Esta semana Mujeres Desesperadas me ha sorprendido señoras, porque la serie se nos ha puesto lesbicanaria. La verdad es que ya sabía que iba a pasar algo pero no me hacía ilusiones. La serie ya ha mostrado cosillas pero todas se quedaban en nada, así que pasaba un poco un kilo. Pero el primer episodio de esta nueva historia entre Katherine y Robin promete. Y por eso he decidido hacerles un resumen lesbicanario.
¿Preparadas? Pues las invito a conocer la historia de Robin.
Para introducirlas un poco a la historia, les cuento que Robin (Julie Benz) es una ex striper a la que Susan le ha dado asilo en casa para echarle una mano. Y Katherine (Dana Delany) acaba de regresar a Wisteria Lane después de haber pasado por un hospital mental porque estaba más loca que una cabra. Ese es el resumen (corto pero es que si nos enredamos en ello perdemos el hilo).
En fin que nuestra historia comienza con Robin llevándole a Katherine unas cartas que Susan le pidió que le entregara. Las dos hablan un poquitín y la rubia le pregunta que como está porque sabe que acaba de volver del hospital. Kat le responde que es raro estar viviendo sola sobre todo porque todo el mundo la mira de reojo, así que Robin le dice que si busca compañera de piso le avise porque ella también necesita mudarse de la casa de Susan.
Si te sirve de algo, podría quitarte el foco de encima. Nadie juzga a una mujer por su locura cuando hay una stripper al lado.
LOL, me encanta esta mujer. Esa clase de sabiduría no se obtiene de un día para otro. Y por supuesto con una propuesta acompañada de semejante sonrisa una no puede decir que no, así que de esa manera Katherine y Robin pasan a vivir juntas.
La siguiente escena vemos a las chicas empezar a acomodar las cosas de Robin en casa. La rubia piensa que deberían celebrarlo saliendo a beber algo, pero Katherine dice que aún se siente rara cuando convive con gente y no le apetece. Robin es bastante directa y le pregunta: ¿Cómo es vivir en un hospital mental? Kat se incomoda un poco pero le responde que tan divertido como podría parecer.
Robin le responde que se lo ha preguntado por su madre de pequeña solía pegarle y ella soñaba con internarla. Kat le dice que lo siente y ella le dice que solo era cuando estaba borracha, que era la manera en la que se desquitaba de todos los cuernos que le ponía su padre. Que ella deseaba que él fuera feo para que las mujeres no lo quisieran pero el hombre se parece a Clint Eastwood. Entonces Robin le confiesa que estar en el hospital fue horrible. Que la gente piensa que los gritos son lo que te pone peor, pero que a ella lo que realmente le molestaba era la gente que se quedaba quieta como si estuviera fuera de sí. Entonces Robin le hace una broma y su humor cambia y al final deciden irse de copas.
Una vez comenzado el acto de beberse unas copichuelas, Katherine decide que en pos de la buena comunicación y ya que ella se ha sincerado con lo del hospital, le toca a Katherine explicarle como es vivir como una stripper. Yo diría que es justo:
Uh, era brutal. Si me hubieran dado un dólar por cada tío que me daba una nalgada en el trasero solo porque se le antojaba…mmm ahora que lo pienso… ¡me lo daban!
LOL ¡Me encanta su sentido del humor! Las chicas se ríen, pero se ven interrumpidas por un caballero que las invita junto con su amigo a una copa. Robin le dice que es noche solo de chicas y él responde que si se animan estarán por el lado contrario del lugar. Cuando se va Kat le confiesa que le hubiera gustado ir, así que Robin le dice que lo van a hacer:
Te ves demasiado sexy como para desperdiciarlo solo conmigo.
Así que las dos se van a sentar con los tíos pero los dos no hacen más que tirarle los perros a Robin que hace todo lo posible por hacerles entender lo interesante que es Katherine.
Pero ellos insisten una y otra vez en preguntarle a Robin que a que se dedica, hasta que Katherine pierde los nervios y prácticamente les grita que era stripper. A ellos se les cae la baba, Robin se incomoda, Katherine también y ambas deciden irse.
Tío: ¿Cómo que te vas? Aún no hemos bailado.
Robin: Yo no tengo ganas de bailar, pero no puedo hablar por Katherine.
Tío: Pero yo quería bailar contigo.
Robin: ¿No te atrae una chica elegante, ingeniosa, por no decir tan preciosa que te quita la respiración?
Tío: Sin ofender a tu amiga, tú eres más mi tipo.
Robin: ¡Oh!, bueno, en ese caso, me la quedare toda para mi solita.
Pasado el beso, Robin se gira a despedirse de los tíos que se han quedado con cara de What! y se marchan totalmente botanas.
Más adelante ya en casa, las dos se ríen de las caras que tenían los hombres y que según Robin son de: «estoy-tan-caliente-y-me-voy-a-ir-a-casa-solo» LOL, yo coincido con su apreciación. La rubia le dice a Kat que la próxima vez que quiera escaparse de una mala cita ya tiene como hacerle. Katherine sin embargo ha decidido después de semejante intento que deja lo de salir con hombres, que ella dejará de tener citas.
Katherine: Es momento de dejar a los hombres.
Robin: ¡Amén hermana!
Katherine: Es oficial, mis días de citas se han terminado.
Robin: No tienes que ir hasta ese extremo. Siempre puedes hacer lo que hice yo y explorar otras opciones.
Katherine: ¿Qué quieres decir?
Robin: ¿Tirar una red más grande?, ¿Expandir tus horizontes?#8230;salir con tías.
Katherine: ¿Entonces tu eres…?
Robin: Tengo hasta la credencial.
Katherine: Ya decía yo que ese beso era muy convincente.
Robin le cuenta que salía con chicos pero nunca sintió un clic, pero cuando se convirtió en stripper y se encontró rodeada de todas esas mujeres guapísimas y seguras de sí mismas se dio cuenta de que había bateado para el lado equivocado. ¡Robin guapa, te entendemos, todas las lesbicanarias nos hemos visto iluminadas por la misma revelación!
Katherine sin embargo le dice que ella non sono lesbica, que ha estado bateando para el lado correcto, lo que pasa es que ya está cansada de batear. Robin sonríe y le dice que está bien, pero a mitad de camino se detiene y le pregunta: «No tienes problemas con esto ¿verdad?, quiero decir, no va afectar lo nuestro», Kat le dice que para nada pero se bebe la copa de un solo trago LOL.
Al final del episodio hacen un pequeño repaso de la introducción del personaje de Robin a la historia mientras muestran sus interacciones con todo el mundo en Wisteria Lane.
Robin Gallagher tenía razón. La gente que había conocido en Wisteria Lane realmente la veía. Y vieron su sentido de la moralidad, su corazón leal, su visión sorprendente, su naturaleza dada a perdonar. Alguna gente incluso se dio cuenta de su increíble belleza.
Y se han sorprendido al descubrir…que les gustaba lo que veían.
¡Yeiiiii! contenido lesbicanario FTW!, y en el adelanto de la próxima semana ya nos han prometido más rollito. De momento sé que el personaje de Julie Benz tiene firmados solo 3 episodios con la serie. Pero cuentan las malas lenguas que a los jefazos les ha gustado lo que han visto y podrían alargarle el contrato. ¡Crucemos los dedos!
Yo es que amo a la mujer por su personaje de Rita en Dexter, que por cierto las fans de la serie sabrán lo que siento cuando les digo que aún no he superado el final de la cuarta temporada y las no fans lo entenderán cuando la vean. Pero en fin, que ha sido divertido verla en este arco argumental ¡ojalá que nos dure!