¿Qué tal estáis, queridas lesbicanarias? Yo estoy un poco triste, para ser sincera. Después del viaje tan largo que hemos vivido junto a Max y Chloe, Life is Strange ha puesto punto y final a su historia. Todos los que hemos acompañado a la adolescente en su aventura a través del tiempo seguramente compartimos el mismo sentimiento, pero hemos tenido tiempo suficiente para prepararnos, así que hoy os traigo el último resumen del último capítulo de la aventura gráfica de DontNod.
A estas alturas, si estáis aquí es porque conocéis de sobra la historia de Max Caulfield, aunque me siento obligada a recordar que a partir de la siguiente imagen os encontraréis spoilers trágicos si no habéis jugado el episodio. Si queréis refrescar la memoria antes de coger mi mano y descubrir los entresijos de este quinto y último episodio, no dudéis en echar un vistazo a los resúmenes del tercer y cuarto episodio a través de los enlances, así como la presentación del juego. Allá vamos.
El episodio comienza sin el habitual estruendo que caracterizó a los episodios anteriores. Haciendo memoria, el primer episodio comenzó con la pesadilla de Max en la que visionaba el tornado que asolaría Arcadia Gay Bay al final de la semana; el segundo episodio comenzó con la canción de Alt-J para dar inicio al segundo día de aventura; el tercer episodio comenzó con una suave melodía para dar paso a la investigación por el complejo académico; y el cuarto episodio comenzó con una melodía nostálgica mientras acompañábamos a Chloe por la playa. Pero todo esto ya ha quedado atrás, y ahora el episodio comienza con unas pocas notas que saben casi a agobio cuando reconocemos al instante dónde nos encontramos; la Dark Room.
Tras examinar nuestro entorno, empujamos el carrito y hacemos focus en la foto que hay sobre él. Esa misma foto nos traslada a la perturbadora sesión de fotos con Mark Jefferson, que pasa de su habitual comportamiento distante y educado a un comportamiento propio de un psicópata. Vamos, lo que es. A Max le queda claro que para salir de esta, tendrá que centrarse en alterar pequeños acontecimientos en visitas fugaces al pasado con las fotos que le quedan a mano. La mecánica de volver a un momento anterior, cambiar algún detalle, y volver al presente para encontrarlo ligeramente cambiado se repite hasta llegar al punto de inicio de la aventura; la primera clase que atendimos con Max. Nuestra prota sabe exactamente qué debe hacer para salir de esta, y rápidamente busca(mos) el número de David Madsen para advertirle sobre la siniestra habitación de juegos de Jefferson y así conseguir la ayuda externa que tanto necesita.
Después de sermonear a Victoria sobre su actitud y entregar a Jefferson la foto para el concurso, regresamos al presente, sólo para encontrar que no estamos en la Dark Room, sino que estamos en un avión camino a San Francisco. Al cambiar el pasado y avisar a David, éste fue a la Dark Room y trincó con las manos en la masa a Jefferson, con lo que en este presente no hemos pasado por el suplicio de caer en las garras del psicópata de Jefferson. Las consecuencias son aparentemente positivas. Chloe está viva, Max entregó la foto para el concurso a tiempo, y además, ganó el primer premio. Nuestra recompensa es disfrutar del éxito y ver cómo se abren las puertas de nuestro futuro profesional en la exposición. Pero hay un pequeño problema…. Todo va rodado hasta que se monta la fiesta de la sangre en la nariz de Max, y la visión del tornado la vuelve a asaltar. Horrorizada, Max llama a Chloe y comprueba que, de hecho, el tornado está arrasando Arcadia Bay, tal y como sucede en su visión. La única forma de cambiar el presente es volver al pasado una vez más, y romper la fotografía que la hizo ganadora del concurso en esa realidad alternativa. Después de hacerlo, Max regresa a la Dark Room en esa nueva realidad, pero las consecuencias de alterar el tiempo empiezan a hacerse más patentes en cada viaje al pasado.
Aquí es cuando las cosas, a pesar de ir mal, se ponen un poquito a favor de Max. Con tantas idas y venidas al pasado, parece que en esta realidad David sí ha conseguido resolver el misterio de Arcadia Bay, y por tanto llega para “salvarnos”. Salvarnos entre comillas porque Jefferson le mata de un disparo cuando hace su primera aparición, pero con nuestra ayuda David consigue anticiparse a los movimientos del profesor y dejarlo noqueado en el suelo. Tendremos una conversación con David cuando nos libere, y nos dejará ver lo arrepentido que está de haberse portado como un capullo la mayor parte del tiempo. No es algo nuevo en el título de DontNod, y es que con personajes como Victoria ya hemos podido ver que no hay una percepción de blanco/negro, bueno/malo. David se preocupa por Joyce y Chloe, y precisamente es lo que le ha hecho llegar hasta la Dark Room, buscando proteger a su familia y al pueblo de Arcadia Bay en general. Sin embargo, Chloe no está viva, y cuando David nos pregunte por ella, tendremos que tomar la importante decisión de contarle la verdad o mentir para hacerle sentir mejor. Si le contamos la verdad, le meterá una bala en la cabeza a Jefferson, y se quedará totalmente destruido, preguntándose cómo demonios va a contarle a Joyce que ha sido incapaz de proteger a Chloe. Si le mentimos, se quedará bastante tranquilo, y nos animará a que salgamos a tomar el aire. Realmente, es una decisión importante que sabe a inútil, ya que nuestro objetivo en estos momentos es encontrar la forma de salvar a Chloe y cambiarlo todo para tener nuestro final feliz. Aún así, podemos optar por la vía que queramos.
Tras tomar la decisión, salimos fuera del búnker y cogemos prestado el coche de Jefferson para llegar al centro de la ciudad, ya que Max necesita ver a Warren para coger la foto que se sacaron en la fiesta del club Vortex y así evitar que Jefferson acabe matando a Chloe y capturándola a ella la noche anterior. De camino al centro, Max comprueba un mensaje de Nathan en su teléfono; Nathan sabe que Jefferson va a matarle en cuestión de minutos, y pide a Max perdón por todo lo que ha hecho, además de pedirle que se mantenga a salvo. Otro personaje que a pesar de todo, consigue casi sacarnos una lágrima. Casi todo el mundo ha usado a Nathan para sus propósitos, como él mismo afirma a Max en el mensaje. Personalmente, creo que los sentimientos que tengamos respecto a Nathan deben ser más complicados que pasarle la mano por la espalda y creer que actúa así porque tiene problema, o culparle de todo lo sucedido junto a Jefferson. De nuevo, DontNod nos recuerda con Nathan que todo es más complicado de lo que parece, y cada persona tiene su propia historia detrás, aunque no la sepamos de primera mano.
Una vez aparcado el coche en el centro, tenemos que llegar hasta el restaurante Two Wales, donde se encuentra Warren con la foto que nos salvará, y de camino podremos salvar a algunos ciudadanos de Arcadia Bay, como Alyssa o Evan. Nuestro primer instinto es salvarlos a todos, más bien por costumbre, pero lo cierto es que al final queda claro que volveremos al pasado y cambiaremos el presente, con lo que nada de lo que hagamos ahora mismo importa. Podremos pararnos y ayudar, en cualquier caso. Cuando lleguemos al restaurante tendremos tres conversaciones dramáticas con personajes importantes del juego; Joyce, Frank y Warren.
Joyce nos preguntará por Chloe, y al igual que con David, podremos optar por decirle la verdad o mentirle. Pero lo importante viene a continuación, ya que con nuestras opciones podremos hacer que Joyce cambie de opinión respecto a David si le echó de casa. Todo depende aquí de las decisiones que hayamos tomado en anteriores episodios. En cuanto a Frank (si está vivo), nos preguntará si la información que nos dio en el episodio 4 nos ha resultado útil, y si hemos conseguido averiguar dónde está Rachel. Podremos optar por decirle la verdad, o mentirle. Obviamente, si le contamos que Rachel está muerta y enterrada se quedará devastado, y más si optamos por la sinceridad brutal y le decimos que fue Nathan quien la mató con las drogas que él mismo le vendió al adolescente. Con Warren tendremos que tomar otra de las decisiones importantes del juego, y es que el nerd de Arcadia Bay tiene sentimientos especiales hacia Max, y se comportará como un caballero de armadura brillante con ella en el transcurso de la conversación. Con la foto de la fiesta en la mesa, podemos decidir entre marcharnos sin más, darle un abrazo, o besarle. No es que afecte de manera directa a lo que pasará a continuación, pero es una decisión importante si queremos consolidar nuestro ship con Warren, si es la pareja que nos ha gustado del juego.
Sea como fuere, Max y Warren se despiden, y nuestra protagonista vuelve al pasado, instantes antes de entrar a la fiesta del club Vortex que desencadenó la muerte de Chloe. Allí tendremos que poner al día a Chloe de lo que ha sucedido, y advertirle de que debe hacernos caso si no quiere acabar en el suelo con una bala en la cabeza. Aún con las reticencias iniciales, Chloe confía plenamente en Max, y las chicas deciden hablar con David para salir del entuerto sin que haya más bajas.
Ahora que hemos cambiado el pasado una vez más, el presente se ha alterado para dar paso a otra realidad en la que Max y Chloe se encuentran en la playa, camino al faro de Arcadia Bay, donde conseguirán librarse de la tormenta. Pero el precio a pagar es bastante caro, y da paso a la última parte del último episodio antes del gran final; LA pesadilla. Con mayúsculas.
Max se encuentra atrapada en una espiral de acontecimientos que exploran los temores encerrados en lo más profundo de su mente. Cada decisión que hemos tomado, es un poquito más de peso que Max ha ido cargando sobre sus hombros, e incluso podemos ver el temor al rechazo por parte de Chloe en la pesadilla. En este punto, podemos tomar los detalles de la pesadilla incluso como material potencial para fanfic o simplemente detalles anecdóticos por su mecánica basada en la resolución de puzles, pero yo prefiero tomarme la pesadilla como una forma de explorar el lado más crudo y humano de Max por parte de DontNod. Hemos visto a Max tragar con absolutamente todo lo que la historia le ha echado en cara. Ha tenido que salvar a una de sus amigas del suicidio, ver como su mejor amiga (y la chica a la que ama, si hemos tomado las decisiones adecuadas) moría repetidas veces, e incluso enfrentarse a un psicópata. Y aún así, siempre ha encontrado fuerzas para seguir adelante y ayudar a todas las personas que ha podido. El resultado es la pesadilla dentro de su mente en que se ha visto atrapada. De cada decisión ha surgido una rama de soluciones y consecuencias, y nuestra pequeña Max acusa el desgaste de todas esas decisiones que ha tenido que tomar. Por supuesto, DontNod ha coloreado el camino hacia el final de la pesadilla con una visita lacrimógena a los momentos más importantes de la semana junto a Chloe, porque al final todo se reduce a una decisión fundamental que sólo tiene dos opciones; salvar a Chloe y dejar que el tornado destruya Arcadia Bay, o dejar morir a Chloe y salvar al pueblo de su destrucción.
Después de esa decisión final que debemos tomar cuando salimos de la pesadilla, ya no hay más. Así de abrupto llega el final de Life is Strange. Salvar a Chloe, o perderla para siempre. Muchos jugadores entraron en furia y se vieron decepcionados por la ausencia de más escenarios finales, e incluso por la ausencia de material propio de fanservice (es decir, un beso final si decidimos salvar a Chloe, a pesar de que tenemos beso si la dejamos morir). No nos engañemos. Hay muchos factores decisivos a la hora de valorar el final de Life is Strange, y la ausencia de fanservice no es uno de ellos. Aunque elijamos el final en el que Max y Chloe acaban juntas, no es el momento ni el lugar para dar rienda suelta a su pasión, después de todo lo que ha sucedido. Teniendo esto en cuenta, tampoco podemos olvidar que DontNod se ha sacado de la manga una aventura gráfica que ha conseguido enamorar a muchos, a pesar del presupuesto tan limitado del que disponían. Y por si fuera poco, es preferible tomar ese final blanco o negro como una dosis de realidad, porque en la vida misma, pocas veces las cosas salen exactamente como queremos que salgan, y tenemos que tomar decisiones vitales que cambiarán a corto o largo plazo nuestra vida.
Como apunte final, os diré lo mismo que dije a Rogue charlando sobre el final de Life is Strange. Tenemos que amar a los videojuegos por lo que son, no por lo que podrían haber sido. Life is Strange es una historia muy conmovedora, con unos personajes que sorprenden y enamoran a medida que los conocemos. El misterio de Arcadia Bay nos ha mantenido en vilo durante nada menos que 4 episodios, que se traduce en meses de espera, y el final, aunque disguste a algunos por no hacer despliegue de una batería enorme de escenarios, tiene mucha lógica y carga emocional, independientemente del que elijamos. Obviamente, mi valoración final del juego ahora que ha concluido sigue siendo la misma que cuando lo comencé; es un juego de 10. Con él he reído, he llorado más de lo que estoy dispuesta a admitir, e incluso me he lanzado a la piscina y he publicado unos pocos fanfics (¡os prometo que no estoy promocionando mis fanfics!). Así que desde aquí, gracias DontNod por esta grandísima historia, y ojalá nos traigáis una segunda parte.
¿Qué os ha parecido el capítulo final de Life is Strange? ¿Os han gustado los finales? ¿Creéis que tendría que haber más opciones? Contadme, lesbicanarias. Hagamos terapia intensiva en grupo para ahogar las penas por decir adiós a nuestras amadas Max y Chloe.