Estamos de enhorabuena gente porque John Biden acaba de firmar una orden ejecutiva que levanta el veto a las personas transgénero en el ejército. El veto jamás tendría que haber sido impuesto, pero ya conocemos a Trump. En uno de esos arrebatos que le entraban a veces cuando quería agitar a las masas, decidió que la gente transexual en el ejército costaba mucho dinero. No importó que a la hora de las estadísticas USA gastará 10 veces más dinero en viagra que en sus soldados transexuales, porque el verdadero quid del a cuestión no era el dinero. Así que, para tristeza de todos nosotros un 23 de marzo del 2018 se empezó a aplicar la medida que prohibía de manera efectiva que las personas transgénero pudieran ser parte del ejército americano.

Pero como decía mi abuela: no hay mal que dure cien años ni cuerpo que lo aguante. Y afortunadamente ya pasó la racha de Trump y una de las primeras cosas que ha hecho Biden al entrar es eliminar esta prohibición y devolver la igualdad en el ejército. La Casa Blanca expresó así el razonamiento del nuevo presidente para cambiar la política en esta materia:

El presidente Biden entiende que la identidad de género no debe ser una barrera para el servicio militar, y que la fortaleza de Estados Unidos se basa en su diversidad. Permitir a todos los estadounidenses cualificados servir a su país en uniforme es mejor para el Ejército y mejor para el país, porque una fuerza inclusiva es una fuerza más efectiva. Expresado de manera sencilla, es hacer lo correcto y es por nuestro interés nacional.

Vivas en el país que vivas, esto nos demuestra lo importantísimo que es no dar nuestros derechos por sentado y seguir votando por aquellas personas que luchan por la igualdad. Pero hoy estoy muy contenta por esta nueva victoria para las personas transgénero en USA.