esa chica que Tucker secuestró y se llevó a tu cuarto… Él quería que fueses tú. Confía en mí, ¿vale? Si hubieses visto la mirada de sus ojos nunca…
Waverly: ¿Sabes que no haría nunca? Decirte lo que debes pensar o sentir.
PERO BUENO. HACED LAS PACES AHORA MISMO. ¿Qué va a ser esto? No me gusta que estéis enfadadas. Y aunque Nicole hizo bastante mal en eso de ocultarle sus resultados a Waverly creo que aquí tiene toda la razón. Esto de defender a Tucker no eh, NO.
La cena entre Doc y Wynonna va regular porque la cocina no se le da muy bien a nuestra cazademonios. Además Doc le ha llevado el cuadro de las narices que veréis la que lía, pero aquí lo importante es que Wynonna sabe que el tercer sello es su anillo, así que tal cual se lo cuenta, así como su intención de romperlo. Mientras, Rosita y Waverly beben juntas en el bar para pasar las penas. Como están las dos con la bajona, Rosita tiene una idea revolucionaria porque recordad que todavía tiene el regalo que le ha hecho Dolls para irse a un spa así que se lleva a Waverly.
Y de repente así como de la nada el capítulo sube x100 en nivel de lesbianismo, gracias a los cielos. Estábamos muy necesitadas.
Wynonna y Doc están hablando del tema sello porque Doc no quiere que rompan su anillo, recordad que es el que hace que no envejezca y parezca un buen partido para Wynonna, porque en realidad tendría como muchísimos años que no quiero ni contar y no sé cómo a alguien no le da un poco de repeluco esto. El caso es que mientras están ahí teniendo importantes conversaciones escuchan algunos sonidos sospechosos y se ponen alerta.
Volviendo a lo importante, Rosita y Waverly están tomando champán y confraternizando. Así descubrimos que Rosita es muy inteligente y tiene nada menos que dos (DOS) doctorados/casi tres. Waverly está muy atenta a su historia pero Nicole no le deja de mandar mensajes. Rosita intenta animarla a que responda porque hay muchos “lo siento” en la pantalla. Así que Waverly le manda un mensaje un poquito agresivo diciendo que ya le contestará cuando le apetezca y luego se arrepiente. Rosita está ahí poniéndole el hombro y siendo muy molona y ojalá amigas para siempre, pero entonces a Waverly no sé qué impulso le da y la besa. LA BESA.
ESTO YA NO ME GUSTA TANTO. Nada de cuernos, ¿qué haces? Dios, todo mal. Que está muy bien que seáis amiguis, pero SÓLO ESO. Waverly enseguida se arrepiente y recuerda que tiene novia. Pues estaba bien que te acordases antes, cariño. Luego Rosita también dice que ella tiene a Doc, por si no quedó claro. Y es todo un poco awkward así que Rosita se levanta y se va. Más tarde Waverly va a disculparse con Rosita porque estaba siendo muy guay y todo eso, para que no le dé mayor importancia, pero justo se encuentra a Tucker (¿pero este tío no estaba muerto?) y Rosita está muerta en el suelo. ¡Que me ha matao a Rosita, lo reviento!
En otro orden de cosas, Jeremy y Dolls están investigando por su cuenta porque han descubierto pruebas de que las dos hermanas son las Viudas. Y hablando de ellas, Tucker le dice a Waverly que lo que quiere es protegerla de esas dos. Como Waverly ve que no puede escapar de la escoria esta, decide jugar un poco con la idea idílica que tiene este tío de que están hechos el uno para el otro. Es decir, manipularlo. Así descubre información como que las Viudas no son sus hermanas, al tiempo que Dolls encuentra a una de sus verdaderas hermanas todavía viva en un cobertizo sin cara. Y tema aparte, de verdad que necesitamos hablar de la cara de Tucker, que como ha sufrido síntomas de congelación tiene trozos negros que no entiendo muy bien. ¡Que se nota mucho que están pintaos, Mari Carmen!
Waverly aprovecha para camelarse un poco a Tucker, que así le permite llamar a su hermana con la excusa de que es para “despedirse”, pero le salta el buzón de voz. Esto es porque anda muy ocupada discutiendo con Doc y luchando contra una muñeca gigante que parece que ha salido del cuadro en cuestión y es la que termina cogiendo el anillo cuando él lo tira por los aires. Pero se la cargan y lo recuperan, así que Wynonna le promete a Doc que no romperá todavía el anillo, pero que necesitan un plan para romperlo a la larga juntos. Doc finalmente accede y se lo entrega. ¿De verdad tanto me discutís para esto? En ese momento el cuadro en cuestión entra en combustión espontánea allí mismo.
Al final nos quedamos tranquilas. Rosita no está verdaderamente muerta porque es un demonio. ¡Así como os lo cuento! Un demonio “bueno” entendemos, porque salva a Waverly y ambas consiguen escapar de Tucker. Por eso el tío vuelve a las faldas de su “hermana”, que lo congela y empieza a comérselo. Su otra hermana anda por el medio del bosque intentando hacer su propio hechizo para encontrar el tercer sello, ahora que cada una va un poco a su aire.
Cuando por fin pueden Waverly y Rosita se ponen un copazo. Realmente lo necesitan. Waverly le agradece que le haya salvado la vida, aunque no puede evitar estar un poco traspuesta porque es un demonio, un revenant, y eso le crea un cierto conflicto. Pero también es una persona maravillosa, en sus propias palabras. Es que no tienen por qué ser cosas excluyentes, digo yo. Waverly le promete que no le contará nada a Wynonna porque si no le tendría que contar también que ella misma puede ser medio demonio. Así que ahora las dos tienen algo fuerte en común que esperemos que no pase de amistad porque mira, me voy a enfadar. De momento no parece que vaya a ser así porque Waverly está muy arrepentida por haberle mandado ese mensaje tan cruel a Nicole, así que Rosita básicamente le da una patada en el culo para que vaya a recuperar a su chica. ¡Así sí!
Pero para acabar nos tienen que dar un vuelquito al corazón y la que aparece en la puerta de Nicole no es Waverly sino Mercedes o la versión viuda-demonia de Mercedes. Y van y nos dejan así. ¿Estará en peligro nuestra Nicole? Y justo ahora que parecía que iban a hacer las paces. A mí no me dejéis así, ¿eh?
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