Callie y Arizona: resumen de episodio 12×01

La temporada pasada tuvimos todas que superar la pérdida de la pareja de Callie y Arizona. No estoy muy segura de haberlo conseguido, porque para ser sincera en el fondo todavía tengo esperanzas de ver a estas dos juntas en un futuro, pero por lo pronto empezamos esta nueva temporada de Anatomía de Grey con nuestra doctoras favoritas viviendo sus vidas locas por separado.

Este episodio lo comenzamos con Arizona colgando el típico cartelito para compartir habitación. Todo parece indicar que a rubia vive de momento sola pero quiere compañía. Igual no nos centramos mucho en esto de momento porque justo pasa Avery y la patinadora aprovecha para preguntarle si está emocionada por el regreso de April, que al parecer vuelve justo ese día. Pero él sigue aún muy dolido porque ella decidió marcharse y se muestra indiferente.

Sufro mucho por April, porque sé que esto le va a doler, pero por otro lado pienso en las posibilidades, porque Arizona necesita una compañerita de piso y no es por nada pero ella y April hacen muy buenas migas. Sería ideal ¿no creen?

Callie y Arizona no están juntas, pero aparentemente siguen viviendo vidas paralelas, porque lo siguiente que vemos es a Callie haciendo exactamente lo mismo, osea preguntarle a Avery a qué horas va a ser la bienvenida de April. Él se nefastea mucho de que todo el mundo asuma que se organizará algo, pero ¡señor!. Afortunadamente siempre podemos contar con Callie para expresar nuestros sentimientos.

Callie: ¿Deberíamos hacer espacio en urgencias para sacarle a Avery el insecto del trasero?

LOL, ais Callie te amo. Luego vemos a Owen pedirle consejo, porque tienen dudas sobre si debería invitar a Amelia a ir con él a un concierto. Callie lo mira con cara de «pequeño, te queda tanto que aprender» y le dice que está pensando demasiado las cosas, o lo que es lo mismo, que mueva ficha.

Luego las cosas toman un giro menos divertido, porque llegan dos ambulancias con dos niñas que acaban de ser atropelladas por un tren. A Callie le toca atender a Jess, la única que viene consciente, que le cuenta que se le quedó atorado el pie y la otra chica intentó ayudarla a soltarse. La pobre está muy preocupada, aparte de asustada y adolorida. Y la otra chica está bastante mal también, de hecho tiene la pierna tan girada que, el residente de turno al recibirla se asusta tanto que no sabe que hacer.

Callie entonces aprovecha para tranquilizar a Jess y decirle que todo va a salir bien y que las van a cuidar a las dos. Y mientras lo hace se da cuenta de que Jess tiene un tatuaje de corazón en el brazo.

Ya dentro, Callie se concentra en la pierna de la otra niña que, como les dije antes está realmente mal. También tiene rota la cadera y muchas heridas internas. Mientras la preparan para cirugía están intentando averiguar su identidad, pero no trae nada que la identifique y tienen que intubarla. Entonces al revisarle el brazo Callie se da cuenta de que tiene un tatuaje exactamente igual que el de Jess, con lo que es obvio que se conocen.

La morenaza va entonces hacia donde están tratando a Jess y le pregunta el nombre de la otra chica, pero de primera mano Jess niega conocerla hasta que Callie le dice que tienen el mismo tatuaje. Y Jess confiesa que las dos estaban juntas y que la otra chica se llama Aliyah

Callie: No se te atoró el pie ¿verdad? Cariño, cuéntame ¿qué ha pasado?
Jess: Solo queríamos estar juntas. Vivas o muertas.

Con esta revelación las cosas cambian considerablemente y entre los corazones y el intento de suicidio, Callie tiene claro como nosotras que estas dos pequeñas son lesbicanarias. Así que Callie empieza por contarle que ella es bisexual y le gustan tanto las chicas como los chicos para luego preguntarle si a ella le gustan las chicas y Aliyah en especial. Y la peque le responde que sí, que están enamoradas.

Jess le cuenta que estaban ahí porque sus padres van a enviarla a uno de esos campamentos para «curar la homosexualidad», las dos pensaban que era la única opción que tenían para poder estar juntas. Callie le intenta explicar que morir no soluciona nada y que aunque en ese momento no lo vea hay muchas más maneras de estar juntas.

Tanto Maggie como Callie y Alex se sienten muy empáticos con la situación de Jess, que lo está pasando muy mal y encima no quiere que llamen a sus padres porque tiene miedo de enredar aún más la situación.

Mientras vemos a los padres de Jess super preocupados por ella y también al padre de Aliyah, que en ese momento se dan cuenta de que sus hijas estaban juntas. La madre de Jess se indigna al momento y le dice al padre de Aliyah que aleje a su hija de su niña, pero se ve que él no tenía ni idea de lo que pasaba entre las dos.

Arizona por otro lado mira con preocupación su cartel, porque por es perfecto en todos los sentidos y sin embargo, todos los papelitos siguen en su lugar. Vamos, que nadie se ha interesado por compartir cuarto con ella y este asunto la está mosqueando.

Stephanie le pregunta lo que todas nosotras teníamos en mente. ¿Para qué quiere rentar un departamento si tiene una casa? Y así es como nos enteramos de que la casa que en un momento compartieron ella y Callie ha pasado a mejor vida como su relación. Aparentemente la han vendido. Y ahora necesita compartir su nuevo departamento porque no le llega para pagar la renta porque muchos de sus pacientes no tienen para pagarle y no les puede decir que no les va a curar a sus pequeños humanos. Vamos que hace un montón de trabajo pro-bono.

Sí, sé que es ridículo, sobre todo considerando que Arizona teóricamente tiene un puesto en el que poco no se gana, pero vamos a creer por aquello de seguirles la corriente a los escritores.

En fin, que al final Arizona termina quitando ella misma uno de los papelitos porque es bien sabido por todo el mundo que una vez sale el primero es más fácil que se vayan los demás.

Mientras preparan a Jess para cirugía, la pequeña le cuenta a Callie que su novia le había dado muchas cartas y que ella las guardaba debajo de su cama para cuando le venían días malos. Callie le pregunta por esos días y ella le dice que les hacían bullying en la escuela y lo pasaba mal, pero las cartas la hacían sentirse mejor. El problema es que su madre las encontró y aparte de quemarlas todas ha decidido mandarla al campamento ese del mal.

Luego vemos a Maggie, Callie y Karev explicarle a los padres de Jess las lesiones que tiene y los pasos que darán en el quirófano para tratar de curarla. Los padres están muy nerviosos y cuando los doctores se giran para prepararse para la operación, la madre y el padre discuten porque ella cree que si no fuera por él la niña estaría ya en el campamento y nada de esto habría pasado.

Callie está escuchando toda la conversación y se va poniendo cada vez más tensa por más que Karev y Maggie intentan tranquilizarla, hasta que llega un punto en el que ya no puede más y se baja de nuevo para hablar con los padres.

Callie: Lo siento, pero no creo que entiendan como funcionan esos lugares. Sé que quieren ayudar a su hija pero esa clase de campamentos es horrible. No le van a dar la clase de apoyo que ella necesita.

La madre no acepta de buena manera la opinión de Callie y prácticamente la amenaza y le dice que deje de meterse en su vida y se dedique a hacer su trabajo. Cosa que deja totalmente furiosa a nuestra morena que todas sabemos que no lleva muy bien a la gente imbécil. Igual ella intenta explicarles una y otra vez que Jess se tiró a las vías del tren porque tiene miedo y que en ese lugar lo va a pasar fatal, pero la mujer no está dispuesta a escuchar, así que Callie termina marchándose.

Arizona por su parte sigue chinchando a Avery con lo de April, porque le preocupa que su amiga llegue y se encuentre con que su casa está cerrada a cal y canto y no tiene donde quedarse. Él la mira con desdén y le dice que está harto de que todo el mundo se quiera meter en su matrimonio.

Viendo la situación, la patinadora coincide conmigo y cree que igual April puede ser su compañera de piso. Pero Stephanie dice al instante que seguramente no, así que Arizona sospecha que hay algún motivo porque el que nadie quiere compartir casa con ella. Eso sí, Stephanie sale corriendo por patas y la deja con la duda existencial.

En quirófano, Callie, Maggie y Karev hablan sobre la pobre de Jess y lo sola que debe sentirse, luego la discusión gira al tema del bullying y descubrimos por un lado que Callie solucionó sus problemas con el bullying a base de darle un piñazo al primero que quiso molestarla. Maggie no lo pasó tan bien por desgracia y cuando cuenta su experiencia a todos se nos ponen los pelos de punta.

Arizona por otro lado decide que descubrirá por qué nadie quiere vivir con ella así sea lo último que haga, así que agarra a Stephanie y la amenaza con aburridas guardias por el resto de su vida a menos que suelte la sopa y consigue resolver su duda:

Stephanie: Eres una leyenda entre los residentes y los internos.
Arizona: Continua…
Stephanie: Eres uno de los cinco «Seattle Grace».
Arizona: Sobreviví a un accidente de avión. ¡Que gran cosa!
Stephanie: Y un accidente de coche y una balacera en el hospital. Puede que seas inmortal. Conseguiste graduarte de una de las especialidades más exclusivas más o menos en una noche y después te quedaste con el trabajo y la visión de Herman.
Arizona: Vale eso es…
Stephanie: Te has acostado con un montón de residentes y luego has conseguido que los despidan. Hablas extremadamente rápido, demasiado rápido para ser humano. Tienes un nombre muy raro.

¡LOL! Que gracia me ha hecho todo esto. ¡Tendremos que cambiarle el nombre una vez más a McHero! La patinadora intenta defenderse diciendo que en realidad solo se acostó con una residente y que su nombre es muy bonito. Luego pregunta por su pierna porque ¿formará parte del problema?

Stephanie: Dicen que tienes las dos piernas y que estás fingiendo que te amputaron una para quedarte con el aparcamiento.

¡LOL! Pobre Arizona. Se queda de piedra con toda esta nueva información. Su reputación en el hospital al parecer se ha ido modificando a través de los tiempos.

Mientras tanto Callie decide hablarle a servicios de protección del menor para explicarles la situación de Jess. Se ve que la mujer está buscando alguna forma de echarle un cable porque se da cuenta que lo va a tener muy crudo y por otro lado ella sabe muy bien lo que significa que tu familia no te acepte como eres. Justo eso le está platicando a Maggie cuando entra la madre de Jess fúrica porque ya le ha llegado la noticia y quiere matar al culpable.

La tía empieza con su discurso homófobo super indignada pero pasa a Callie y se centra en Maggie que la mira con pánico como recordando esos tiempos en los que otros la molestaban y de repente:

¡Lol! Fue un momento muy grande lesbicanarias. Muchas de nosotras hubiéramos querido hacerlo, yo desde luego grité de emoción y todo. Eso sí, jamás me habría imaginado que sería Maggie quien soltara el puño.

Lo siguiente que vemos es a Callie totalmente emocionada curándole la mano a Maggie. Amelia está también ahí echándole porras y diciendo que hubiera pagado por verlo. Meredith se une al grupo, pero ella está más bien en modo mamá preocupada por las posibles repercusiones. Callie por su parte le da consejos a Maggie para que aprenda a dar un puñetazo sin romperse los dedos XD.

Y justo estamos en esas cuando entra Arizona totalmente emocionada porque le llegó el rumor de que Callie le pegó a un homófobo. Y es entonces cuando vemos prácticamente la única interacción entre Callie y Arizona en el episodio. Y obviamente se las traigo porque hay que atesorar estos momentos.

Por lo visto se llevan super bien. Algo es algo ¿no? Mientras tanto en otra sala, los dos padres de las niñas comparten un momento muy mono hablando sobre ellas y enseñándose fotos mutuas.

Lo siguiente que vemos es a Arizona mirando una vez más su anunció cuando llega el residente nuevo guaperas cuyo nombre aún no he conseguido aprenderme y le pregunta sobre el cuarto que está rentando. Arizona de primera mano duda, porque con todo lo que le contó Stephanie piensa que puede ser porque perdió una apuesta. Pero luego él le explica que no tiene ningún amigo porque todos creen que fingió ser residente adrede y nadie le habla. Así que nuestra patinadora lo adopta y le ofrece el cuarto. ¡Nooooooooo! Yo quería a April :(.

Cerramos el episodio con Maggie intentando pedirle disculpas a la mujer homófoba a la que golpeó. Pero la señora está ahora todavía más enfadada y sigue amenazando con demandar a todo el mundo hasta que su esposo pierde la paciencia y le grita que su hija ha estado a punto de morir y a ella no le importa. Le dice que si sigue la va a dejar y se llevará con él a su hija porque a él lo único que le importa es que ella sea feliz. Y justo en ese momento van llegando con la camilla de Jess que lo escucha todo. Así que parece que este cuanto tendrá un final feliz.

Y así señoras terminamos el primer episodio de Anatomía de Grey de esta temporada. Con un tono muchísimo más ligero y mucha comedia, que ya nos hacia falta. Me gustó ver a April de regreso, aunque solo fuera al final del episodio y sobre todo ¡Bailey es la nueva jefa! ¡Por fin! Ya era hora ¿no creen? ¿Cómo lo han visto ustedes lesbicanarias?